El verano pasado fue el más emocionante y la vez el mas duro de mi vida. Pero nada comparado con lo que sería este invierno...
Ahora me doy cuenta de que igual, yo no era tan fuerte como creía.
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Abby💜
Estos pijos eran unos auténticos falsos. Sus papaítos pondrían el grito en el cielo si supieran que es lo que hacían sus hijos en este campamento.
- ¿Te vas a quedar en la puerta toda la noche? - me preguntó Raven.
-Pobre...nunca ha visto nada igual, debe estar en estado de shock- añadió Josephine con intención de hacerme saber que yo no pertenecía a su mundo.
Aquel lugar era desmesuradamente grande y nada más entrar entendí el por qué ese empeño en que llevásemos algo blanco. La luz que había era ultra violeta. Así que todo lo de color blanco se veía fluorescente. La música sonaba a niveles ensordecedores, era imposible que te enterases de algo que te quisiesen decir, y cambiaron la canción a, Uncover-Zara Larson (Afterfab remix). La gran sala estaba presidida por el Dj, que se encontraba subido a una tarima muy alta, a cada lado de este se hallaban dos camas elásticas donde la gente saltaba con los vasos en las manos salpicándose ellos mismos y a todo el que estuviese a su alrededor. Los flashes blancos hacían que pareciese que todo aquel que se movía lo hiciese de forma muy lenta, era como si estuviese viendo una galería de fotografías en la pantalla ordenador.
Cañones de humo blanco salían disparados a cada rato haciendo que no se viese nada en absoluto. Con trabajo intenté no perder de vista a mis maravillosas compañeras de habitación. Si hubiesen sido mis amigas, Hanna, Jess o Mía... Seguro iríamos cogidas de las manos. Pero estas imbéciles no eran mis amigas.
Todo el mundo estaba muy pegado, bailaban de forma muy sensual, la mayoría de los chicos iban en pantalón blanco y prescindían de la parte de arriba. Y las chicas directamente iban en ropa interior, muchas de ellas lucían el cabello húmedo. Se besaban como locos. Ya fuese con alguien de su mismo sexo o distinto. Besos de todos los tipos y colores, y sí, también pude ver cómo se pasaban pastillitas de la felicidad con la boca. Aquello era puro desfase, no había reglas ni control alguno.
Casi me distraje, pero volví a centrarme y pude encontrar el moño espeso de nuestra Jo, y la seguí. Las tres cruzaron otras puertas, estas dieron a otra sala. En esta, la música sonaba más baja, pero los que estaban allí no se comportaban como angelitos ni mucho menos. Y deduje al ver la piscina que, por eso muchos se mostraban mojados. Estaba cubierta por una capa de espuma, era enorme, y creo que cuando digo enorme me quedo corta. Otro Dj diferente al de antes se situaba al borde de esta con su equipo haciendo sonar la música, que aquel momento era bastante movidita JBalvin & Willy William -Mi gente (Akela Remix). Varios tíos con pistolas de agua disparaban chorros hacia la piscina, pero cuando vi que los que estaban dentro abrían sus bocas para recibirlo intuí que aquello podía ser de todo menos agua. Escudriñé la sala con la boca abierta, no dejaba de sorprenderme cada parte que veía de aquel lugar.
A mi derecha un tatuador se encontraba tatuando a esos niños y niñas de papá. Claro que solo en partes donde sus padres no pudiesen vérselos. Ingles, oblicuos, tobillos o parte baja de la espalda. Algunas incluso en el mismo trasero.
