You are all that I need [CHAETZU]

[15]

Mina PoV
—¡Sana-Yah! ¿Me vas a seguir ignorando?— puchereó— ¡¿Por qué me ignoras?!— la tierna japonesa la ha estado ignorando desde la noche en que cenarían todas afuera, ¿por qué actúa así ante ella? Realmente no lo sabe, pero lleva así la noche anterior y toda la mañana del día actual. Mentiría si dijera que no le duele.

Su mejor amiga al escucharla hizo lo que ha estado haciendo las últimas horas, ignorarla. Ya le estaba estresando la situación a la nipona menor.

—¡Oh por favor! ¡¿Dime de una maldita vez que te sucede?!—juraba abriría la puerta-ventana hacia el balcón y de aventaría si volvía a repetir la misma acción de hacer como si no existiera— No me gusta que me estés ignorando— susurró.

La cariñosa nipona suspiró rendida.

—No pasa nada— dijo de manera fría.

Al escucharlo sintió una punzada en su pecho, le sorprendió su manera de responder. Nunca la había escuchado hablar de esa manera.

—¿Cómo no va a pasar nada si pasas de mi existencia?—

—¿Realmente quieres saberlo?—

—¡Por favor! Ya estoy harta de esta situación— a la mayor le molestó ese comentario, realmente lo hizo, y fue la causa de perder la paciencia.

—¡¿Harta?! ¡¿Enserio lo estás?! ¡¿Más que yo?!— y en ese momento la menor de arrepintió de lo que dijo, pero realmente quería arreglar lo que sea que haya pasado— !Lo qué pasa es que yo si me siento de esa manera! ¡Estoy harta de sentir! ¡De sentir amor hacia alguien que no me ama! ¡De no poder controlar ese amor que siento por ti! ¡De lastimarme a mi misma por sentir! ¡Por amar!— A este punto la japonesa mayor ya estaba al borde de las lágrimas y la menor simplemente estaba en shock.

—¿Y estás segura que no te amo?— la mayor rodó los ojos.

—Te vi besar a Chaeyoung, creo que la respuesta está muy clara— suspiró dejándose caer en la cama de su habitación, menos mal que las demás habían salido a comprar ingredientes para la comida.—Además se que estás enamorada de ella, es buena chica, supongo que el amor es mutuo...Me alegro por ti— dijo susurrando lo último.

—Mm...Yo no estaría muy segura de eso— dijo acostándose al lado de la rubia japonesa y mirando hacia el techo.

—¿Eh?— la mayor había entrado en modo confusión al escuchar eso— ¿No estás segura? ¡Pero como no! ¡Yo misma las vi besarse!— dijo volteando su rostro hacia su amiga.

—Me alegro de haberla besado— sonrió levemente— Si no f...

—Bueno ya, no me lo restriegues en la cara— interrumpió la mayor dándole la espalda a la nipona pelinegra.

—Esa no es la intención, déjame terminar— rió— A lo que me refiero es que... gracias a ese beso— se fue acercando poco a poco hacia su mayor—me di cuenta finalmente de lo que realmente siento—susurró en el cuello de la mayor.—Así que...— La menor se subió arriba de la rubia juntando sus frentes mientras se veían a los ojos.

Ambas estaban con el corazón a mil, perdidas en los ojos de la contraria, admirando la belleza de estos.

¿Cómo no se pudo dar cuenta antes?
Y finalmente lo dijo...