—Por suerte, no tiene ningún órgano o hueso dañado a causa de los golpes —comentó el doctor sosteniendo la ficha del paciente—. Chico, si necesitas que te asesore un abogado o ayuda psicológica, no dudes en venir de nuevo y buscarme.
Hoseok asintió algo cohibido, no solía asistir a hospitales y mucho menos ser el centro de atención de muchas personas, había visto muchas películas y ya sabía que tan chismosas eran las enfermeras.
Miró a Yoongi y este le sonrió, dándole alivio.
—Bueno, dejaré entrar al oficial de policía —avisó el doctor, sorprendiendo a Hoseok y a Yoongi—. Aunque no es un caso tan grave, necesitan saber que sucedió para poder procesar a quienes te hicieron esto. No te preocupes, el oficial Wang es un buen tipo.
El doctor sonrió y abrió la puerta para dejar entrar al oficial Wang. Un hombre alto, de cuerpo formado y que con una sonrisa en el rostro saludó a Hoseok y a Yoongi.
El castaño por instinto y por los nervios no pudo evitar tomar la mano del muchacho pálido quien le dió una caricia con sus largos dedos para que mantuviera la calma. Wang se dió cuenta de esta acción, no hizo ningún comentario pero ya sabía cómo iba a ir este caso, no era la primera vez que sucedía.
Corea del Sur era catalogada por lo extranjeros —y quizás, hasta por los mismos coreanos—, como una sociedad homofoba y machista. Dónde muchos creían sobretodo los hombres; que por usar color rosa, lavar platos, mover un dedo para ayudar en casa o por ver a una pareja homosexual besándose en la calle, ya su inexistente virilidad y seguridad en sí mismos se veía afectada y eso, Wang lo sabía. Porque él también pasó por esa situación. Él también sabía lo difícil que era expresarte libremente en un país tan reservado y no solo en Corea.
—Jung Hoseok, ¿no? —el mencionado asintió, temeroso—, un placer. Soy el oficial Jackson Wang, vine aquí a hacerte unas preguntas.
Cuando faltaba poco para la Navidad, la gente o la mayoría solía estar emocionada porque iban a tener regalos, iban a comer como si no hubiera un mañana en la compañía de sus familiares, amigos y pareja, bebían, reían. En cambio, para Hoseok esa sería una "Navidad Negra".
Sus padres detenidos, Yoongi preocupado. Todo estaba saliendo para el culo, como dirían algunos.
El oficial Wang ya se había retirado con todo lo que necesitaba, con las pruebas del médico legista, la versión de lo sucedido de ambos padres, de Hoseok y de Yoongi, porque él también tenía que ver un poquito en el problema, pero solo un poco.
—¿Q-Quieres algo para t-t-tomar? —preguntó Yoongi—. El d-doctor dice que ya puedes comer y que d-dentro de algunas horas te d-darán de alta.
Hoseok forzó una sonrisa, eso significaba que tenía que volver a casa, tal vez a sus padres ya los habían soltado y estaban esperando por él en casa para darle otra paliza, le dió escalofríos de tan solo pensarlo.
—No te preocupes, Yoongs. Así estoy bien —respondió Hoseok—. Cierto, ¿quién se está haciendo cargo de los gastos del hospital?
—Cr-Creo que este hospital se hace cargo de aquellos que sufren cosas similares, después de todo es público, para algo deben servir nuestros impuestos, ¿no? —dijo Yoongi, con una pequeña sonrisita—. Iré a c-comprarme algo a la cafetería, ¿seguro qué no q-q-quieres un café o agua?
Hoseok sabía que Yoongi no iba a detenerse hasta que aceptara aunque sea un caramelo, así que pidió agua. El azabache asintió y se acercó al menor para dejarle un suave beso en la frente, eso causó que Hoseok se sonrojara hasta las orejas.
El mayor salió de la habitación y mientras se dirigía a la cafetería se topó con su hermano, que estaba guardando sus papeles y su tarjeta de crédito.
—Ya está todo pago Yoongi —dijo Jaehyun con un poco de pesar y con ojeras bajo los ojos, había tenido una larga jornada de trabajo y apenas se enteró que Hoseok estaba en el hospital no dudó en ir.
Cualquiera diría: ¿por qué lo hace si no es familiar suyo? No es su hermano ni primo, entonces, ¿por qué? Era simple, Jaehyun era empático y además el chico le caía bastante muy aparte de que sabía que tenía algo con su hermano menor. No dudaba en ayudar a quienes se ganaban aunque sea un granito de confianza y a Hoseok, ya lo consideraba como parte de su familia.
O solo tal vez, lo hacía para que Yoongi fuese feliz.
—T-T-Te lo pagaré —el mayor se sorprendió, no esperaba que su hermano llegara a decir eso—. Voy a re-reponerte lo que gastaste en H-Hoseok.
—No es necesario Yoongi, ya lo recuperaré con mi próximo sueldo...
—¡No! —exclamó el menor, llamando la atención de los presentes cosa que hizo que se avergonzara un poco—. Déjame pa-pagártelo p-por favor, hyung.
A Jaehyun no le quedó otra que aceptar y Yoongi apenas saliera del hospital tendría que ir a buscar algún trabajo para poder pagar esa deuda que tenía con su hermano.
Diomio, ¿por cuánto tiempo me desaparecí? ¿Desde hace cuánto no actualizaba? Les juro que hasta yo perdí la cuenta.
Creo que les debo unas cuantas disculpas por haberme desaparecido así sin avisar y por tanto tiempo. No tengo excusas por todo este retraso, en serio:( tampoco tengo demasiadas cosas que decirles, la vdd.
Pues que tengan una bonita navidad y un próspero año nuevo, intentaré traerles el próximo capítulo cuánto antes. ¡Promesa!
Sin más que decir, bye 😔💜
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Tartamudo | Sope
FanfictionEn donde a Hoseok le gusta el tartamudo, mucho. 📌 PROHIBIDAS las copias y/o adaptaciones. 📍 Capítulos cortos.