P.D.V Paula
-levántate - me grito.
Le hice caso, por que me iría peor.
Me hizo caminar y al salir de la habitación en donde me tenían pude darme cuenta de que se trataba de la misma casa donde comenzó todo, creí que nos habían movido de esta casa hace mucho.
-¿nunca nos fuimos de aquí?-pregunto confusa
-claro que si, pero se acerca el momento, lo presiento - habló.
Me tomó por el cabello y me adentro a otra habitación, puede ver a mi hija y en los brazos a mi pequeña sobrina de tan solo dos meses, mientras nos acercábamos pude notar que al igual que yo mi hija tenía unos moretones en sus mejillas.
-me dijiste que no la tocarias - le reclame muy furiosa.
-¡upss!, no pretendía cumplir mis promesas.
Me dejó justo al lado me mi hija, a la cual abracé demasiado fuerte.
P.D.V Gustavo
-entonces...
-oye, no puedo quedarme, en primer lugar vine por ella y no hay motivo de que me quede.
-¿yo no soy suficiente motivo? - pregunte
Con su mano tomó una de mis mejillas e hizo que la mirara.
-eres una razón mu especial, pero no podemos ahora.
Me acerque a ella y le ragale un beso en los labios.
-¿al menos seguiremos en contacto? - pregunté.
-todos los días.
-¿vendrás a visitarme?
-cada vez que pueda.
La abrace muy fuerte, al igual que ella me daba la sensación de que tampoco quería despedirse, como si también quisiera quedarse a mi lado.
-esto no es una despedida - dijo
-siempre dicen eso cuando saben que es una despedida - la mire a los ojos.
Note que los suyos comenzaban a cristalizarse.
-no lo hagas más difícil - susurro.
-te extrañate Diana - dije.
-y yo a ti demasiado Gus.
Sentí una mano en mi hombro e hizo que volteara de inmediato y dejara el abrazo.
-amigo creo que debes dejarla ir - habló Andy.
-Diana, creo que ya debemos irnos... - entro Daniela por la puerta.
Nadie quizo despedirse de Daniela, o bueno, nadie tenía los ánimos de hacerlo, ella se adentro a la casa y se acercó a Andy.
-¿podemos hablar? - pregunto
El ignorandola se dio vuelta y se fue hacia su habitación.
-buen viaje chicas. Ambas se despidieron con las manos y se fueron.
P.D.V Mauricio
-se siente tan vacío aquí - habló Julia.
-¿tan vacío? - la abrace por la cintura.
Ella coloco su cabeza en mi pecho abrazandome fuertemente.
-a tu lado nada es vacío.
-hay algo que debes saber - dije captando su atención-al parece hemos dado con la casa donde esta Amber, hemos comenzado a planear las cosas, muy pronto tendremos a nuestra hija, junto a nosotros, solo los tres, te lo prometo.
Bese su frente.
-Mau, eres lo mejor que me ha pasado, nunca me había creído todo esto, si alguien me lo hubieses dicho.
-ni yo.
P.D.V Emi
-¿como va todo por allá? - pregunté
-estamos bien, aunque Aron no deja de preguntar por ti, le he dicho que estas trabajando, lo entiende pero aún así quiere verte - habló mi dulce esposa por el teléfono.
-¿y tu?
-te extraño cada minuto del día, aunque tengo mucha compañía con el bebe, hemos pasado las náuseas con éxito, y ahora no tengo antojos.
-eso me parece más que perfecto, prometo volver muy pronto, por acá todo es complicado, ustedes son mi motivación diaria.
-te amamos - sonreí antes aquellas palabras.
-yo los amo - dije.
La llamada terminó.
P.D.V Yael
Estaba decidido, tomé el bastón y con esfuerzo me levante de la cama, Jelly me veía ansiosa en la esquina del cuarto, había conseguido levantarme, ahora tenía que caminar.
-trata de caminar hacia mí - habló Jelly.
-caminar hacia el amor de mi vida, eso sí es motivación - dije y pude notar que sus mejillas comenzaban a teñirse de color.
Di un paso tras otro, eran algo arrastrados pero lo hice, camine y llegué hasta ella, quedé justo enfrente de ella, estábamos muy cerca, este era lugar donde quería estra siempre.
Estar cerca de ella, a su lado, y no haría nada para dañar eso de nuevo.
-¿algún premio? - pregunté acercándome a ella con una sola intención en mente.
-¿por que debería de haber un premio? - pregunto
-por qué quieres hacerlo - susurre.
Me acerque a ella, pero ella fue quien acortó la distancia, y me beso, sentí que ni el bastón que tenia de apollo me podría sujetar, sentía que iba fallecer ahí mismo, ambos aportamos algo a ese gran beso que nos habiamos dado.
-son esas las cosas que me motivan a caminar - hable y ella sonrió.
Salió de la habitación.
La puerta se abrió de nuevo, pero está vez era mi hijo quien se encontraba en la entrada.
-papá, ¿puedo hablar contigo? - claro.
Mi hijo al inquieto entró en la habitación, lo notaba por la forma en la que jugaba con sus manos mientras caminaba, ambos tomamos asiento en la cama.
-¿que ocurre? - pregunté.
-me gusta alguien, una chica que es muy guapa.
-¿y que hay de malo con eso?, No hay nada de malo, si te gusta, conquistala, claro, si crees que vale la pena.
-creeme papá, vale la pena, es una chica fuerte, inteligente y muy guapa, es todo lo que pudiera imaginar.
-¿hay algún problema?
-claro que lo hay - coloco sus manos en la cara y se tiro a la cama - es que en realidad esa chica jamás me hará caso.
-hijo, haste notar, que sepa quien eres y que sepa que quieres algo con ella.
-ese es el problema, ella me conoce pero...
-¡Carajo te mando a la zona de amigos! - dije.
-algo así.
ESTÁS LEYENDO
Venganza [3 Parte]
RomanceHay veces en las que prometemos no cometer los mismos errores, o que simplemente jamás sucederán, Pero nunca digas nunca, ya que la vida tiene una forma divertida de darle la vuelta a las cosas. Los seis chicos tendrán que tomar sus antiguas técnic...