You & the things you do {Freddy Freeman & Lector} #1 Finalizada

#12 Club nocturno

La familia es familia, aún más cuando te encuentras barado en la cima de un edificio del cual no puedes bajar debido a tu miedo, (t/n) solo podía gritar los nombres de su familia y personas importantes en su corazón, eran en esos momentos en que su memoria rememoraba su infancia, aquella en donde las cosas eran menos complicadas, y sus hermanos no eran unos idiotas con ellos, eran hermanos que se preocupaban por su bienestar, ella sabia que muy en el fondo aun se preocupaban por ella, aun si no lo decian, lo hacian. 

Pero, también a pesar de todo eso solo podía gritar fuertemente el nombre de Freddy, porque aveces tu hogar no es un sitio, es una persona. 

—¡Freddy, Billy! 

—¿Quién es usted, que quiere? — hablo Mary extudiando al hombre desconocido frente a ellos —.

—¿Qué, qué quiero? Quiero... 

El sonido de algo, o más bien alguien aterrizando en la afuera de la casa llamo la atención del villano que ahora mismo se encontraba sonriendo ante la situación.

—Eso. 

—¡Partele la cara Billy! — exclamo Pedro —.

Pero los trucos bajo la manga del Dr Sivanna se hicieron ver a la luz, amenazando a la familia de Billy, los pecados capitales frente a cada uno de ellos, en sus verdaderas y monstruosas formas que no daba el gusto ni la calma de ver cara a cara. 

—Si Billy, inténtalo, por favor — comento en forma de burla —. 

—¡Deja que se vayan y entro a la casa!

—No, tú entra primero a la casa, y tal vez los deje ir.

Pensando en sus palabras, Billy obedeció, entrando a la casa, no veía como solucionarle las cosas a su familia si no era más que obediente ante lo que pedía, pero, iba a encontrar una forma, tenía que. 

—Buen chico, porque es lo que eres, ¿Qué edad tienes?

—Yo... voy a cumplir quince. 

—Hm.. cuando yo era niño, el viejo me dijo que yo no era digno, y aquí estas tú, un cobarde, huiste de mi, pero él hechicero te eligió, no eres un héroe, pero te voy a dar la oportunidad de convertirte en uno. Dame el poder del campeón. 

—¡No, no se los des Billy! — exclamo Freddy en un tono muy preocupado — ¡Él aún tiene a (t/n) de rehén! 

Pero el villano permaneció en silencio, caminando a la puerta del armario, alzando su mano en el aire, ignorando por completo el comentario que Freddy había dicho, su mano permaneció en el aire a medida que se iba formando un portal a otro sitio. 

—Dame el poder, y dejo que se vayan.

—¡No!

Darla grito fuertemente corriendo para abrazar a Billy, sin querer permitir que se fuese ante una situación tan peligrosa. 

—¡No vayas!

—Darla ven — llamo Mary —.

—No, no, tengo que ir, es lo que haría un buen hermano, ¿verdad? 

—¡Billy! 

Tanto Freddy como Billy podrían oír en sus mentes a una (t/n) decir como aquello seria: "Una idea suicida." Y que habían mejores formas de resolver tal conflicto formado, pero ella no estaba ahí con ellos para brindar ayuda, u apoyo moral, no, ella estaba secuestrada por esa persona que quería los poderes que todos sabían no merecía obtener. Y para la consternación del resto de hermanos, lo vieron avanzar dentro del portal, a aquella dimensión diferente, cada uno de los siete pecados capitales pareció desvanecerse de pronto, y Freddy tan pronto como pudo se puso de pie y se apresuro a correr a su habitación a por el Batrang. 

—Te están usando, debes darte cuenta de que te están usando. 

—Di tu nombre.

Justo a tiempo el Batarang voló de la mano de Freddy en dirección a la calva del Dr Sivanna, este volteo, dándole la oportunidad a Billy para observar como su cabeza sangraba.

—Su nombre es capitán chispa dedos.  

—¡Y le vamos a seguir aventando cosas a su horrible cabezota y su ojo feo hasta que dejes a nuestro hermano! 

Cada pecado capital regreso a él, Billy mirando como su herida sanaba prontamente, notando esto volvió a recoger el Batarang del sitio al que cayo para enterrarlo con fuerza en su espalda y darle el tiempo necesario para correr y sacar a sus hermanos de ese sitio tan peligroso. 

—¡Que bueno que no vendí ese batarang! ¿Pedro, traes una lampara? ¡Rápido, corran, corran! — comentaba Billy, mirando hacia atrás de vez en cuando para cerciorarse de que el peligro no estaba ahí —¡Pedro, corre! ¡Freddy sigue el paso, Darla siguen en frente! Hay que correr. 

Cada uno de los hermanos camino a las diferentes puertas, abriendo cada una, puertas a dimensiones desconocidas y nada seguras para ellos, pero no parecía que tuviesen otra forma de escapar de dicho sitio. 

—¡Okay, no más puertas! ¡Nadie habrá más puertas! 

—¿Qué vamos a hacer Billy? — pregunto Darla — ¿Qué vamos a hacer? 

—Darla no sé... 

—¿Qué hiciste la primera vez para salir de aquí? — pregunto Freddy —.

A Billy parecía ocurrírsele algo ante aquellas palabras.

—¡Okay, denme sus manos!

Cada uno de los hermanos se tomo de la mano, así como prontamente se transportaban, el villano observando esto con atención, era tiempo de sacar su carta mejor guardada, él también se movió a otro sito. Y mientras tanto el grupo de hermanos, salió con prisa de un club nocturno. 

—Vengan, caminen. 

—¿Por qué me cubren los ojos? 

—¿En serio fue el primer lugar que se te ocurrió? — pregunto una molesta Mary cargando a la pequeña Darla en sus brazos mientras cubría su vista — ¡Wow! 

—¿Por qué no podía ver lo que había ahí? 

—Porque no tienes edad.

—¡Tengo edad para que me guste esa música! 

—No es lo mío... — menciono Pedro —.

Todos de pronto se detuvieron fuera del lugar, Freddy los seguía a todos a un paso lento, y de pronto, temiéndolo se escucho un fuerte sonido que les llamo la atención, el Dr Sivanna salió volando desde el techo del club nocturno, solo que se les helo la sangre cuando supieron exactamente en donde ya estaba (t/n) Breyer. El corazón de Freddy comenzó a latir con prisa cuando la vio luchando por liberarse del fuerte agarre del hombre mayor, vio como su cabello estaba técnicamente desordenado, faltaba su chaqueta, dejándola solamente en una prenda que no la protegía exactamente del frío, se había quedado quieto viendo aquello, podía oírla levemente quejándose, y pronto Billy lo había tomado en sus brazos para correr. 

¿Qué iba a pasar con la chica que le gustaba?