Cap 8

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1 año después…

Ayel corría con toda su fuerza, no pensaba rendirse sin antes no dar su último esfuerzo, cruzó el barrio francés con sigilo para que no la vieran. Ya mero llegaba al club “el infierno”, sólo un poco más y lo lograría. Sintió que la alcanzaban.

Ja’ no voy a dejarte ganar...

Necesitaba llegar antes. Ya tenía planeado como subiría al
techo, lo que no pensaba era hacerlo en pantera.

No me rendiré...

Diviso a lo lejos el club, ella subiría al techo por la parte de atrás con la ayuda de unos contenedores y una escalera empotrada en la pared, anteriormente el club era un
hotel o al menos eso le dijeron los dueños al preguntarles. Diviso los contenedores con los que subiría, podría hacerlo con magia pero era mejor dar su esfuerzo.

Bien, eso será útil...

Subió los contenedores y llego a la escalera, corrió. Llego al
techo.

Al fin, ahora lo que vine a buscar...

Corrió hacia un poste pequeño que
contenía una bandera. Se abalanzo sobre ella para tomarla. Alguien más salto sobre ella y tomo la bandera antes de que ella lo hiciera, cayeron cada uno a los extremos del techo. Se levantó con un dolor punzante en sus costillas, miro al animal que la había alcanzado, cuando ella se puso en pie. Un lobo, un lobo grande y fuerte color miel, sus ojos eran aceitunados, tirando a verde, azul y gris. Tenía en el hocico la bandera negra. El lobo era…

¡GANE!

Ayel gruño —presumida...

—¡Oh sí! Te gane ja’ a ti… “la ágil y atlética Ayel”

—No te emociones Gretel, te deje ganar.

—Si claroooo. ¡Te gane!

—No tendrás tanta suerte para la próxima.

Siempre que Ayel y Gretel se mudaban de cuidad hacían carreras por la noche una semana después de haberla recorrido por el día y trazando rutas para poder correr en la noche sin que los humanos las vean.

bien. Ya que gane…

—¿Podemos al menos bajarnos y luego hablar de mi derrota?

—Ok, las perdedoras primero...

Ayel le gruño y Gretel le mostro los dientes. Ambas bajaron del techo…

Luego del repentino y planeado ataque hacia los Katalis Gretel y ella nunca se quedaban en un mismo sitio mucho tiempo. Técnicamente han viajado por todo el mundo. Gretel heredo el dinero de sus padres, sus propiedades, todo. A la policía le pareció sospechoso que sólo ellas estuvieran “de paseo” mientras la casa fue incendiada, por suerte uno de los criminólogos era un were-hunter y al contarle lo que paso les ayudó a salir del problema. Gretel siempre le dice que podían conseguir una casa a lo lejos de la cuidad, cerca del boque. Pero Ayel sabe que los centinelas la buscan. Siempre se quedaban en un sitio unos meses y luego viajaban. Por lo general ella trabaja para poder comer, no dejaba que Gretel se moleste, Gret siempre le dice que con el dinero que sus padres podían vivir bien cómodas por unos 500 años, hasta más. Pero Ayel siempre veló por ella y su hermana. Ahora haría lo mismo por ambas, quedaron en que Ayel trabaja y ella escogía la cuidad a la que quiera ir ya que ella da el dinero del viaje.

Del Amor al Odio. | Trilogía Were Hunter #1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora