Cap 18

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Gretel estaba en el pantano. No quería hablar con nadie, así que apago su celular.
Se sentía frustrada, desaminada y sobre todo engañada.

Sabías que iba a pasar.

Si, si lo sabía. Pero se lo había estado negando y ahora resulta ser real… Nick jamás la va a amar como debiera ser. Sollozo.
Camino por todo el pantano hasta llegar a la orilla del lago pegajoso y mal oliente.

¡Puaj!

—Creo que es mejor el lago que Nick, He sido una tonta.

Él solo quiere acostarse conmigo y luego dejarme.

Gretel se había olvidado por completo que estaba en celo. Eso podría haber sido la razón por la cual quiera arrancarle la ropa, ya que era virgen. Para una virgen es más peligroso porque no saben controlarse. Y él como si nada.

—Como odio estar así.

—Nosotros no. Es nuestro mejor momento…

Gretel se voltio y se encontró con un grupo de lobos…

¡Diablos!
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Nick estaba impaciente, ver a Ayel sentada en el piso con las piernas cruzadas con los brazos extendidos a los lados y los ojos cerrados respirando lento… ella
estaba haciendo yoga, no buscando a Gretel.

—¿Ya mero?

—Es la 10° vez que me lo preguntas…—Ayel gruño

—Lo sé, sólo quiero saber… d

—Si me interrumpes a cada rato, nunca la localizare. —Le dijo con voz irritada

—Perdón, continua…

Ayel suspiro, lo que intentaba hacer era localizar a Gretel por medio del olor característico de una hembra en celo. Pero era difícil ya que ella misma le enseño casi bien a esconder su olor, casi.
Ahora estaba buscando su punto débil y no era fácil sobre todo si te interrumpen.

—Eh…

—¿Ahora qué? —siseo

—Nada… sólo me preguntaba… ¿no es mejor que yo la busque olfateando?

—Yo le enseñe a ocultar su olor. Será difícil para ti buscarla, ahora me dejas…

—Si claro, continua.

—Bien.

Ayel se concentró lo mejor que pudo.
.
.
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Urías estaba paseando por los árboles. Su pasatiempo favorito. Ya que se había “quedado” en esta época tenía que buscar como distraerse. Hoy había decidido visitar el pantano. No sabía porque pero lo hizo. Estaba a punto de bajar del árbol cuando vio a un grupo de lobos rodeando a una muchacha mientras ella peleaba
ágilmente. El líder era humano.

Were-hunters...

No tenía que entrometerse… sabia por experiencia que a los were-lobos no les gustaba cuando alguien se metía en sus “asuntos”. Al parecer la mujer estaba en celo.

Bien será divertido.

Por lo general la mujer es la que escoge a su pareja, y si alguien la forza a estar con él, ella tiene la suficiente fuerza para matarlo.
Pero examinando bien, ella no parecía estar eligiendo. Más bien estaba asustada, la chica no era de su manada. Más bien él la conocía…

¡La chica del club!
.
.
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Ayel se levantó de golpe. Ya sabía dónde estaba Gretel… y no era bueno.

—Ve por ayuda…

—¿Dónde está?

—Tú ve por ayuda y nos vemos en el pantano.

Antes de que Nick dijera algo Ayel se teletransporto hacia el pantano…

Del Amor al Odio. | Trilogía Were Hunter #1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora