Capítulo 5.2: Leer bajo propio consentimiento

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La idea la tuve yo pero mi querida "lectora" TimeToTheTime me dijo que, no les pregunte que querían, que puede que les daría vergüenza y, la verdad, tiene un buen punto.

Este capitulo "5.2" es la escena que Draco y Elle tienen juntos en la casa y, bueno, lo hacen, no es muy larga, alrededor de 991 palabras según mi word JAJAJA. No obligaré a nadie a leerlo ni a dejar de leer, cada uno lee y escribe lo que se le da la gana. Espero sepan apreciarlo ya que fue a pedido de mi mejor amiga, Lu, así que bueno, nada más :)

Espero sus comentarios y opiniones con lo que sucede ahora y cómo terminó el capítulo 5. Deduzcan, me encanta que divaguen y usen su imaginación con mi historia para deducir qué pasará. Acá les va ~

Draco la atrajo a él de la cintura y Elle rodeó su cuello con sus brazos y acarició su cabello. Se miraron cuando se separaron, dudando, sus cuerpos no se habían separado y tampoco querían. El rubio sabía que seguir podía llevarlos a perder la cordura o a molestarla, así que amagó a apartarse; al ver que se apartaba, ella lo detuvo y lo volvió a besar.

La levantó, como si de una pluma se tratara y las piernas de ella se aferraron a su cintura. Elle sintió la pared contra su espalda y como las manos de Draco comenzaron a descender para acariciar sus piernas, haciéndola estremecer.

Los labios del hombre comenzaron a bajar para recorrer su cuello, Elle cerró los ojos dejándose llevar entre suspiros, se dirigió a su camisa, desabotonándola con cuidado, sentía las manos del rubio acariciar sus piernas hasta sus "glúteos", haciendo que se le ponga la piel de gallina y el color suba drásticamente hasta sus mejillas.

Draco la exploraba, acariciándola y besándola, encontraba su piel tan suave, sintió como ella recorría su torso con la mano luego de haberle abierto la camisa, él se estremeció. Su mano era cálida y suave, bajando lentamente rozó su abdomen para llegar al botón de sus pantalones. El cuerpo de Draco se tensó por completo, se miraron y Elle sonrió, él no pudo evitar reír y la dejó en el suelo, tomando su mano; subieron, casi corriendo, las escaleras. Al llegar al cuarto, Draco la agarró de la muñeca, atrayéndola a él y volviendo a unir sus labios.

Elle sintió como las manos de Draco apresaban su trasero y ella, divertida, mordió su labio. El rubio bajó sus manos hasta sus muslos, volviendo a alzarla por la diferencia de altura. Lentamente, subió su vestido, acariciándola lentamente. ¿Sabes que tu camisa estorba? le preguntó Elle en susurro, segundos antes de que la camisa y el vestido estén juntos en el suelo y lo siguió el pantalón de Draco.

Las prendas que quedaban terminaron en el piso mientras llegaban hasta la cama. Draco la costó con cuidado, subiéndosele encima. Acarició su rostro, mirándola, Elle estaba sonrojada, sus mejillas parecían estar por estallar. Draco la besó para tranquilizarla, antes de sonreírle, tomar su mano y llevarla a su pecho. Ella parpadeó sorprendida, el corazón del rubio parecía que iba a salirse de lugar, latía desbocado; Elle le devolvió la sonrisa, lo besó antes de bajar su mano lentamente por su torso hasta llegar a aquella zona sensible del muchacho, acariciarla y hacerlo estremecer.

Draco tomó las muñecas de la castaña, mirándola fijo, con la mandíbula tensa y sus ojos brillando de excitación; intentaba controlarse, aunque sabía que estaba perdido. Pensar con claridad pero, tampoco podía, el cuerpo de la mujer estaba enloqueciéndolo tanto como sus movimientos. Elle le sonrió, con intento de inocencia. Él arqueó una ceja antes de abalanzarse sobre su boca, sosteniendo sus manos con una sola suya, comenzando a deslizarla por el cuerpo de Elle, acariciando uno de sus pechos y jugando con su pezón, endureciéndolo. Ella respondió con un mordisco, Draco rio, antes de mirarla a los ojos sin dejar de jugar con su pezón. La contempló estremecerse, sonrojarse y morderse el labio intentando controlar sus temblores. Su mano siguió descendiendo mientras él sonreía con sus ojos llenos de lujuria al ver como el cuerpo de Elle se tensaba, arqueándose.

Acarició su entrepierna lentamente, haciéndola jadear y cerrar los ojos. Acercó su boca a la oreja de la mujer para susurrarle un Te voy a devorar antes de introducir un dedo en ella, explorándola lentamente, besando su cuello; ella gimió, intentando liberarse de su agarre. Vio como descendía por su cuerpo, besándolo lentamente, sosteniendo sus manos a los lados de su cuerpo, la miró sonriendo al momento de estar junto entre sus piernas, veía su excitación, su deseo y, obviamente, su diversión, deslizó su lengua por su entrepierna, haciéndola gemir y arquearse; besó sus muslos lentamente antes de volver a concentrarse en el centro de placer, la vista de Elle se perdía, al igual que su cabeza, no podía detener sus gemidos, así como tampoco pudo detener su orgasmo luego de aquella placentera tortura.

Sus miradas chocaron luego de eso, las mejillas y la boca de Elle estaban rojas, jadeaba; Draco se acercó a su rostro y devoró sus labios, soltándola para poder abrazarse, acariciarse, disfrutarse mutuamente. Elle rodeó las caderas del rubio con sus piernas, atrayéndolo a ella y hacer que se rocen; se miraron, se sonrieron y se dejaron llevar. Ella sentía como su cuerpo entero temblaba, nervioso, sus dedos estaban enredados en el cabello de Draco; él se acomodó, esperando su aprobación, ella sonrió mordiéndose el labio. Al fundirse, sus cuerpos se llenaron de placer. Jadeando, se besaron. Él la tomó de las caderas, usándolas para impulsarse y entrando en ella primero lentamente y, luego, al acostumbrarse a estar unidos, con intensidad. Sus manos tiraban del cabello rubio de él, el placer estaba por todos lados, su cuerpo estaba embriagado de eso. Elle se aferró a él antes de dejarlo debajo, Draco la miró, antes de arquear una ceja y sonreír. Pero, su expresión cambió por completo cuando ella comenzó a moverse sobre él, su boca se volvió una o y sus ojos cerrados.

Sintió como chocaba con el punto débil de ella y como se estremecía. No podía dejarla controlarlo. La dejó debajo, tomando una de sus piernas y poniéndola sobre su hombro, entrando en ella hasta llegar al orgasmo, volviéndose loco y acostándose a su lado. Estaban sudados, jadeando con la boca semi-abierta y seca. Al mirarse no pudieron evitar reírse, él la besó antes de abrazarla y taparse a ambos con una frazada. Draco acarició su espalda, con ella apoyada en su pecho. Te quiero susurró él, Elle lo abrazó, respondiéndole un yo mucho más, antes de dormirse a su lado. Un momento perfecto del que no se arrepentirán, ¿o sí? 

Volver a Verte (Miradas Cruzadas #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora