Capítulo 11

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Amo la sonrisa falsa del Xuxi en este momento, creo que pega muy bien con su actitud en este fanfic xd.

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La junta era hoy, y Jaemin tenía los nervios a flor de piel. Es decir, lo pensó muchísimo y era obvio que lo pondrían a entrenar para entrar a una banda. Y en estos momentos la SM al parecer no tenía pensado debutar a otra banda. A menos que sea una sub-unidad de NCT.

Y ahí estaba el motivo de los nervios del pelirosa. Osea, por un lado estaba malditamente feliz y por el otro no. Sentía que no era lo suficientemente bueno como para estar rodeado de tanto talento.

El horario de Jaemin era diferente al horario de la junta de YukHei y su padre. Jaemin debía ir a las 10:30 AM y el chino a las 12:30 AM. Por lo que el cazatalentos dijo eran los únicos dos chicos que habían pasado. Dos de ciento cincuenta chicos que habían ido a las audiciones. Y aunque eso era un gran logro se sentía un inexperto.

No le dijo nada a Jeno sobre la audición y que había pasado. No quería hacerlo, simplemente no había explicación. YukHei le preguntó porqué y él solo contestó "Simplemente no quiero que sepan." El chino lo entendió y cerró su boca.

Y ahí se encontraba, eran las 8:30 AM, había faltado a su primera clase ya que terminaba a las diez pero no tendría tiempo de llegar hasta donde sería la junta entonces tuvo que faltar a química. Su madre se encontraba  bañándose, él ya se había bañado  media hora antes así que solo tenía que esperar a que su madre se bañase, cambiase y recién ahí podrían irse, no sin antes desayunar obviamente.

Pero tratándose de su madre seguramente llegarían temprano. Antes, cuando iba al jardín de niños en Corea, dado que se mudó a San Francisco a los diez años. Siempre era el primero en llegar, se despertaba como dos horas antes de asistir gracias a que su madre lo bañaba todos los días antes de ir a la escuela. Su padre trabajaba a la mañana, así que ella estaba con él durante esas horas hasta que se iba al jardín a las 8:45 justo quince minutos antes de que su mamá entre a trabajar.

Atesoraba los momentos vividos en Corea en su corazón y mente, recordaba lo bien que se sentía cuando dormía con sus padres por tener pesadillas, o cuando los domingos paseaban en bicicleta y comían helado. Fueron los mejores momentos de su vida. Lástima que duraron solo un pequeño periodo de tiempo. Recordaba exactamente el día en que la discusión entre ellos fue muy ruidosa y su madre le dijo entre lágrimas "No te asustes cariño. Tu papi y yo solo estamos un poco enojados, pero nosotros dos estaremos un tiempo lejos". Pero ese tiempo se convirtieron en siete años. Nunca más volvió a Corea, no sabía el porqué. Siempre le preguntaba a su madre cuando sería el día en que podría ir a visitar a su padre y que no sea este quién viaje hasta el otro lado del mundo. Porque sí, los separaban un océano.

Pero ahora dentro de quizás semanas se mudaría al país en donde solía vivir. Aunque el único cambio era que ahora no estaría en Busan, ahora iría a Seúl la capital del país donde empezaría a estudiar en SM Entertainment.

Su madre salió del baño. Para su suerte cambiada y maquillada. Porque cuarenta minutos en el baño son suficientes para que haga todo eso además de secarse el pelo.

- Vamos a desayunar en McDonald's. Así que abrígate que hace frío.-Habló la mujer abrigándose con un saco de lana. Y es verdad, según las noticias esa semana sería muy fría.

Life is ironic 《NoMin》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora