Nunca Mas

capitulo 8

- Pero a ti que te pasa- dice Roberto, ni siquiera sabias la hora a la que había llegado
- Ayer me seleccionaron en las audiciones, quieren que este hoy para firmar el contrato y comenzar a ensayar- dices mientras buscas la ropa que te pondrás.
- JAJAJAJA, tu no vas a ningún lado- dice con esa voz tan sarcástica que siempre odiaste
- No, tu no me puedes hacer esto, ayer te pregunte sobre la audición y estuviste de acuerdo- dices casi gritando, estabas realmente molesta
- A mí no me gritas, además nunca pensé que sirvieras para algo- dice mientras se acomoda para seguir durmiendo.
- Nunca te he pedido nada en la vida, te atiendo, hago lo que quieres, siempre estoy a tu disposición
- Eso lo haces porque me amas te guste o no- refunfuña medio dormido
- Claro que lo hago porque te amo-mientes, ya no lo amabas-pero sé que tú también me amas, por eso me tratas así, y me ayudas a ser una mejor mujer para ti- ni tu misma puedes creer lo que acabas de decir, pero dirías lo necesario con tal de ir
- Si y justamente porque te amo aguanto que nunca hagas nada y hago todo para mantener tu estilo de vida
- Ya ves trabajando yo no seré más una carga para ti, no tan pesada, me portare bien lo prometo- de acuerdo esta vez sí caíste demasiado bajo
- Está bien, pero si te dejo ir las cosas en la casa no cambiaran, debes seguir haciendo las tareas del hogar tu sola, y fallas una sola vez, adiós trabajito de corista
No sabias como harías para que todo saliera bien, pero debías intentarlo, debías de organizar bien tus horas para cumplir con todo. Pero para pensar en solo tendrías tiempo luego ahora debías arreglarte para salir sino no llegaras a tiempo para firmar el contrato.
Sales de casa apresurada, apenas le dejas el desayuno servido a Roberto, comienzas a buscar un taxi, pero no hay ninguno a la vista. Caminas y corres a la vez son 7:30 y de camino te hacías casi la media hora. Debías encontrar transporte y rápido.
Cuando por fin encuentras uno son las 7:45, solo deseas que en el camino no encuentres nada de tráfico. Pero como eres especialista en tener mala suerte, había tráfico, los coches se mueven, pero muy lentamente, que más te podría pasar hoy.
Cuando por llegas a la disquera que habían abierto ellos mismos cuando ya tuvieron la oportunidad eran las 8:30, dudas sobre si te seguirían dando el trabajo, comienzas a buscar en tu bolsa un papelito con las direcciones del lugar a donde tenías que ir, estabas tan concentrada buscando en tu bolso el papel, tus piernas avanzadas rápidas hasta que te topas con algo o bueno mejor dicho con alguien que te hace caer.
- Joaquín- dices al notar que habías topado con él
- Hola- contesta con una sonrisa encantadora
- Lo siento tanto, no veía por donde caminaba- te disculpas bajando la cabeza, lo hacias por pena y porque de alguna manera estabas acostumbrada a hacer eso con Roberto
- No te preocupes, déjame ayudarte- te toma de las manos para poder levantarte, te jala hacia arriba, pero sientes dolor, el dolor de la última golpiza que te dio Roberto no se había ido del todo, él nota que sientes dolor- ¿te lastime?
- No, no para estoy bien gracias- dices con una sonrisa y acomodándote el pelo- lamento haberme chocado contigo, veras debía estar acá a las ocho para firmar mi contrato, pero honestamente se me hizo muy tarde…
- No te preocupes por eso, yo siempre llego tarde a todos lados- dice en tono de broma y entregándote una sonrisa- mira camina por ese pasillo y la primera puerta que encuentres a la izquierda es donde esta Héctor, nuestro manager y el encargado de darte el contrato, buena suerte y __Tn__ no sabes como me encanta que estés aquí.
Dice lo último mientras se aleja, como era posible que el mismo Joaquín Galán te dijera eso, apenas lo conocías, pero todo esto solo te dejo más ganas de conocerlo, espera…espera…tú no puedes tener nada que ver con ese hombre, es casado, tú tienes una relación, mala, pero relación al final y sabes que Roberto te mataría si se enterará, pero como evitas el hecho de que ese hombre comience a encantarte si tiene esos ojos maravillosos, esa sonrisa tan…tan…tan encantadora. Hacia demasiado tiempo que nadie te veía con la ternura que él lo hacía en tan solo ese pequeño momento. Debes jugar muy bien tus cartas para no hacer una estupidez.