Nunca Mas

capitulo 26

Luego de que termias ahí, te da la vuelta y esta vez él queda sobre de ti, te besa los labios mientras vuelve a entrar en ti, lo hace despacio, con delicadeza, besa tus senos mientras sigue penetrándote despacio, aumenta la velocidad y la intensidad de sus embestidas, esta vez él es el que gime más, disfrutaba estar dentro de ti, no había tenido esta sensación con ninguna otra mujer, empieza a hacerlo más rápido, te aferras a él, tus piernas alrededor de su cintura, tus manos en sus espalda, arañándolo de tanto placer que te producía, Joaquín no puede contenerse más, termina con un gemido en tu labios
Se queda sobre y dentro de ti, te ve a los ojos
- Eres tan perfecta- logra decir con la respiración acelerada
No puedes responderle, las cosas que hacía y decía provocaban que tu corazón latiera a mil por hora, en vez de hacerlo, prefieres darle un beso en los labios. Muy delicadamente sale de ti, se acuesta a un lado tuyo y tú pones tu cabeza en su pecho
- ¿crees que puedas quedarte esta noche conmigo? – realmente lo querías ahí contigo
- Por supuesto- dice abrazándote
Nunca habías sentido que pertenecieras más a un lugar como lo hacías ahora.
Sin darte cuenta se quedan dormidos.
Ala mañana siguiente eres tú la primera en despertar, sientes la respiración de Joaquín, aún seguían abrazados, vez la hora, era temprano, decides levantarte con delicadeza para no despertarlo, ves toda la ropa en el suelo y casi sin pensarlo te pones su camisa, bajas a la cocina para preparar algo para desayunar, pones un poco de música para relajarte
Te encuentras bailando en plena cocina cuando escuchas una risa detrás de ti, te das la vuelta y ahí estaba ese maravilloso hombre observándote, tu cara se vuelve roja de la pena
- Buenos días- dice mientras se acerca a ti y te da un beso en la frente
- Buenos días- contestas algo avergonzada y le das un beso en los labios
- Bailas muy bien- dice riendo y sentándose en uno de los bancos que hay en la cocina
- Cállate- le dices con una sonrisa
- Cállame- te reta
Te acercas a él y te sientas sobre él, cada vez te sentías más cómoda con él, le das un beso largo y apasionado en los labios.
- Está bien me callo- dice con una sonrisa
- Toma- le dices mientras le pasas un vaso con jugo de naranja
Lo toma y le da un gran sorbo, era obvio que después de todo lo de anoche el pobre hombre se estuviera muriendo de sed, le sirves más jugo en lo que terminas de preparar el desayuno
- Bien __Tn__ llegó el momento de hablar sobre nosotros…