Un felices por siempre

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Narra May
Me até el buzo en la cintura y cerré la puerta. Caminé hasta la puerta de Helen y Cora y toqué.
Helen me abrió. Tenía un vestido gris corto y sencillo y el pelo celeste hecho una maraña, como siempre. Cora estaba en el baño.
-Ya sale.-Me miró y tomó el papel.
-¿Para que nos querrán?- Dije.
-Supongo que porque somos un bonito anzuelo para nuestros padres ¿no?.- Sonrió
-Pero... nosotras tenemos magia... además...
-Bonitos Anzuelos.- Volvió a sonreir
-¿Y Emma?- Pregunté- Ella no tiene magia.
-No sabemos si Emma recibió algo, O Dustin...
-¿Aún te gusta?- Dije refiriéndome al hermano de Emma.
-¡¿Que?! ¿Te parece momento, May?- Reaccionó nerviosa y no tardó en ponerse roja.
-Te gusta, te gusta- Canturré burlona.
Cora salió del baño, lo que hizo que Helen gritara.
-¡Por fin! ¿Cuanto te tardaste? ¡Vamos a llegar tarde, andando!
Narrador omnisciente
Las dos seguimos a Helen por el pasillo. Desde que Jane era la directora  los alumnos podían salir también los días de semana, con una autorización firmada desde dirección.
Las tres chicas caminaron en silencio hasta el bosque encantado. Emma estaba allí, también los chicos.
Ella tenía el cabello azul recogido en un rodete, un vestido rojo y zapatos de taco. Estaba sentada sobre sus piernas para no ensuciarse, era idéntica a Evie, todos se lo decían, y no solo por el físico.
Las tres se sentaron al lado de Emma, los varones las miraron.
-¿Por qué estamos aquí?- Owen fue el primero en romper el hielo.
-Si, eso- Los gemelos Hook asintieron al unísono.
-¿Que? ¿Que me miran a mi?- Emma se corrió el mechón de cabello de la cara.
-No lo sé, quizás sabes algo.- Dustin miró a su hermana.
-¡No peleen!-May hizo una pausa- Es algo serio... involucra a.. nuestros padres.
-Todos se callaron, querían escuchar.
-Todos saben, bueno, quienes son nuestros padres... y nuestros abuelos ¿no?- Dijo Helen.
Asintieron.
-A mi, y a Helen nos llegaron mensajes, manuscritos, algo raros, decían que auradon iba a desaparecer, también la isla.
Todos los presentes tragaron saliva.
-Cuenten conmigo- Dijo Jules, mirando profundamente a May y poniendo su mano en el aire.
-Estoy para ustedes- Hork puso la suya sobre la de Jay.
Las chicas pusieron sus manos sobre las de los chicos, Dustin y Owen las imitaron.
Kop y Sop se miraron.
-¿Tenemos que ir a... ahí...?
-No es necesario. Solo no digan nada.-Les dijo May.
-Esta bien. No vamos a decir nada.
Ambos chicos de diez años salieron corriendo de la reunión.
-¿Esos son tus valientes amigos, cara de sapo?- Le dijo Emma a su hermano.
-Ellos, no son así- Dijo Dustin.
Owen sacó un cuaderno de tapa verde y un lápiz.
-Creo, que vamos a necesitar un plan ¿no?- dijo obvio cuando su hermana lo miró.