12. Celos

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A la mañana siguiente me sorprendió ver a Jae llegar con Na Yeon agarrada de su brazo como koala en su eucalipto. Ok, So Hyun, calma, es su primer día de clases en esta escuela, necesita a alguien que la guíe... ¡Ay! ¡¿Por qué él?! ¡Hay millones de chicos y maestros aquí! ¡¿Por qué entre todos tiene que ser justamente él?!

Mi cara lo decía todo, sí, reconozco que estoy celosa de Na Yeon, envidio su cercanía y confianza con Jae. Yo, nunca y me refiero a que nunca tendría el valor de tomar así a Jae por el brazo, ni siquiera de abrazarlo como hizo ella la primera vez que la vi, y mucho menos llamarlo "oppa", esa palabra suena tan... quisquillosa.

Estaba sentada en el aula cuando sonó el timbre. Todos los estudiantes empezaron a entrar y después de ellos el profesor. Muy bien, Na Yeon no está en nuestra aula. Giré un poco mi cabeza hacia la derecha y miré a Jae de reojo. No estaba atendiendo a clase, se la pasaba dibujando algo en su libreta, algo que no pude ver con claridad, parecía una mujer ya en la mediana edad, aunque no puedo confirmarlo, pues como dije no lo pude ver bien. Cerró la libreta bruscamente después de terminar el dibujo y me miró.

- ¿Qué miras? -dijo en un tono brusco, lo cual no me gustó.

- Nada. -dije en el mismo tono pero más cortante.

- Estabas mirando algo. -insistió con un tono más suave.

- No estaba mirando nada ojos de gato. -escribí en una libreta para que el profesor Jong Dae no me regañe.

- Yo tengo ojos de gato, es el profesor Jong Dae. -escribió imitando mi acción. Los dos oímos que alguien aclaró su garganta y miramos hacia él, era el profesor Kim Jong Dae de Biología.

- Así que tengo ojos de gatos. Im, venga a la sala de profesores después de clases.

- Por tu culpa. -me susurró y yo sólo me encogí de hombros.

La clase del profesor Kim Jong Dae había terminado y Jae se fue junto con él a la sala de profesores. Volvió cuando el timbre del recreo sonó, venía con mala cara y se veía estresado, se tiró en su silla y soltó un largo suspiro. Na Yeon entró al aula gritando el nombre de Jae, lo cogió del brazo y se lo llevó a quien sabe dónde.

Me volvieron a atacar los celos en ese momento, esa chica llegó para meterse entre Jae y yo. Pero qué digo, si apenas hay una amistad entre Jae y yo, y sentimientos por mi parte. Vaya amor unilateral. Jennie cogió la silla de Jae y se sentó al frente mío.

- Ya, ya, tranquila. Estoy segura de que Jae sólo la soporta porque fue parte de su familia. -me consoló Jennie.

- Pero no era familia de sangre, era política, y ahora no son nada, podrían ser novios si quieren.

- No seas pesimista. No has visto a Jae cuando anda con ella. -no y no quisiera verlo.- La mirada de Jae se veía triste. Esa chica puede ser muy alegre y animada, pero la mirada de Jae es triste, como si cuando está con ella recordara algo malo. ¿No crees que deberías hacer algo?

- Sí, pero ¿qué?

- No sé, trata de apartarlos un poco. Pasa más tiempo con Jae.

- ¿En qué tiempo? Na Yeon se la pasa pegada a Jae todo el día.

- En el almuerzo. Aprovecha que ella es un año menor y tiene que subir escaleras, adelántate e invita a Jae a almorzar. -asentí en respuesta.

(...)

- ¿Qué es esto? -preguntó extrañado Jae.

- Te invito a almorzar. ¿No puedo? -le pregunté.

- Claro que puedes, sólo que es la primera vez que lo haces y se siente extraño. -le sonreí para que se relajara.

- ¿Que quieres? -le dije mirando lo que ofrecía la cafetería.

- Quiero un ca...

- No vas a tomar más café, Jae. Es malo. -lo interrumpí.

- Bueno, quiero una ensalada de frutas y un jugo de naranja. -dijo rendido.

- Lo mismo para mi, pero mi jugo que sea de uva. -dije yo.

- Serán 235 wons. -dijo la chica de la caja. Yo saqué mi cartera para pagar,  pero Jae se me adelantó y pagó por los dos.

- Oye, se supone que yo te invité.

- No voy a dejar que tú pagues. -me sonrió y se dirigió a una mesa vacía.

- Estás más delgado. -lo regañé mientras me sentaba al frente de él.

- Estoy a dieta omma. -dijo el muy gracioso.

- No soy tu omma. Sólo me preocupo por tu salud.

- Actúas como una. Además tu también estás escuálida, mira... -señaló mi ensalada.- ...es lo único que comes aquí. -hace tiempo que Jae no me llamaba escuálida, me hizo sonreír.

- No te puedes quedar callado ¿verdad? -pregunté un poco divertida.

- Nop. -resaltó la p.

En el almuerzo hablamos de cualquier cosa y nos reímos juntos. Así es como me gusta ver a Jae, feliz, sin Na Yeon aquí junto a él. Sé que es egoísta, pero es por una buena razón.

- ¡Oppa! -olviden lo que dije. Es como si mis pensamientos la invocaran y aparezca para arruinar el momento.- ¡Aquí estabas! Te busqué por toda la escuela. -se sentó (sin permiso) a la mesa.

- Na Yeon, no siempre puedo estar a tu lado, también necesito pasar tiempo solo o con mis amigos.

- Siempre puedes estar a mi lado. Yo soy tu amiga también, yo soy quien te ha visto en las peores condiciones. Recuerdo que fue el año pasado en este mes. -¿qué le pasó a Jae en este mes? ¿Fue lo mismo de lo que habló ayer Jae? ¡¿Qué pasó?!- ¿Por qué crees que vine? Estuve junto a ti el año pasado, y por eso voy a estar este, y los próximos. -¡Ahhg! ¡No me dicen nada! Me siento excluida.

- Con permiso, no hago nada aquí. -dije un poco harta, no me voy a molestar en preguntar, ya sabrá Jae cuando contarme que carajos pasó en este mes hace un año. Jae ni se molestó en detenerme, eso me dolió y me enojó a la vez.

Subí a la azotea para distraerme un poco y olvidar lo de la cafetería, pero enseguida se me vino a la mente la imagen de Jae cuando Na Yeon le estaba hablando del pasado, se volvía a ver triste y vacío, como si mis esfuerzos para hacerlo sonreir se hubieran ido a la mismísima mierda. Na Yeon no le hace nada bien a Jae. Voy a hablar con ella, tiene que entender que está separando a Jae de sus amigos y de mi y eso le está haciendo mal. Puede que piense que lo hago por celos, pero no, aquí soy yo la de menos, lo hago por el bienestar de Jae... O eso es lo que quiero creer.


N/A

Hello!! Sí, subí este hoy también, creo que cumplí con lo que dije. El profesor Chen, sí, mi Tanos todo poderoso, él es el papito chenchual Chen (ok no :v). Oh sí, mi Xiuchen, ser multishipper es my vida.

Volviendo a la historia, So Hyun está ya alterada con Na Yeon, enfadada y a la vez triste porque Jae no quiere contarle lo que está pasando... pobrecita. Me he dado cuenta de que me gusta hacer sufrir a mis protagonistas *incerto risa malvada*. Puede que hayan notado que tengo a los demás miembros excluidos, es verdad, pero quiero consentrarme en mis dos protagonistas. No me gusta hacer muchos POV's así que no van a ver muchos en mis fanfics, y en este no voy a hacer uno de Jae, esta historia es solamente narrada por mi protagonista.

Quizá si tengo inspiración y a ustedes les parece bien voy a hacer otro libro de esta misma historia, pero solamente narrado por Jae. Bueno, aquí me despido. Tengan un buen día/tarde/noche (depende de tu horario) Bye.

Líneas Paralelas // Im Jae BumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora