Daniel: no hay manera que mama y papa no se enteren de que te vas del país, mas aun con tu pareja. Que por cierto la encontraste hace que una semana y media?
Terminó de armar mi valija guardando en ella todos mis documentos incluida mi partida de nacimiento, nunca se sabe cuando la puedo necesitar, miro a mi hermano algo cansada de su sermón ya que desde que conoció a Lautaro esta continuamente diciendo lo mismo.
-hermanito hermoso, sabes muy bien que nuestros padres esperan esto desde el primer momento en el que conocieron de donde es oriundo lauti y su hermano.
Daniel: pero es lo que corresponde avisarles, acaso a ti no te gustaría que te avisaran si se van a alguna parte?
-Dan las cosas cambiaron desde que te fuiste... Cuando volví a casa después de mi relación con Axel, acordamos que siempre y cuando yo tenga mi propia plata podría hacer lo que quisiera. Mama no esperaba que después de lo que me paso continuara trabajando, no me pudo controlar y eso le molesto tanto que se olvido del acuerdo que había hecho con papá.
Daniel: ¿De que acuerdo hablas? hasta lo que yo se es que ella empezó terapia por que las cosas no estaban bien en el matrimonio, al menos eso es lo que me dijeron...
Mi hermano me mira pensando en cuales podrían ser los verdaderos motivos por los cuales nuestros padres fueran a terapia. Sonrió sin gracia ante la actitud de mi hermano algo inocente de su parte, pensar en que todo lo que nuestros padres dicen es cierto pareciera que nunca convivió con ellos.
-Realmente te olvidaste como son realmente nuestros padres...
Ya puedo sentir como Lautaro esta mas inquieto por lo que voy a decir, el al ser mi pareja destinada y yo al permitirle entrar en mi mente puede saber mis emociones. Escucho un poco a la lejanía como Enrique mi cuñado esta tratando de calmar a su hermano, ya que ninguno de los dos puede interferir en la charla que estoy teniendo con Daniel. El susodicho se encuentra ahora sentado en mi cama revolviendo se el pelo pensando en los peores escenarios respecto a nuestra familia.
Daniel: Se volvieron a poner sus ojos negros cuando yo no estaba en casa ¿no?. Por favor que no fuera eso por que es algo grabe, si papa viera como se comportaba en esos momentos.
-No solo se volvieron a poner los ojos negros, ese día tenia cerca el cinturón con la hebilla rota y según ella yo la desobedecí poniéndome zapatos en ves de zapatillas. Comenzó a gritarme como siempre solía hacerlo y yo simplemente no la escuche ya que solo quería ir al trabajo, pero ella quería descargar su ira sobre alguien.
Aprieto mis manos con gran enojo al recordar ese día, de no ser por mi padre ella habría sido capas de dejarme en muy mal estado ya que cuando Alondra, mi madre se enfurecía no media su fuerza y solo mi padre es capas de calmarla.
Daniel: Se atrevió a volver a hacerlo, a pesar de que le advertí que la denunciaría si lo volvía a hacer.
- no le importo lo que le dijiste, ese día se ensaño bastante conmigo, papá logro pararla diciendo unas palabras extrañas que lograron que se desmayara. Ahora con lo se que dijo en ese momento era como un mio-relajante mágico para la mente de Alondra, que menos mal que nunca intente ver en la mente de ellos por que si solo con un encantamiento se logra calmar a mamá es por que en esos momentos deja de ser esa madre que siempre nos cuidaba y nos demostraba su cariño.
Miro con melancolía una foto que tengo para llevarme a España, en donde estamos mi hermano y yo junto con mi mamá esa madre que con su cuidados nos decía cuanto nos quería. Todo eso se perdió cuando apareció el hermano de mi abuelo, ese tipo trajo desgracias puras y malditas desgracias. Vuelvo al presente cuando siento como mi hermano me abraza y escondo mi cara por que se que no le gusta verme mal, el siempre trato de que en mi cara hubiera una sonrisa.
Daniel: tranquila hermanita ya con este cambio que vas a hacer podrás olvidarte de todo lo malo, mamá cambiará y volverá a ser la madre que recordamos con amor.
-ojalá así sea, extraño mucho cuando me daba consejos y si me equivocaba me lo hacía ver sin gritarme. Y todo fue poco a poco al principio parecía que lo hacía bromeando y luego ya lo hacia por cualquier cosa, para ello basta hablar estaba mal y simplemente empezaba con un golpe en la nuca o un rasguño en el brazo, si es que lograbas escaparte de su manotazo.
Siento como se me escapan las lágrimas al recordar como poco a poco mi mamá se convirtió en lo que hoy ya no reconozco, ya no puedo decirle madre a quien causó en mi tanto dolor.
Daniel: a pesar de todo el dolor que nos causó nuestra madre aun no tomaste venganza, en cambio si lo hiciste con Axel a quien siquiera le tuviste compasión simplemente le diste lo que se merecía.
-y fui compasiva de él ya que de ser necesario lo hubiese matado sin remordimiento alguno, el mismo mató una parte de mí a comportarse como se comporto. Durante todos los años que fuimos pareja nunca le importe Así que nunca me importará lo que esté relacionado a él.
Me seco las lágrimas y cierro mi valija ya es momento de que deje todo esto atrás, debo de darme la oportunidad de al menos no ser una amargada. Escucho como se acercan unos pasos y supongo que es Lautaro que ya viene por las cosas para guardarlas en el auto, los papeles ya los tengo todos y los boletos de avión ya fueron reservados.
Daniel: al menos hasta Brasil iremos juntos, luego tendrás que cuidarte bien y aprender a controlar tus poderes o cosas como la que le pasó a mi cuñado pueden repetirse.
-tranquilo que solo volverá a ocurrir algo así si me agreden y te aseguro que no lograrán tocarme siquiera un pelo. No me dejaré pisotear por nadie eso te lo garantizo, me enfrentare a quien sea pero a mi no me van a faltar el respeto.
Veo como entra Lauti con cierta amargura en su cara y en sus ojos se refleja un poco de tristeza, antes de que pueda siquiera levantar la valija para que la guarde en el auto el me abraza. Siento como esconde por un momento su cara en mi cuello para luego mirarme fijamente y acaricia mi cara.
Lautaro: Yo me voy a ocupar de que nadie se atreva a molestarte, tienes derecho a que te respeten fueras o no mi pareja.
Escucho unos pasos acercarse y miro por encima del hombro de lauti. Enrique con su forma de andar apoya su mano en la espalda de su hermano.
Enrique: no vas a ser el único hermano, yo prometo que también la cuidare como si fuese mi propia hermana.
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Lobo...?
WerewolfHola :D Mi nombre es Sasha Novoa, no nada de Sasha Grey, tengo veintidós años y vivo en Argentina. Nunca en toda mi vida creí que existieran los hombres lobo y muchísimo menos encontrar me acá en Argentina no solo con uno sino dos hombres lobo...