~Parte 8: Lancel.

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Estaban jodidos, las cosas no podían estar peor luego se lo que había sucedido esa noche, no tenían comida, estaban cansados, estaban agitados, en su mente Isaac ahora mismo estaba atormentado.

Su pasiva al fin había dejado de funcionar.

Los daños como tal no eran muchos, tendrían que tomarse su tiempo para ver como tomar la situación, pero ahora, en ese instante mientras los caballos galopaban lejos del incendio que era el antiguo pueblo, el herrero repasaba los sucesos.

Llegada, comida, los aventureros, la noche, el fuego, las perdidas y el rescate... La curandera aun seguía sin decir una palabra, estaba en una esquina aun vestida de un color rojo oxidado, la mirada aun nublada no tenia signos de disiparse.

«Muy bien... Vamos a iniciar por lo que me falta» Tenia que enfocarse, aunque por su cara afligida eso no iba muy bien. «Una mierda, ¡Estamos jodidos!» se sujetaba la cabeza.

Respiro profundo un par de veces, maldecia con mucha intensidad a su pasiva, casi cometía una estupidez, la peor de las cuestiones era que no sabia exactamente porque, simplemente había sucedido como si hubieran colocado una pista de musica, perder sus cosas no fue su culpa, perder el enfoque si fue culpa de él, ahora; no tenia parte de su armadura, no tenían comida, su otra ropa se perdió, su reloj debió arder, dios, al menos aun tenia la foto de su vida pasada, conservaba su espada, el peto de hierro negro (Ahora casi arruinado), los 170 Dragmas de plata... Perdidos.

- No tenemos ni una plata... - Esto no parecía incomodar a la joven que seguía con la vista perdida en la oscuridad.

Los caballos pronto desaceleraron, solo un signo de que en lo que cabe, no estaban tan cerca del infierno.

Al menos no en un infierno lleno de fuego.

Ahora debería enfocarse en las cosas importantes, gracias a quien fuera el que repartiera los Stats, Isaac tenia un Stat de sabiduría lo suficientemente alto para recuperarse del estrés, ojala fuera que esa estadística también le evitara el desgaste mental.

Hablando de lo que...

>Nombre: Isaac Faust.

[Hp: 78/150][Mp: 42/42]

[Nivel: 6]

Exp: 392/685

Al menos pudo conseguir algo de Exp.

«¡Un momento!» Luego de revisar rápidamente su estado recordó algo, arrojo su peto al suelo y coloco su mano sobre el esternón, suspiro al notar el objeto debajo de la camisa.

Esto no perturbo ni un poco a la compañera del herrero.

Saco la piedra brillante que por suerte aun estaba allí, el "Colmillo de lobo" se había transformado en un collar después de que Isaac lo recibiera, si llegaban hasta Lancel quizás podría venderlo por unos cuantos Dragmas, aunque de nuevas a primeras, habían muchas cosas en la lista.

- ¿Esta todo bien? - Dijo Casper mientras abría la puerta del carruaje, tan sumido en sus ideas estaba que ni noto cuando habían parado.

- S-si, es solo... No es nada. - Algo de optimismo estaba mezclado en esas palabras.

- ¿Que hay de ella? No parece bien. - Casper como todo buen guardia, pese a ver algo terrible es capaz de inmutarse al cabo de un rato. No solo eso, a diferencia de Isaac, el no se dejo llevar por nada y siempre estuvo enfocado.

¿Esa era la diferencia en la experiencia?

- Yo la verdad no lo se. - Ya habían demasiadas en su cabeza.

¡No Soy Un Héroe!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora