Líneas Paralelas // Im Jae Bum

17. Salida

El maldito despertador sonó a las 8:30 am, con la pesadez del mundo lo apagué y miré el mensaje recordatorio que aparecía en la pantalla. Entonces de un brinco salí de mi cama. ¡Hoy era mi salida con Jae!

Entré rápido al baño y me di una ducha, me cepillé los dientes, me peiné y me maquillé levemente, sólo un poco de base y brillo labial, de mi madre aprendí que lo sencillo es lo más lindo.

Abrí las puertas de mi armario y miré toda mi ropa, saqué un montón de conjuntos ayer y hoy estaba decidiendo cuál ponerme.

- ¡MAMÁ! -grité desde mi habitación y mi madre enseguida subió.

- Dime, hija.

- ¿Cuál conjunto me queda mejor? -le pregunté, tenía en mi mano izquierda  un vestido blanco que me llegaba hasta las rodillas, un chaleco de mezclilla acompañado de unas balerinas doradas, y en la derecha unos jeans negros, un suéter de rayas un poco ancho, una boina negra y mis converses blancos.

- Por precaución, el derecho. -alcé el perchero que sujetaba el conjunto y miré a mi madre.

- ¿Por qué por precaución? -miré el conjunto en mi mano izquierda.

- Porque ese vestido es de cuando tenías 14 años, te debe quedar súper corto y no quiero nietos todavía. -dijo mi madre con cara pícara.

- ¡MAMÁ! ¡No es mi novio! 

- Todavía... -la miré un poco enojada aunque por adentro quería que lo que dijo se hiciera verdad.- ¿No querías mi opinión? Ya te la di, pero usa lo que quieras.

Decidí seguir la opinión de mi madre y me puse el conjunto de la derecha. Estaba sentada en el sofá de la sala de estar esperando a que Jae me viniera a recoger. A las 9 en punto estaban tocando la puerta, la abrí y me encontré con Jae. Iba vestido de unos pantalones rasgados, una camisa blanca, una chaqueta de cuero negro y unos vans. Lo miré sorprendida y reímos un poco, ¿cuándo nos pusimos de acuerdo para vestir casi igual?

- ¿Tú eres Jae Bum? -preguntó mi madre y yo la miré con miedo, sólo nos teníamos a nosotras mismas, así que somos muy unidas y ella es muy sobreprotectora conmigo.

- Sí, señora Choi. -asintió Jae.

- Quiero a mi hija aquí antes de las 7 de la noche. -sonrió, supongo que Jae le agradó.- Disfruten su cita. -cuando dijo eso quise que me tragara la tierra. ¿Cuándo llegó a esa conclusión?

Salimos de mi apartamento y toda sonrojada traté de evitar la mirada de Jae a toda costa. Sentía que revivía a los tiempos de antes, dónde me sonrojaba sólo con su mirada.

- Perdón... mi madre es así. -Jae sonrió y movió su mano restándole importancia.

- Supongo que quizo decir que confiaba en mí. -supuso cuando salíamos del edificio.

- ¿A dónde vamos? -pregunté curiosa.

- A donde tú quieras, esta salida es para tí. Podemos ir al acuario, a tomar un helado, a la feria...

- ¡La feria! -le interrumpo gritando de emoción. Cuando era pequeña no podía ir a las ferias, mi madre trabajaba hasta tarde y no podía ir sola.- Nunca he ido a una.

- Entonces vamos. -dijo Jae sonriendo.

(...)

- Último intento señorita. -sentenció el tipo que controlaba el juego. Lancé mi última pelota y... fallé de nuevo. Jae se estaba riendo de mi y yo estaba haciendo pucheros.

- Aprende de un profesional, niña. -dijo Jae con cierta arrogancia y yo levanté una ceja.

- ¿Lo lograrás? -pregunté.

- Claro, recuerda que soy una caja de pandora. -dijo entregando el fajo de billetes al dueño del juego.

Tiró la primera pelota y logró tumbar la mayoría de las botellas, y en el segundo intento tumbó la que faltaban.

- ¡Felicidades! ¡Ganó el juego! Puede escoger el peluche que le guste. -Jae miró entre los peluches a un gatito de color lila y escogió eso.

- Para tí. -me extendió el peluche.

- ¡Gracias! -dije saltando como niña pequeña.

- ¿Algún día vas a dejar de ser como una niña? -me preguntó riendo.

- ¿Algún día dejarás de ser tan perfecto? -le respondí de la misma manera.

- Sin arrogancia ni ego, la respuesta es nunca. -reímos juntos, no me equivoco al decir que el tiempo con él es el mejor.- ¿Quieres algodón de azúcar? -preguntó señalando un puesto de venta, a lo que asentí.

Estábamos sentados en un banco comiendo nuestro dulce aperitivo mientras mirábamos a la gente pasar.

- Quiero enseñarte algo... -captó mi atención enseguida.- pero no será aquí, lo tengo en mi apartamento.

- Claro, ¿qué es? -pregunté.

- Sorpresa.

- No me gustan las sorpresas. -dije de mala gana.

- Es de las buenas. Sé que te va a encantar.

- Si tú lo dices... -volví a comer mi dulce.

- ¿Te gustó el peluche? -señaló a mi pequeño gato lila.

- Claro, amo los gatos y que sea de un color derivado del violeta, me gusta más. -dije sonriendo.

- Ponle un nombre. -sugirió.

- Claro... ummm... -no tengo mucha imaginación para los nombres, me da flojera pensar en uno.- ¡Jae!

- Dime. -reí un poco, creyó que era con él.

- El gato se va a llamar Jae. -se puso una mano en el pecho y actuó como si lo hubiera ofendido.

- Porque es un gato te lo dejo pasar.

- Vamos... te alegró y lo sabes. -entonces sonrió y asintió.

Entonces enfrente de nosotros se paró una chica extraña y nos jaló hacia la parte trasera de un escenario.

- Miren chicos, lamento haber arruinado su momento amorosamente diabético, pero necesito que ustedes participen en este concurso. Faltó una pareja y para llenar ese espacio los escogí a ustedes. Lo único que tienen que hacer es salir al escenario y cumplir los retos que propone el recorrido del programa. ¿Ok? -la chica que tenía un aspecto freeki-emo parecía que iba a perder la cordura en algún momento, y más que pedir un favor, parecía que nos ordenaba participar.

- Nosotros no...

- Está bien, aceptamos. -me interrumpió Jae, ¿por qué hacer este tipo de concurso conmigo y no con la chica que le gusta? Ay, ya bórrate eso de la cabeza y disfruta tu tiempo con Jae.

- Muy bien, ahora salgan a escena como los buenos novios que son. Buena suerte.

Nos condujo hasta una fila que había, eran nada más que 5 parejas contándonos. Nos dieron la señal de salir y organizadamente nos colocamos en el escenario.

- Bienvenidos a "Love on Live", aquí tenemos 5 parejas que nos demostrarán todo el amor que se tienen a través de retos. Todos repórtense con un hola.

- ¡Hola! -dijimos todos. Muy bien, aquí empieza la tortura.

N/A

Suspenso que tú conoces. Me gusta torturarlas, jajaja. ¿En qué clase de cosa metí a mis protagonistas? Bueno, es algo que vi en un anime de mi niñez y F4 así que... it's show time. No van a hacer el típico reto de cargar a la princesita ni nada de eso, está muy usado, voy a poner otros retos como pareja, porque lo que está muy visto me aburreeeee y no soy tan cliché. Y esto es todo amigos (Sí, soy Bugs Bunny) Nos vemos, bai.