Tu eres mi sol. Escanor x Lector.

Amor secreto

Los pecados observaban al gran hombre golpeando los árboles hasta el punto de romperlos a la mitad, así estuvo el día entero para luego entrar y ayudar, claro que casi no ponía atención. Meliodas espero a que se fueran para hablar con él sobre lo que había pasado esa tarde.

Meliodas: Hola Escanor.

Escanor: ¿Qué es lo que ocupa señor Meliodas?

Meliodas: Quiero hablar sobre lo que pasó hoy, se que estás preocupado por ella pero conociéndote se que vas a quedar salvarla sólo y conoces la regla 7 de los pecados capitales.

Escanor: Jamás dejar solo a uno de los pecados, lo sé pero para ser sincero me siento muy inútil al no poderla salvar de ese asqueroso demonio.

Diane: Hey sabemos que estás triste pero no debes hacer una locura, no sabemos dónde está y tal vez la tiene en una prisión.

King: Diane tiene razón, primero hay que averiguar a dónde se la llevaron. Necesitamos encontrar su guarida.

Gowther: Por lo que tengo entendido los mandamientos se encuentran el reino de Camelot, exactamente en el castillo. Hay un 76% de que se la hayan llevado ahí, aunque no va a ser fácil. Sé que hay mucho más demonios vigilando el área.

Escanor: ¿Y qué suponen que debemos hacer?, ¿Quedarnos sentados son hacer nada?

Merlín: Yo opino que debemos esperar hasta saber un poco más de datos para luego atacar.

Algo en el interior del pelinaranja ardía con esas palabras, no sabía la razón pero no le gustaban esa frase. Quien sabe la clase de tortura a la que le estén sometiendo.
Pasando con los demonios, todos estaban esperando a que Estarossa se presentará a la cena y poder interrogar lo por todo lo que hizo hoy. Casi 30 minutos después el peligris se apareció en el lugar y se sentó en la mesa junto a ellos.

Estarossa: Hola chicos, ¿Qué hay de cenar hoy?

Zeldris: ¿No vas a decir nada sobre lo que hiciste?

Estarossa: No se de qué me estás hablando.

Gloxinia: ¿Tal vez está hablando de lo que pasó en la aldea el día de hoy en el que te superaban en número y casi te vencen de no haber sido de nuestra llegada?

Estarossa: Ah eso, bueno ocupaba ir por algo.

Drole: ¿No querrás decir alguien?

Estarossa: Tal vez, pero no le veo nada de malo.

Gloxinia: Estaría de acuerdo sino fuera porque casi te vencen hoy. Además, parece que esa chica no está muy feliz de que la trajeras aquí y ¿Esa es una mordida?

Estarossa: Quizá, pero vaya que es asombrosa.

Chiara: Buenas noches grandes majestades, les he traído la cena. Es un plato de carne de dragón con una ensalada a lado, de las mejores cosechas. Enviadas por los pueblos, también trajeron un delicioso vino.

Derriere: Ya era hora, estaba a punto de buscarte para ir a comer tu insignificante alma.

Chiara: Lo lamento mucho, los cocineros están... Olvidé lo es fue mi error.

Estarossa: Chiara, ¿Podrías hacerme el favor de acompañar a nuestra invitada?

Chiara: Con gusto amo Estarossa.

Estarossa: Te he dicho que no me digas amo, me hace sentir muy viejo.

Gloxinia: Técnicamente eres muchísimo más viejo que ella.

Fraudrin: Tiene razón.

Zeldris: Sólo cállense y coman en paz, ya te puedes retirar.

Chiara se fue a una habitación en la torre más alta del castillo, tocó la puerta y entró encontrando a la chica con una silla lanzando la contra las rejas de la ventana.

Chiara: No creo que eso vaya a funcionar, te quedarías sin silla y con un gran reclamo.

Clarise: ¿Qué, quién eres tú?

Chiara: Mi nombre es Chiara, Estarossa me mandó a hacerte compañía.

Clarise: ¿Ese demonio? No me digas que te capturaron y te obligaron a ser su sirvienta. Esos demonios.

Chiara: Algo así... Pero no son tan malos como crees.

Clarise: ¿Qué, cómo que no son tan malos?

Chiara: Es cierto que al principio les tenía miedo pero conforme pasó el tiempo logré comprenderlos mucho mejor. Recuerdo que una noche de gran tormenta tenía tanto miedo que no podía dormir así que me quede a limpiar la sala del trono, después de un rato Estarossa apareció preguntándome que hacía una humana despierta aún, intenté mentirle pero notó mi temor y se quedó conmigo hasta que me durmiera. Después de eso comenzamos a hablar más, era mucho más amable y me ayudó a mejorar mi relación con los demás.- le dijo sonriendo con un pequeño sonrojo.- Es alguien asombro

Clarise: Parece que son muy unidos.

Chiara: ¿En serio crees eso?

Clarise: Sip, no solo eso... ¿Te gusta Estarossa?

Con esas palabras la cara de la chica se pintó de un color rojo parecido al cabello del hada, lo que sacó una pequeña risa a Clarise.

Clarise: Descuida, guardaré tu secreto si tú haces lo mismo por mí.

Chiara: Claro pero, ¿Cuál?

Clarise: ¿Conoces a los pecados capitales?.- la joven asintió.- Hace un tiempo que estoy con ellos y, dios,  conocí a mi idolo. Convivimos tanto que creo que me... Enamore, aunque la señorita Merlin no parece agradarle.

Chiara: Bueno, tal vez está celosa. Me gusta poder hablar con alguien más sobre ésto.

Clarise: ¿No hablas con nadie de esto?

Chiara: Sí, hay alguien con quien habló de mis sentimientos.

Clarise: ¿Entonces, quién es?

Gloxinia: Su servidor señoritas, escuché todo y te les voy a dar el mejor consejo de sus cortas vidas. ¡¡DÍGANLES LO QUE SIENTEN!! Le he insistido a Chiara que se le declaré a Estarossa pero NO, siempre dude “Él no me ama o ¿Qué pensaran si lo hago?” aunque seamos sinceros los dos se ven bien juntos. Y tú pequeña enamorada 2, haz lo mismo, quien sabe cuándo será el último día. Pierden mucho tiempo.

Chiara: No, ya te he dicho que eso es...

Gloxinia: Difícil, ya lo sé.

Chiara: Cuando tu te le declares a Balor nosotras lo haremos.

Gloxinia: Eso es diferente.- el hada estaba totalmente sonrojada con ese reto.- Además, de seguro me le declaré pronto. Ya sea en capítulos posteriores o en la otra historia. Lo que pasé primero.

Las dos chicas se miraron confundidas por la respuesta del chico pero no le dieron más importancia, pasaron toda la tarde hablando sobre sus amores secretos.