The Writer Muse's. (Kaylor)

Hablándole Con La Verdad.

Hola buenas noches perdón por la tardanza, pero ya estoy aquí para dejarles el penúltimo capitulo, ya sé, ya sé que es muy corto pero la historia es corta realmente y creo que calcule mal >.<' y bueno quedaron muy cortos los últimos dos capítulos, en fin espero que les gusten :3 y mil gracias por sus comentarios, votos, todo eso :p gracias.

La chica empezó a llenar los datos y pronto Taylor tomaba un vuelo que haría escala para finalmente aterrizar en San Luis, sería un viaje largo ya que prácticamente viajaría toda la noche.
Por su parte Karlie tenía todo listo para salir de la casa, no regresaría en mucho tiempo de eso estaba segura, era temprano aun no daban las siete cuando abrió la puerta principal y ahí estaba esa mujer rubia, alta con ojos llenos de ternura y amor, que le sonrió a penas la vio para luego lanzarse a sus brazos.

— Tengo que irme Pam, mi vuelo está por salir en breve y en verdad debo tomarlo.
— Tenemos que hablar, mi amor.
— Por favor, Pam – Pidió en suplica.
— Es hora de poner las cartas sobre la mesa Karls, no podemos seguir así, él está completamente fuera de control y ya no puedo ver como Gigi te protege de todo y todos, yo sé que te ama y te protegerá con todas sus fuerzas, que te conoce y piensa demasiado parecido a ti, por eso hace lo que hace, pero yo también te amo y la amo a ella, pero esto ya llegó demasiado lejos; o lo detenemos aquí o jamás va a parar, y estoy dispuesta contarle todo a Pamela y David – Sentenció Cara tras de "su madre".
— Voy a perder mi vuelo, y realmente no deseo hacerlo.
— Te prometo que Mike te llevará en el jet – Le sonrió Pamela.

Karlie se hizo a un lado suspirando derrotada y ambas chicas pasaron y tomaron asiento en la sala, Cara se despidió y les dio su privacidad por su parte Abby aún seguía dormida así que no había problema por ello de que tuviera que dejarlas solas para charlar.

— ¿Y bien? – Preguntó Pamela.
— No sé cómo empezar – Sentenció Karlie.
— Lo primero que venga a tu mente, partamos de ahí.
— Calvin me odia – Brotó de su boca.
— No es verdad, amor – Le tomó la mano.
— Claro que sí, ha hecho todo para arruinar mi vida.
— ¿Por qué lo dices?
— Desde que llegue a tu casa él y David se sintieron extraños conmigo, aunque después David se acoplo a que yo invadía su vida, se comportó como si fuera mi padre.
— Es tu papá, cariño – Sonrió Pamela.
— El punto es, que creo que a Calvin no le hizo gracia el que decidieran llevarme con ustedes, después de ello pareció aceptarlo pero sin ustedes cerca solo me torturaba – Suspiró.
— ¿A qué te refieres, Karlie? – Expresó con seriedad.
— ¡Estoy enamorada! – Gritó – Sabes, primero que nadie que hubo una época en la que estaba confundida acerca de mi sexualidad – Su madre asintió – Pero no creí que fueras a decirle a todos – Bajó la vista.
— No le dije a nadie cariño, hasta que tu decidiste hacerlo – Su rostro mostraba confusión.
— Bueno pues ese día él vino a verme a mi habitación – Sus ojos mostraron lágrimas y sus manos comenzaron a temblar ligeramente – Me dijo que él iba ayudarme a descubrir que sucedía conmigo, que me enseñaría como era estar con un hombre de verdad y no con tontos como los de mi colegio, me acorraló contra la pared y su cuerpo para luego...

Las palabras ya no salieron, Karlie había roto en llanto y Pamela tenía el rostro descompuesto entre pánico y sorpresa, se acercó a su hija para envolverla en sus brazos dejando que la chica sacara todo eso que traía dentro aguantando ella sola, cuando se pudo controlar un poco más volvió a observar los ojos verdes de su madre adoptiva.

