Who you are

Capítulo 24

Puede que suene loco pero estaba empezando a sentirme muy atraida por ella, y es que en tan poco tiempo se ha adueñado de cada uno de mis pensamientos, y el hecho de tenerla lejos o imaginarla con alguien más me tenia en cierta manera mal.

Ella es de esas personas directas y sinceras, es trabajadora, valiente y fuerte. Una mujer inteligente y capaz, alguien que lucho por sus sueños y hoy tiene una de las mejores empresas de noticias del país, alguien que logro todo eso después de haberse criado casi toda su vida en un orfanato. Una mujer comprometedora, de carácter fuerte. Una mujer hermosa, muy hermosa de hecho. Pero... ¿Cómo alguien como ella podria fijarse en mí?. En una mujer de 300 años, que lo único que ha hecho es dañar a las personas, incluso a la unica persona que ha amado la dejo morir.

Mis ojos se llenaron de lagrimas solo al recordarlo, al saber que en cierta manera soy un mounstro, alguien que no merece ser feliz, y mucho menos con ella, esta fuera de mi alcanze tener a alguien tan perfecta como ella.

Me di cuenta de que ella estaba despertando, limpie mis lagrimas lo más rápido posible, y la miré.

Laura: Buenos días

-Buen día

Laura: ¿Cuanto tiempo llevas despierta?

-Aproximadamente 10 mintos

Laura: ¿Estabas llorando?

-Sí, ya que no siento mi brazo, porque alguien lo abrazo toda la noche y no lo siento (mentí)

Laura: Lo lamento pero es muy cómodo

-¿Aún te duele la espalda?

Laura: De hecho ya no, gracias

Y entonces un silencio se apoderó de la habitación, y no un silencio incómodo, más  bien un silencio placentero, en donde nos mirábamos a los ojos y nos entendíamos perfecto sin tan siquiera hablar. No podia dejar de mirar sus ojos cafés, tan hermosos y tan profundos, podría mirarla toda la vida y no me aburriría

Laura: Hoy es nuestro último día en Francia y Lena y Kara nos invitaron a su casa a comer hoy a las 2 de la tarde

-Esta bien, me doy una ducha y bajamos a desayunar

Laura: Nuestro vuelo sale hoy a las 9:00pm

-Esta bien. Me daré una ducha. Ya hablamos.

Salí de la ducha, bajamos a desayunar y regresamos a la habitación. Aún eran las 12:00pm

Laura: Te gusta leer?-dijo saliendo al balcón a tomar aire y apreciar la vista

-Es lo único bueno que se hacer

Laura: Y esos masajes también

-Bueno, la mayoría del tiempo leo, y jamás habia hecho un masaje para alguien, pero después de leer como hacer uno bueno lo hice

Laura: Nada mal

-Y a ti que te gusta hacer

Laura: La mayoría del tiempo me la paso trabajando, no tengo tiempo para casi nada

-Ohhh, y tu plato favorito? Cual es?

Laura: No lo se, jamás me habian preguntado eso... No tengo una respuesta para ti en este momento... Y el tuyo? Cual es tu plato favorito?

-El plato hondo, porque cabe más comida. JAJAJAJAJA

Laura parecía no entender y solo levantó una ceja.

-¿No entiendes? ¿Plato? ¿Hondo? JAJAJA

Parecía patética riendome de mi propio chiste y Laura solo me miraba con cara de que no entendía una mierda

Laura: No entendí, y no quisiera explicaciones, con todo respeto jajaja

-Acabas de romper mi corazón-dije bromeando

Laura: ¿Me perdonas?-dijo recargando su cabeza en mi hombro

Y entonces mi respiración se empezo a agitar, tenerla cerca hacia que perdiera el control, sin embargo debería de controlarme

-Te perdono

A su lado soy la persona más patética del mundo. ¡Joder!

Nos miramos por unos segundos y ella me besó.
No tarde en corresponder su beso, tan tierno, en él me daba seguridad, me daba felicidad.

Ella puso sus brazos en mi cuello y yo en su cadera.

No existía nada más que nosotras.

Entonces nos separamos, ella junto su frente con la mía y sonrió. Haciendome sonreír también.

Laura: Debemos ir a casa de Lena y Kara

Y pasó la tardé en casa de nuestras amigas, pasamos una tarde llena de risas y nos despedimos de ellas.

Llegamos al hotel y guardamos nuestras cosas en nuestras maletas.

Llegamos al aeropuerto esperando nuestro turno.

Laura: Me alegra que hayas venido conmigo.

-Trabajo es trabajo señorita.

Laura: Tu compañía me hace bien. Gracias Carm.-dijo dandome un beso suave en el cachete.

Entramos al avión y llegamos aproximadamente a las 4 de la mañana a New York.

Laura pidió un taxi que esperaba por nosotras a fuera del aeropuerto.

Y entonces el taxi se estacionó fuera del departamento en donde vivo.

Laura: Buenas noches Carmilla, puede tomarse el día libre mañana.

-Gracias señorita.

Laura: Recuerde que fuera de la empresa  soy Laura.

-Esta bien Laura. Nos vemos.

Laura: Espera!

Antes de bajar me jalo y me dio un beso suave y rápido en los labios.

Laura: Descansa.

-Lo haré.

Y claro que descansaré después de ese beso.