Erin.
¿Quién lo diría? Chase cooper, una cafetería acogedora, mesa para dos y yo.
Todo esto es muy extraño, él se nota muy...
muy...
Muy poco hijo de perra, ¿si me entienden?
— ¿tienes fiebre o ingeriste droga? — solté repentinamente con una mueca de confusión.
Él rió.
Santos cielos su risa...
— no estoy enfermo ni tampoco me drogué — afirmó — simplemente te traje a un café a compartir un rato contigo.
— ¡ese es el problema, el Chase que conozco no querría compartir un rato conmigo! — dije molesta.
— eres tan extraña. Primero me acosas, luego me tiras helado encima, después me das una cachetada, aceptas una cita conmigo... ¿y ahora te pones histérica? — dijo prácticamente sin pausa alguna.
— y tú eres tan confuso. Primero eres mi crush, luego me descubres, te decepcionas, me invitas a un parque a decirme a la cara que mis oportunidades contigo son nulas... ¿y ahora me invitas a una cita? — fruncí el ceño.
— ¿qué quieres que te diga? ¿Qué en realidad ocultó lo que siento? ¿Qué simplemente no puedo verte a los ojos sin ponerme nervioso? ¿Qué tengo la necesidad de ser un imbécil por qué es lo único que sé hacer?
Rodé los ojos frustrada, esto no estaba saliendo bien.
Mierda, con Chase jamás algo sale bien.
Me levanté de la mesa molesta, realmente no estaba para seguir escuchando sus excusas.
Sentía su presencia en mi espalda, pero pese a eso nunca me detuve. Salí del lugar y ¡qué bien! Estaba lloviendo y yo no traía nada para cubrirme, que oportuno. Sentí como una mano tomó mi muñeca, girándome.
— suéltame, me voy ya. — exclamé.
— ¿cómo? No veo muy conveniente que te vayas caminando sola con toda esta lluvia.
— prefiero ir sola que contigo y tus bipolaridades.
De repente, él solo puso sus manos sobre mis mejillas, observándome fijamente.
— podré ser "bipolar", pero ¿crees qué lo que haré no va en serio?
Y ahí fue cuando sus suaves, delgados y perfectos labios se unieron con los míos.
Me inmovilicé, muchísimas veces imaginé cómo sería algo así, cientos de miles de veces pensé en lo que se sentiría.
Pero... no.
Lo empujé, observándolo como si él estuviera demente y lo golpeé en el rostro. Me fui rápidamente de allí, recordando lo ya sucedido una y otra vez.
Todo esto es una completa basura.
Pero maldita sea, que basura tan excitante.

ESTÁS LEYENDO
Crush [FINALIZADA]
Teen Fiction"¡Hola! Yo... soy anónima. La verdad, mi nombre será un misterio por un largo tiempo, acostúmbrate a hacerte una idea mental de quien soy porque... no estarás al tanto de mi identidad. Soy tu anónima, y estoy aquí con el propósito de... ¡hacerte sab...