4* Asistente

595 82 42
                                    

Otra semana más había pasado, sólo que Kyuhyun estaba en Japón para presentar un proyecto.

La cabeza de Kim iba a estallar de estar pensando en lo último que había oído de su jefe. 

No paraba de mirarse al espejo y buscar si lo que Kyuhyun le había dicho era verdad o simplemente era un muy bien manipulado sarcasmo y lo que en realidad quería decirle era "Tus ojos son horribles deja de pintarlos." 

Pero la expresión no encajaba. Y menos lo de las manos. 

Necesitaba ayuda… 

— ¡JongHoon! — Escuchó a través del celular la vocecita dulce y chillona del único ser con la capacidad de ayudarlo. 

— Hola, Min. Necesito contarte algo. — Habló con nervios. Sungmin exclamó con emoción antes de abrir paso a sus dudas.

— Claro amigo. Te escucho. 

La risa emocionada de Sungmin lo hizo sentirse estúpido.

— Ay Jong, pues es obvio, corazón. Se quiere acostar contigo. — Soltó con la mayor de tranquilidad del mundo. 

— ¡¿QUÉ?! — Su corazón se aceleró tan rápido como captó las palabras de su amigo. 

— Ay por Dios, como si fueras virgen. — Se burló Sungmin haciéndolo sonrojar.

— Eso no… Me refiero a que… ¡Es mi jefe! 

— ¿Y qué? ¿No te gusta?

Gustar… 
No era feo. Tenía ademanes que lo hacían ver malditamente atractivo… ¡Pero no!

No podía pensar esas cosas. Era su jefe, éticamente debía mantener una actitud de respeto, más cuando esperaba aprender de él más adelante.

— Es atractivo pero no me veo en una situación así con él. ¡Además me lleva como diez años! 

JongHoon no era que temiera a las relaciones con hombres mayores. A principios de la Universidad había tenido un par de citas con su maestro de inglés. Pero era seis años mayor, no diez. 

— No inventes.—Dijo Sungmin con tono alarmado.— Es el doctor Cho Kyuhyun. Tal vez te dé un ascenso si… haces bien tu trabajo. — Agregó con picardía. JongHoon se pasó una mano por el rostro. ¿Por qué demonios le dijo?

— Preferiría ganarmelo de otra forma. 

— Bueno, yo ya cumplí con decirte lo que quiere. Así son los hombres cuando ven carne nueva. Además te llevó al teatro… no me sorprendería si luego de invita a cenar. 

— Si como no. — Se burló el pelinegro.

ווו×

— JongHoon habrá una cena con uno de mis jefes, así que nos vamos en treinta minutos. — JongHoon se quedó congelado, en primera por la dichosa cena, y en segunda porque era la primera vez que Kyuhyun le llamaba por su nombre y no por apellido. 

— Claro. 

Era un sitio bastante bonito y elegante, no había muchas personas, y de cierta forma JongHoon se sentía raro en ese lugar. ¿Y si hacia algo que manchara su reputación o la del doctor? 

No quería sentirse humillado o estúpido frente a gente importante. 

Escuchó un gruñido por parte del castaño, giró a verlo. Tenía los ojos atentos al móvil, parecía molesto.

Kim... Me Gustas ~• {KyuSung} EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora