★ CAPÍTULO 37 ★

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Seung estaba acomodando unos papeles en su maletín,su pequeña adoración estaba sobre el sofá jugando con unos carritos.

La puerta se abrió,mas sin embargo Seung no volteo.

-ya casi término Jack,sólo unos papeles más y regresamos a Corea.-

-yo quiero ir.-al escuchar y reconocer aquella voz,el coreano volteo asustado.

-¿que haces aquí JJ?-

-necesito hablar contigo.-

-yo no necesito hablar de nada.-trato de sonar convincente. -vete, estoy ocupado.-

Jean se le quedo viendo al pequeño que estaba en el sillón, extrañamente le causo curiosidad.

-¿como se llama?-

Seung noto que hablaba del pequeño.
-Dae.-

-es lindo.-

Seung comenzó a ponerse nervioso, pero eso no hizo que bajara la guardia.-Jean vete.-

-Seung por favor,quiero arreglar las cosas contigo.-

Una pequeña sonrisa se formó y su ceño se fruncio.-¿te dejaron? Soló para eso me buscas,¿no?-Jean se quedo callado,Seung sonrió y negó.-si me dijeron que me estabas buscando.-

-¿y porque jamas me llamaste?-

-por que tengo un hijo,eso de aventuras sexuales ya no se me da.-

Jean recordó a aquel hombre,el mismo que cargaba a Dae cuando vio nuevamente a Seung.-¿el hombre de cabellos castaños es tu pareja? Ese tal Jack.-

-es mi hermano.-

-no sabia que tenias un hermano.-

-no sabemos nada uno del otro.-Seung dejo los papeles que llevaba en la mano,se acerco a la puerta y la abrió para después mirar al Canadiense.
-por favor retirate.-

-no.-Jean jalo del brazo al coreano, cerro la puerta y pego la espalda ajena a la puerta de madera.-quería hablar bien contigo.-

-Jean por favor, mi hijo nos esta viendo.-eso basto para que el canadiense se calmara, soltara al coreano y se volteara para mirar al niño.

-en serio quiero hablar contigo.-

-yo también necesito hablar.-

El canadiense miro al pequeño,se acerco y le acaricio los cabellos negros. El pequeño volteo y aquella miradita grisácea,le removió el interior. Era un niño hermoso,sus ojitos como los de Seung,la piel un poco morena,y sus pestañas un tanto largas.

-¿vamos al parque?-pregunto con emoción, volteo a ver al coreano y dibujo una amplia sonrisa.-llevemos a Dae.-

তততততত

El día era soleado,el parque estaba un poco lleno, había niños jugando y perros corriendo.

El pequeño de cabellos negros iba sentado en los hombros del canadiense, Seung se había negado pero Jean no dejaba de insistir,así que termino cediendo.

Seung y Jean se sentaron en una banca,y cuando el moreno bajo al pequeño,este comenzó a llorar.

-no llores Dae,Jean necesita descansar.-

El pequeño infló sus pequeñas y rosadas mejillas,elevo los brazos hacia el moreno y con sus palabras,no muy entendibles dijo.-aliba.-

¡¡SERÁS IMBÉCIL!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora