Prólogo

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Presente

«La vida no es un juego:donde las reglas ya están impuestas, donde te mueves de acuerdo a ellas. Es mucho más expuesto. La vida es un rompecabezas. No porque tengas que armarlo, sino deshacerse de él. Desde que naces, detrás tuyo: te inculcan valores, creencias, límites; piezas que se arman involuntariamente. Hasta que llega ese momento, luego de haber crecido, donde aquellas piezas no te sirven. No te sientes a gusto y tiendes a emprender tácticas, saberes para desarmarla y poder ,así, encontrarte. Y te ves ahí, situada en ese momento donde hay que extirpar la última pieza que podría terminar de noquearte o estabilizarte, porque la ruleta empieza a girar:"Un olor.Una fotografía.Un objeto; un paisaje,  que tuvo tal osadía de abrir sus ojos cuando te concentraste en la sombra de las escaleras que no puedes subir, pero tienes que hacerlo.El desliz del viento surcando entre los agujeros negros del recuerdo.El tamboreo del  pecho...y aquel momento que se vieron paralizado  dos corazones que luchaban en dirección contraria pero que, siempre, marchaba en dirección parcial hacia su encuentro." Es solo algo, que queda vagando en la incertidumbre, en la pérdida.¿Cuántos latidos bastan para que dejes de ser?¿Cuántas sonrisas a medio camino?¿Cuántos pasos recorridos que se desprenden de tu autoría?La vida es un vaivén.A veces, suave, aterciopelada y cálida como la sonata muda de las nubes al explayarse por el cielo; otras, caótica, distorsionada y desenfrenada como el impacto de una tormenta.No hay punto medio porque cuando tratas de sumar uno más uno se le agregan ceros.Cuando tratas de sostenerte de la cuerda que los mantiene Se ven a distancia, cayendo en picada.

Y todo comienza de nuevo»

Las estaciones susurran tu nombre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora