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Una mujer fue bendecida con dones preciosos,

El control de magia antigua y dos hijas divinas,

Castigada por el primero a manos de miedosos,

El segundo quedó expuesto a influencias malignas.


La mayor, Devola, lloró con más fuerza

La muerte de su madre en la hoguera

Y con el resentimiento hirviendo feroz

Se aseguro que su venganza fuera atroz.


A los animales convocó y a la fuerza los cambió:

Garras y dientes afilió; músculos y huesos agrandó;

Ferocidad, violencia y sed de sangre no olvido.

Rió cuando con los "depredadores" a todos masacró.


La menor, Selora, no consintió su acción,

Hizo lo imposible para hacerla desistir,

Pero nada consiguió y aun con determinación,

Otra ruta uso para a la humanidad asistir.


Varios hombres y mujeres se ofrecieron

Para ser su ejercito invencible y brutal,

Con esperanza y anhelo, fuerza pidieron.

Pero ese poder solo lo contenía un animal.


No estaba dispuesta a sacrificar su humanidad,

Por ello una segunda piel decidió implementar,

Podían cambiar de salvaje a humano a voluntad,

Siendo sus ojos amatista lo único en resaltar.


Los "salvajes" orgullosamente su vida cedieron

A la causa del hombre contra los "depredadores"

Paso el tiempo y su conocimiento transmitieron

A los niños quienes de la magia eran portadores.


Pasaron los siglos, los reyes y reinas temieron

Al poder inmenso que los "salvajes" poseyeron,

A un poderoso hechicero sabio pidieron socorro

Pero por mas que intentó la magia no se borró.


Así que a caballeros solicito para darles un don

Y su cruzada seria, a los salvajes terminar sus días.

La fuerza, los sentidos y el instinto les aumento

Siendo siempre humanos a pesar de sus potencias.


Sus ojos ámbar fueron su único distintivo,

Reflejando el sol que llevan en su ser cautivo

A gran diferencia de las sombras violetas

Que los "salvajes" irónicamente albergan


La lucha no tardo en tomar lugar,

Pero si en encontrar un final,

Porque la magia siempre es peculiar,

Y encuentra la forma de poner todo en su lugar.


Los "depredadores" solo asesinarán,

Los "salvajes" siempre combatirán,

Los "soleados" nunca se rendirán,

Y ninguno terminara por ganar.

Vida SalvajeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora