Capítulo 1: El Niño que quería ser Marine

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Alvida era la capitana de Los Piratas de Alvida. Una mujer de 25 años notablemente fea y muy obesa, con pelo negro, muchas pecas en la cara y unas largas y afiladas uñas de color rojo. Vestía un sombrero de color blanco con unas plumas rosas, pantalones cortos blancos y una camisa a cuadros rosa. Su chaqueta de capitana era de color azul oscuro, y llevaba atada a la cintura una banda púrpura para esconder allí su pistola. Además, portaba numerosos anillos y joyas, y manejaba una pesada maza de hierro con pinchos con una notable destreza.
Su base secreta estaba ubicada en la cima de Goat, una pequeña isla desierta con un pequeño bosque en su interior.
Su navío, era un barco pequeño rosado y blanco, de cuatros velas pero con tres mástiles. En cada vela había un corazón rojo como insignia de la banda.
Y su bandera pirata, era un cráneo sobre dos huesos cruzados. El cráneo estaba de perfil, mirando a la izquierda, y tenía un corazón rojo que tapaba su sien.
-¿Por qué hay tanto polvo? -preguntó Alvida, pasando un dedo sobre la madera.
Estaba en la cubierta de su barco, frente a toda su tripulación, que eran unos pocos hombres.
-Lo...lo siento Lady Alvida -respondió temeroso uno de sus hombres-. Pensaba que ya había limpiado todo. Lo...lo haré de nuevo...por favor no...
-¿Que no qué? -preguntó la capitana.
-Que por favor no me dé con su maza de hierro, no quiero morir -gritó el hombre, aterrorizado.
《TONG》
Demasiado tarde. La sangre caía resbalando por el arma; el cuerpo del hombre, tendido en el suelo, sólo ensuciaba la madera.
-¡Coby! -preguntó Alvida-. ¿Qué es lo mas bello de todo el mar?
Coby era un pequeño muchacho tímido, de 16 años. Era de baja estatura, con gafas redondas, cabello rosa peinado con la raya en medio y de rostro redondo. Vestía una camiseta simple de manga corta y color blanco con botones, pantalones negros y zapatillas blancas con la suela roja.
-Usted, Lady Alvida -respondió temeroso.
-Exacto. Y odio la suciedad -respondió la señora-. Así que no consiento la mas mínima mota de polvo en mi barco. ¿Me entiendes? Aún vives porque eres el que mejor sabe de navegación, pero sólo sirves para eso, así que ve a ayudar a limpiar la bodega.
《PLAF》
Le asestó una patada en la cabeza al niño.
-Si señora -respondió, y rápidamente salió de allí, frotándose la frente.
-En cuánto a ustedes -continuó Alvida, dirigiéndose al resto de sus hombres-. Sigan limpiando y no dejen nada sucio.
-Si señora -respondieron todos al mismo tiempo. Y en seguida, agarraron sus escobas, sus baldes, sus trapos y se pusieron a lo suyo.

-¿Que?¿Dices que ese barril de sake se arrastró hasta la orilla? - preguntó uno de los tres hombres encargados de la limpieza. La bodega de la base, estaba en la cima de una pequeña colina que descendía hacia el bosque.
-Si, parece que aún le queda -respondió Coby, arrastrando con sus manos un gran barril de madera-. ¿Que hacemos con él?
-¡Bien, vamos a beberlo!¡Cómo la capitana se entere...!¡No se enterará, somos los únicos limpiando aquí! -discutieron entre ellos-. Bueno, nosotros y Coby...
-¿No vas a decir nada, verdad? -le preguntó uno, en tono amenazador, y levantando un puño.
-No, por supuesto que no -respondió el niño, temeroso-. Yo no vi nada...por favor, no me pegues.
De pronto, Luffy salió dentro del barril, rompiendo la tapa en pedazos y regando el suelo de astillas de madera.
-¡Aaaaaaay, pero qué buena siesta! -dijo, elongando-. Me he librado, pensaba que iba a morir jajaja.
Los hombres lo miraron unos segundos, sorprendidos, desconfiados.
-¿Quiénes son ustedes? -preguntó Luffy.
-¿Quién eres tú? -replicaron los hombres al unísono, haciendo énfasis en la última palabra- ¿Y qué haces dentro de un barril?
-¡Dejen de gritar! -se escuchó que gruñía Alvida desde el barco.《ZAZ》
Su maza de hierro atravesó la pared de la bodega, formando una nube de polvo y escombros. Ante ésta acción, Luffy salió rodando colina abajo, aún dentro del barril.

-Díganme ¿Qué es lo mas hermoso de éste mar? -preguntó, acercándose a las pequeñas ruinas de la bodega.
-Usted, Lady alvida -respondieron los tipos, levantándose adoloridos.
-Entonces ¿Por qué me desobedecen? -preguntó la capitana, arrugando el ceño.
-No...nunca haríamos algo así, mi señora -respondió uno de ellos, asustado.
-¡No me mientan! Los he oído decir "que buena siesta" desde el barco.
-¡Ah!¡Es verdad! Ese fue el intruso -exclamó uno de ellos-. Coby ha traído a un tipo extraño.
-Mmm ese traidor de Coby -indagó la capitana-. ¿Quien será? Quizás alguien que quiere atraparme y ganar 5 millones.
-¿Podría ser ese famoso cazador de recompensas? -preguntó uno.
-No creo, he oído que lo tienen prisionero en una prisión de la Marina -respondió otro.
-Pero no me extrañaría que Roronoa Zoro haya escapado -dijo Alvida-. Ese hombre, es un demonio.

One Piece: East BlueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora