You & the things you do {Freddy Freeman & Lector} #1 Finalizada

#4 Teorías

Dormida profundamente en un cómodo sofá que en realidad competía muy bien con su propia cama, no iba a saber exactamente que estaba haciendo Freddy con su bolso. Como un pequeño intruso lo estaba haciendo bien, hurgando entre las cosas de la chica sin ni un remordimiento, sostuvo su celular encendido con un cincuenta por ciento de batería, no tenía contraseña, entonces rápidamente consiguió acceder, vio unas cuentas, su Instagram del cual nadie conocía excepto por un montón de personas desconocidas en su vida, una que otra persona famosilla siguiendo su cuenta, con su propio celular busco a prisa su cuenta a seguirla, así como a prisa guardo su propio número y viceversa, ah, y porque no cambiar la foto de fondo por una suya con una cara divertida, a (t/n) le haría gracia. Y por último encontró una cosa que en realidad llamo más que nada su completa atención: Una grabadora. Eso le venía bien, la tomaría prestada por unos cuantos días, ella tenía que entender después de todo, o lo esperaba. Se guardo rápidamente la grabadora en su propia mochila, después de todo... (t/n) continuaba dormida en ese sillón, con gran parte de su cabello cubriéndole la cara, y entre todo ello se apreciaba un tanto como la hematoma estaba en un tono morado con celeste, pero, su rostro se veía menos colorado, y más sana. 

Se encamino lentamente hasta ella sin quitar sus ojos marrones de su rostro, llevo una mano adelante apartando gran parte del cabello para permitir tener una vista más completa, redirigió su mano con suavidad a su mejilla, ella se movió solo un poco con dolor y por lo pronto solo puso uno de sus dedos sobre su nariz. Su piel era suave y cálida, pero por sobre todo muy suave, (t/n) no reacciono, y para Freddy... mirarla de cerca le confirmaba lo realmente bonita que era. 

—Eres un pervertido. 

Freddy dio un respingo por la voz de Billy desde el pasillo, perdió el equilibro cayendo hacia atrás sobre su trasero, y por suerte no sobre su mochila con una grabadora que no era suya y que ni siquiera pidió prestada. 

—¿¡Qué!? ¡No estaba haciendo nada! 

—Te pille en el acto, pervertido. 

Levantadose del suelo pronto sintió a (t/n) moviéndose en el sillón, los gritos obviamente tenían que despertarla, con mucha suerte ella no tendría ni idea de lo que acababa de pasar ahí, con mucha suerte. 

—¿Qué hora es? — pregunto con voz ronca, y con sus ojos entrecerrados, era realmente adorable, ¿por qué las chicas eran tan adorables al despertar? pensaba Freddy sin apartar sus ojos marrones de ella —. 

—E-Es temprano, es tiempo de desayunar. — murmuro Freddy —. 

—Oh, si no es problema, claro... 

—Ya pasaste la noche aquí — comento Billy —. 

Bostezando saco las piernas de la manta, sus calcetines grises a vista, su cuerpo con bastante cansancio encima. Los chicos en realidad tenían sus preguntas sobre ella, eso de estar hasta muy tarde en soledad es un peligro, sus cosas no eran lo casual, una vida muy diferente desde las redes sociales... ella es un misterio, ella no hace cosas normales. 

—¿Cómo es que este ser tan puro puede estar relacionado a dos imbéciles? — añadió Freddy entre ligeras sonrisas con mejillas sonrosadas —.

(t/n) le dirigió una mirada tranquila con una sonrisa. 

—Me hago las mismas preguntas amigo. — agrego Billy, ahora alejándose de la situación —. 

—Todos los seres humanos nos vemos adorables al despertar, o bueno, la mayoría, apuesto a que tu luces idiota cuando despiertas Freeman. 

—Haha, muy graciosa. 

—¿Prefieres que diga que eres tan hermoso como la bella durmiente? ¿Es eso? 

—Perfecto.