Quizá suena muy dramático referirme a un pequeño accidente de tráfico como "LA TRAGEDIA" , pero realmente esta empezó semanas después.
Desperté en un hospital, me duele fuertemente la cabeza pero justo cuando intenté tocarla, sentí una venda en ella que me cubría hasta los ojos, no podía ver nada, de todas formas no quiero ver ahora, no quiero ver como mamá sufre y llora porque tres personas de su familia estén en el hospital: Papá, mi hermana menor que también estaba en el bus conmigo aunque le van a dar de alta hoy pues sus heridas no fueron graves, y yo. Resulta que llevamos cuatro semanas en el hospital, las heridas de Meli sanaron en estas semanas, pero por el contrario, mi salida del hospital se ve muy lejana aún.
-Emily- Escuché a mi mamá hablar. -Bella llegó a saludar, háblale con cariño-
-¡Gaby! Que bueno que estés bien, me preocupaste un montón, Mati te manda saludos. Simón vino a saludarte pero tu mamá no lo dejó entrar, igualmente me dijo que te veías como una hermosa durmiendo. -Aunque no la veo se que hizo una expresión de asco pero me empecé a sonrojar y ella lo notó.- ... Hey chica, empiezo a notar una pequeña coloración en tus mejillas, ¿Será normal?-
-Ya cállate Bella, es tu imaginación-
-Oh ¿Enserio? Rayos, entonces mi vista debe estar muy mal, yo debería estar recostada con vendas, no tú- dijo en tono sarcástico y se acercó y me abrazó. -No le vuelvas a hacer eso a mis nervios, no te lo perdonarían- Me dijo y no pude aguantar la risa.
Después de una hora, Bella tuvo que irse y mi habitación quedó igual que cuando me desperté, en silencio, y yo, sin poder ver nada.
-¿Señorita Azevedo?- Me dijo el doctor, si no tuviera esta venda se hubiera dado cuenta de que yo estaba intentando dormir.
-Si dígame doctor, ella está escuchando- respondió mi mamá enseguida.
-Las heridas de tu cabeza ya sanaron, pero desgraciadamente tenemos un problema que por ahora no podemos solucionar...-Ahí vienen las malas noticias, pensé yo...
-Lamentablemente en el momento de el choque, tu cabeza se golpeó varias veces contra la ventana, la silla de adelante y sobre todo, la silla de atrás, lastimando la parte de atrás de tu cabeza, cerca a la nuca, esto comprometió de una manera severa los dos hemisferios del lóbulo occipital de tu cerebro.
-Doctor, para mi es otro idioma lo que usted me está diciendo- Dije yo.
-En otras palabras, el lóbulo comprometido es el lóbulo que procesa la información visual, sin ella, lo único que serías capaz de ver es una pequeña luz, o en su defecto, nada.-
-¡Dice que estoy ciega!- Dije, muy alarmada.
-Tranquila señorita, hay una probabilidad de que nada de esto sucediera ya que no hemos hecho exámenes después del accidente... pero no le quiero dar falsas esperanzas.-
-Quiten estas vendas de mis ojos- Dije con mi corazón latiendo más rápido de lo que nunca ha latido.
Sentí que el doctor se acercaba a mi, oía los sollozos de mi madre, y sentía que mi corazón iba a salir de mi pecho... Cuando por fin sentí mi cara libre de vendas, sucedió lo que más me temía. Abrí los ojos, pero seguía viendo negro, parpadeé mil veces, pero todo se veía igual... Entré en pánico y lloré como nunca, lloré por todo, lloré por Brigette, por mi vida, por mis pulmones, por mi padre enfermo, por mi madre llorando conmigo y lloré, lloré porque ahora Dios se llevó mi vista, porque ahora lo único que traía color a mi vida, se ve diferente, de hecho, no se ve...
Lloré, porque esta tragedia no solo es hoy, sino que ahora es por el resto de mi vida...
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Diario de una Chica Cristiana
SpiritualEmily tiene una vida muy normal, ella y su familia cristiana deberán pasar por muchas cosas... ¿Será ella capaz de decidir lo que quiere?... ¿Sera capaz de superar LA TRAGEDIA?