— Comenzó a besarme los labios, el cuello, el hombro, mientras sus manos me sujetaban fuertemente, y me tocaban todas partes, realmente no supe cómo me deshice de él antes de que algo pasara, le dije que les diría a ti y a David así que solo se rio y dijo que de entre él y yo a quien pensaba que iban a creerle, él tenía razón.
— No es verdad.
— ¿Por qué no? Él es su hijo de verdad, no había oportunidad alguna de que me creyeran.
— Por supuesto que te hubiera creído, Karlie.
— Ya no importa, de todas formas, él se quedó con ella.
— ¿Ella?
— Calvin toma todo lo que yo quiero o deseo desde aquella vez, le dije que me gustaban las chicas y que me dejara en paz, así que desde ahí todo lo que yo quería él lo obtenía, las chicas, las vacaciones, las reservaciones de hotel, restaurantes, fiestas, fechas que para mí eran importantes, él tenía ya un plan que comunicarles a ustedes primero que yo – Suspiró – Y ahora tiene a Taylor.
— Cariño...
— La primera vez que la vi todo en mí se removió, se veía tan hermosa, tan preocupada y estresada que los gestos que hacía me encantaron, él lo supo por que después se acercó a pedirme disculpas por todo lo que había hecho así que lo perdoné, pero nada entre nosotros volvió a ser lo mismo, me preguntó por Taylor así que le dije todo lo que sabía de ella porque creí que en verdad había cambiado, pero no fue así, cuando volví a verlo llevaba a Taylor como su novia, se "comprometieron" y se fueron a vivir juntos así que luego él me llamó para decirme que necesitaba ayuda en algo con Taylor, así que accedí porque se trataba de ella, no voy a mentirte, cuando llegué ahí de inmediato intenté lo que hubiera intentado de no ser porque Calvin no me dejó, así que tenté a Taylor y la chica me miró, sé que tal vez no hice bien, pero me la llevé a la cama, la hice mía, le mostré mi verdadero yo y ella me dejó saber quién era y terminamos enamoradas la una de la otra, pero como siempre, Calvin la llenó de mentiras y ella terminó odiándome porque cree que le mentí, que sólo la use.
— Tendré que hablar con Calvin.
— No me importa lo que Calvin quiera hacer o no, ya nada me importa – Se levantó.
— Karlie...
— No, no, nada me interesa, ahora sólo quiero irme y perderme del mundo, de todo y de todos por largo tiempo.
— ¿De todos?
— Si.
— ¿También de mí?
— Pamela...
— Va a ser cumpleaños de tu papá, y quisiera que fueras, hace tiempo que no te vemos.
— Escucha, él no es...
— Ya sé, ya sé, no es tu papá, pero legalmente lo somos y te amamos como si fueras nuestra de verdad.
— No iba a decir eso – Se encogió de hombros – Iba a decir que seguramente Calvin estaría ahí, y no quiero verlo por el momento.
— Hablaré con Calvin, no sólo tú eres la que tiene algo que confesar – Se agachó.
— ¿Qué sucedió?
— No fue la única vez, que intentó algo contigo.
— ¡¿Qué?! – Gritó.
— Eras una niña, recién habías llegado a casa con nosotros, los primeros meses fueron difíciles para ti, especialmente unos días estuviste muy inquieta, despertabas en la madrugada asustada, decías que soñabas con aquel accidente en el que gracias a Dios no estuviste – Apretó su mano – Así que me levantaba a darte una vuelta y ese día no fue la excepción, vi la puerta de tu habitación ligeramente abierta, así que me asusté, pensé que te habías salido de la casa, caminé a prisa a ver si seguías ahí y si, lo estabas, pero Calvin también, traía sus pantalones abajo mientras se masturbaba y estaba sobre ti, me asuste porque tú estabas dormida completamente, así que sin pensarlo le hablé a tu padre que corrió de inmediato, también se sorprendió de ver a Calvin y lo sacó de la habitación, tu despertaste asustada por mi grito, así que te tomé en brazos, los siguientes días no dormí con tu padre por estar juntó a ti, no quería, ni podía permitir que Calvin hiciera otra cosa de esas, así que lo llevamos a terapia donde nos dijeron que él ya estaba bien, así que dejamos de estar vigilando sobre su hombro pero si tú nos hubieras dicho que él había vuelto a intentarlo, sin duda habríamos tomado cartas en el asunto.
— Pensé que no me creerían, así que por eso mismo dejé de estar cerca de él y de ustedes, no quería tener problemas con ustedes por culpa de él, es su hijo verdadero, así que no iban a creer en mí, al final de cuentas es su palabra contra la mía – Suspiró.
— Jamás Karlie, jamás dudaremos de tu palabra, incluso si es contra Calvin ¿de acuerdo?