Día 3: ¿Debería Elegirte?

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Tercer día del campamento, las chicas y yo nos levantamos a las 8:00am, el desayuno es a las 9:00 así que nos arreglamos en el mismo orden de siempre y salimos. El desayuno eran huevos con pan, estaban contando historias de como les fue en el orfanato, la verdad es que no presté atención a ninguna de las historias, cada vez que se reían yo me reía, así parecía que yo estaba escuchando. Cuando una chica estaba hablando, contó una historia que por lo que logro ver fue demasiado chistosa, porque justo cuando la contó, María, estaba tomando agua y al reírse se le salió por la nariz y no pude evitar reírme.

-Bueno chicos- Habló uno de los líderes. – Como premio a que lo hicieran tan bien en estos dos días, ¡Hoy tendrán tiempo libre! – Todos festejaron menos yo.

-Mily, ¿No te alegra? – Me preguntó Kate

-Emm si obvio me alegra mucho – Le dije y arrojé una sonrisa falsa. Kate frunció el ceño, pero no le puso mucha importancia.

El líder volvió a hablar. – Chicos, esta noche haremos una fogata a las afueras de la finca a las 7:00pm, así que nos vemos aquí a las 6:00pm para hacer algo antes de ir. Y ahora... ¡Todos a divertirse! –

Como puede atreverse a decir la palabra "DIVERTIRSE".

-Mily, ¿Vienes con nosotras a la piscina? – Me preguntaron Kate y las chicas casi a coro.

-No chicas, tengo dolor de cabeza. – Mentira – Prefiero quedarme en la habitación y descansar. – Mentira

- ¿Segura? SI quieres nos quedamos contigo, te ves pálida – Me dijo Kate, odio mentirles a mis amigos, pero hoy no es un buen día para mí.

-Tranquila Kate, es solo un malestar, voy a estar radiante en poco tiempo. – Mentira

Cuando llegué a la habitación me lancé a la cama. No encontré ninguna razón para ponerme a pelear con Dios, así que solo me puse a pensar.

¿Por qué Dios deja que cosas tan malas les pasen a personas tan buenas que no lo merecen? ¿Por qué a Brigette? ¿Cuál es la razón de que yo la encontrara? ¿Por qué ahora y por qué no antes? ¿Por qué no estuve allí cuando eso sucedió? Debí estar ahí acompañándola cuando ella más me necesitaba. Y ahora que me necesita no me atreví ni a darle un abrazo. No pude estar con Brigette cuando al menos le servían las piernas. Ni siquiera tuve oportunidad de despedirme de sus padres.

Cuando me di cuenta estaba llorando y quedé dormida.

-Mily despierta, son las 2:00pm, hay que ir a almorzar. ¿Cómo te sientes? –

-Hola chicas, ya mejor, ya no me duele la cabeza, decidí tomar una siesta y de verdad ayudó. – Mentira

Fuimos a almorzar, fue Frijolada, si la pasta no existiera sería mi plato favorito, me subió un poco los ánimos.

Después con las chicas nos fuimos a la habitación, Camila llevó juegos de mesa, así que nos pusimos a jugar un poco. Ese "Poco Tiempo" que íbamos a jugar se pasó tan rápido que cuando nos dimos cuenta, faltaban 10 minutos para las seis. Así que nos pusimos nuestros zapatos y fuimos al salón principal.

-Bueno chicos, a cada uno le estamos dando una hoja, un sobre y un lápiz. Lo que queremos que hagan es que le escriban una carta a Dios. Cuéntenle sobre su vida y sobre lo que ha pasado aquí. Apenas terminen tomen la carta, colóquenla en el sobre y vallan directo a la fogata. –

Recibí las cosas, cogí el lápiz y aproveché para desahogarme con Dios.

Querido Dios.

Mi nombre es Emily Gabriela Azevedo, aunque creo que tu ya lo sabes... o eso me han dicho. Si te soy sincera, creo que Tú no escuchas mis oraciones, veamos si el correo al menos lo lees. Sabes, cada día de mi vida es malo para mí, siento que soy invisible, y eso no se siente para nada bien. A todos les va bien, las cosas les salen bien, consiguen lo que se proponen. A mi me va mal en Matemáticas y Física, no puedo hacer casi nada por mi Asma y ni siquiera Simón me hace caso. Papá y Mamá son también un fastidio, parece que solo les importara la iglesia y ser pastores... DE OVEJAS, porque no saben como pastorear a sus hijos, uno es mujeriego, la otra tiene un novio a escondidas y ni saben que yo estoy indecisa. La única hija que han criado bien es a Amelia. Intento ser la mejor, o al menos en mi grupo de amigos, pero para ello debo mentir, debo mentir sobre quien soy, debo mentir sobre lo que siento y sobre cómo me siento, debo esconder a mi familia porque me avergüenzo de ella... y... ¿Sabes algo? Pensaba que con este campamento podría decidir entre tú y "el mundo" pero... después de lo de Brigette, ya no se ni que pensar. COMO SE TE OCURRE HACERLE ESTO, ¿POR QUÉ A ELLA? ¿POR QUÉ NO A MI? ELLA TENÍA UNA VIDA TAN PERFECTA, TENÍA UNA FAMILIA PERFECTA, UNA VIDA PERFECTA... ¡CREÍA EN TI DE POR DIOS! PERO CLARO, NO ME CASTIGAS A MI POR NO ELEGIRTE, SINO A ELLA POR... CREER EN TI... ¡NO TIENE SENTIDO! ¿POR QUÉ ERES TAN INJUSTO?

Pd: ¿Debería elegirte?

Cuando terminé, estaba sola, ya todos se habían ido, y una lagrima rebelde estaba bajando por mi mejilla. Cerré los puños con fuerza, me sequé las lágrimas y corrí lo más rápido posible a la fogata.

-1 de Juan 4:16 "Y nosotros hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor. El que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él."- Decía el líder cuando llegué, ¿DIOS NOS AMA? ¿A quiénes? No creo que nos ame a todos, si nos amara a todos, no le habría pasado esto a Brigette.

-Ahora chicos- Dijo el líder sacándome bruscamente de mis pensamientos. -Solo ustedes y Dios saben lo que hay en cada una de sus cartas. Así que antes de cantar algunas canciones, quiero que todos arrojen sus cartas a la fogata... Entreguen cada una de las palabras que escribieron a Dios y dejen que Él se encargue de ello. -

Rodé los ojos y arrojé mi carta al fuego con mucha ira. Observé como mi carta se iba desvaneciendo y alcancé a leer "Brigette" en la carta antes de quemarse por completo y aguanté las ganas de llorar que tenía.

Después de eso, Andrés sacó una guitarra y comenzó a cantar, la verdad no tengo ni idea de que, solo me quedé observando el fuego de la fogata toda la noche.

Después de eso, Andrés sacó una guitarra y comenzó a cantar, la verdad no tengo ni idea de que, solo me quedé observando el fuego de la fogata toda la noche

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 Al terminar, todos nos fuimos a las habitaciones.

Si hubiera sabido que la tragedia sucedería al día siguiente, quizá habría disfrutado el campamento mucho más... 

Diario de una Chica CristianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora