"Noches salvajes"

Parte 23: Vigésima tercera noche

23- Vigésima tercera noche

**Zangetsu**

Me despierto sobresaltado al oír la tos repentina y ronca de mi hermano Starrk inclinado en su cama hacia el suelo para escupir algo de saliva. Me incorporo para sujetarle y que no se caiga y aprieto los dientes al ver como su rostro muestra una mueca de dolor inminente. Dios...y esto no ha hecho más que empezar, solo lleva una sesión de quimioterapia y está hecho polvo...

-¡Shunsui! ¿Dónde vas?- detengo a mi hermano al verle pasar por el pasillo rápidamente con la respiración agitada. Puede que haya estado ausente este tiempo compadeciéndome de mí mismo por lo ocurrido con los Kuchiki, pero no puedo refugiarme en el alcohol y los latigazos. Starrk nos necesita, Mugetsu sigue saliendo de casa a escondidas con el peligro de ser descubierto, mi padre duerme por las mañanas porque el sopor le puede y eso sin hablar de Tensa que sigue con la familia Kuchiki sin regresar a casa. No...no puedo dejar las cosas así. Tengo que asumir el mando en esta casa. No me queda otro remedio.

-Yamamoto ha reunido a todos los aldeanos en el ayuntamiento. Tienen al asesino de la familia Iba. Es Kuchiki Haruka-

-¿Qué?- cuando menciona a ese chico directamente pienso en Sen. Llevo soñando con él desde que le vi desaparecer y juraría que hasta se me apareció una vez para lamer la sangre de mis azotes, pero no lo recuerdo bien.

-Eso significa....- miro hacia la ventana donde ya ha amanecido aunque el cielo está cubierto de nubes negras por suerte.

-Sí. Usarán al pequeño de los Kuchiki para atraer a su familia. Ya saben lo que son-

-¡No!- Shunsui y yo vemos como Starrk me empuja para apartarme e intenta levantarse pero cae al suelo tosiendo.

-¡Starrk! ¿Dónde crees que vas?- le agarro para incorporarle pero él sigue forcejeando pese a su debilidad.

-Cogh! Cogh! Tengo...que ir....cogh! Soujun....- reacciono inmediatamente al ver la preocupación reflejada en los ojos celestes de Starrk y consigo tumbarle en la cama para que no se mueva.

-Yo iré a por Soujun. Evitaré que salga y haga una tontería-

-Él...te odia....no le detendrás, tengo que ir yo...-

-Tú tampoco serás de gran ayuda en tu estado. Shunsui, tú....-

-Yo no pienso meterme en esto. Tengo otra cosa que hacer-

-Shunsui....- mi hermano sale de casa sin decir nada más y yo me inclino hacia Starrk para acariciar su pelo húmedo y obligarle a mirarme.

-No te muevas de aquí. Sé que estás agotado, pero necesito que vigiles a padre para que no salga. Aunque el cielo esté nublado, el sol puede salir en cualquier momento-

-Ve....a por Soujun....- asiento con la cabeza apretándole las manos y salgo corriendo de casa para llegar cuanto antes a los dominios de los Kuchiki. El que el cielo esté encapotado le da cierto margen al pequeño de los Kuchiki para sobrevivir si le tienen apresado al aire libre, pero si el sol saliera...no quiero volver a revivir esa escena.

**Soujun**

Oigo la voz de Byakuya con un tono tan fuerte que me despierta de mi letargo. Apenas llevo una hora durmiendo y eso me hace gruñir porque sigue siendo de día. Pese a mi sopor, me incorporo de la cama y veo en la puerta principal a mi padre discutiendo con un acalorado Byakuya. Tengo un mal presentimiento.

-No tenemos opción, tengo que ir a por él padre-

-¿Sabes que es una trampa verdad? ¡Tú no podrás solo contra todos ellos!!-