Más que un sueño - Lessren

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Narra Karen

- Me acabas de hacer la mujer más feliz del mundo ¿Lo sabes? - Le dije al separarnos del beso

- Tú felicidad no se compara con la mía querida - Sonrió - Ahora soy pareja de mi alma gemela ¿Qué más podría pedir? -

Less aún seguía sentada, se paró, se acercó a mí y enredó sus manos en mi cuello.

- ¿Qué te parece si celebramos ésto de otra manera? - Dijo en mi oído y mordió el lóbulo de mi oreja.

- No eres tan inocente como parece Yiyi - Puse mis manos en su cintura

- Eso tocará comprobarlo - Se alejó, tomó mi mano y me llevó hacía su auto.

Nos subímos y ella arrancó.

[...]

Narra Lesslie

En cuanto entramos a mi departamento, comenzamos un beso totalmente salvaje y desesperado; algo característico de nosotras.

Karen me cogió por el el trasero haciendo que enredara mis piernas en su cintura.

Caminamos en esa posición y entre besos hasta la barra de la cocina, me sentó ahí.

No paró de besarme en ningún momento, me quitaba la ropa entre besos hasta dejarme sólo en bragas y sostén

Bajó desde mis labios hasta mi cuello en donde comenzó a morder, seguramente dichas marcas se notarían mañana.

Pasó sus manos por detrás de mí espalda y desabrochó mi sostén; dejando al descubierto mis pechos. Se llevó uno a la boca, mordiendo, lamiendo y chupando.

- Oh... Si si - Gemí al sentir como jugaba con mis pechos

Me sobresalté al sentir como introducía su mano dentro de mis bragas, comenzando a masajear mi clítoris con lentitud, quería matarme.

- M-mierda Ana p-podrías d-darte prisa - A duras penas me salían las palabras

- ¿Estás caliente Yadid? - Dijo en un tono sensual

- D-demasiado ¡Carajo Ana baja ya! - Necesitaba más

Quitó mis bragas por completo y agachó su cabeza.

Me estaba comiendo deliciosamente, su lengua se movía expertamente en mi centro.

- S-si, n-no pares -

Sentía como sus dedos abrían mis labios vaginales, yo mantenía mi cabeza hacía atrás, una de mis manos se mantenía enredada entre su cabello buscando más contacto de mi centro con su lengua.

- ¡Ah! - Ahora uno de sus dedos se movía dentro de mí.

Jamás despegó su lengua de mí, mi cuerpo comenzó a dar pequeños espasmos y mis piernas se tensaron.

- Vamos hermanita correte para mí - Dijo y aumentó la velocidad de sus movimientos

- ¡Carajo! - Grité al sentir como me había corrido en su boca.

Se levantó hasta quedar a mi altura, me tomó por la cintura y me cargó, llevándome hasta mi habitación, dejándome acostada en la cama.

- Te amo - Dejó un corto y tierno beso en mis labios

Se alejó y se fue hacia el armario, debía cambiarse, sonreí como idiota al ver como se desvestia.

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Deos deos 🥵🥴

Maratón... 1/?