GPS

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Maluma ft el pendejo que olvidó la letra de Who do u love? Aka French Montana.
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John podría casi asegurar que Mark lo amaba, la manera en las que sus ojos brillaban con extasiados durante las varias noches que habían pasado juntos se lo confirmaban.

Cuando amanecían en su cama y admiraba su cuerpo desnudo el cual había marcado con orgullo durante horas, justo como ahora lo estaba haciendo. Mark ladeó la cabeza a su dirección con una expresión que le causó ternura, arrastró sus grandes manos hasta su cintura y lo jalo hacia él para treparlo encima de su cuerpo igualmente desnudo para besarlo, sintió las pequeñas manos contrarias contra su abdomen cuando sus labios se juntaron en un húmedo beso, su lengua recorrió el interior de la boca del menor, sólo John sabía como besarlo de esa manera. Sus besos lo mataban, lo encendían y lo sabía muy bien.

La ronda de besos se acaba cuando ambos deben comenzar sus actividades, John debe ir al trabajo y Mark debe regresar a casa de sus padres después de haber mentido diciendo que iba a quedarse en casa de uno de sus mejores amigos.

[...]

Los días pasan como si nada siendo aquel día de febrero que todas la parejas esperan, la cosa es que ellos no son pareja, su relación no tenía nombre, a veces salían y conversaban pero en realidad pasaban más tiempo en la cama y jamás le pusieron nombre a lo que tenían. Salió de la última reunión del día y entró a su oficina para recoger sus cosas, su teléfono vibró y lo desbloqueo distraído, más concentrado tener todo en su maletín que en ver quien le mandaba mensaje, cuando sus ojos se posaron en la pantalla lo que vio le robó el aliento, Mark simplemente había enviado un "te espero" junto a una imagen de él mismo usando sus bonitas prendas pegadas y tocándose, sus bonitos y rosados labios abiertos cerca de la cámara fueron suficiente para motivarlo, la manera en la que lo volvió loco sólo con eso era una prueba más de que estaba cayendo rendido por el jovencito.

Soltó una risita silenciosa antes de guardas su teléfono en su bolsillo, salir del edificio y subir a su auto, eran más de las ocho y había un tráfico terrible que no lo detuvo para hacer una parada antes de ir a donde Mark. Sin necesidad de un gps condujo por el camino que ya se sabía de memoria hasta que los autos fueron disminuyendo y llegó a donde ansiaba.

Una pequeña villa fuera de la ciudad era el lugar de sus encuentros, era una residencia que los padres de Mark tenían abandonada y que ellos no habían dudado en usar como punto de encuentro. La puerta de encontraba abierta y sólo giró el picaporte para entrar por el pasillo que lo llevaba directo a donde su amante se encontraba.

Llegó dando zancadas hasta el cuerpo desnudo esperándolo en la cama, sus manos tomaron vida propia para delinear sus curvas y besarlo sin cansancio, recorrió sus piernas como a un tesoro, se sentían suaves y pálidas mientras navega entre ellas sintiendo como el menor de estremecía ante el contacto.

—¿Esto quieres dulzura?—Susurro en medio de la oscuridad.

—S-si, por favor.—Busco sus labios y se quejó cuando John se negó a besarlo de nuevo para levantarse.

Sus ojos comenzaron abrirse con dificultad y se encontró con el mayor sosteniendo un látigo y unas esposas entre sus manos, su mirada oscurecida mirándolo directamente a los ojos, y es que sabía perfectamente que Mark no era del tipo que amaba los detalles cursis como las rosas, sabía del estilo peligroso que le gustaba probar en su cama.

De sus labios salió un suspiro tembloroso cuando sintió el cuero pasar por su piel sensible, las manos de John jalaron sus caderas hacia arriba, dejando que sus rodillas chocaran contra el colchón cerca de la cabecera donde colocó sus brazos extendidos hacia arriba, el frío del metal lo hizo jadear cuando la esposas se cerraron en sus muñecas. Le tomo por sorpresa el piquete que sintió cuando el látigo cayó con fuerza contra sus nalgas, soltó un gemido de dolor ante la sensación.

Quiet, babe.—Ordenó con su voz sonando cada vez más grave.—Ahora estas bajo mis reglas, a mi manera.

El juego previo comenzó, varias lágrimas cayeron por sus mejillas, la anticipación haciendo todo más placentero, para cuando fue liberado Mark ya se sentía en una nube abrumadora de extasis sin poder entender que pasaba a su alrededor, sólo podía concentrarse en los labios de John en los suyos, en su cuello succionando su piel hacia abajo haciendo un camino de moretes hasta sus piernas.

Sus ojos se cerraron con fuerza mientras arqueaba la espalda.—M-más, más J-John, please.—Sus palabras apenas se entendían.

—Como mi bebé quiera.—Gruño embistiendo sin parar el pequeño cuerpo debajo suyo.

La noche siguió hasta que sus cuerpos sudorosos cayeron rendidos y muchos besos perezosos fueron sus buenas noches.

[...]

Importándole poco que fuera tan temprano John le dio un trago a su whisky mientras veía a Mark dormir pacíficamente, abrazaba una almohada y una de sus piernas se salía de las sábanas, la serenidad en su precioso rostro se vio interrumpida cuando comenzó a abrir los ojos con lentitud, se estiró dejando ver su cuerpo desnudo lleno de marcas que fueron hechas recientemente y las lucia orgullosamente mientras gateaba hasta donde el mayor se encontraba.

John no era fotógrafo pero Mark posaba en su cama como si lo fuera, el brillo travieso en sus ojos le hizo intuir lo que estaba apunto de hacer cuando las delgadas manos comenzaron a jugar con la pretina de sus bóxers mientras mordía su labio inferior. Moviendo de arriba hacia abajo sus manos sobre su miembro despertando, se hubiera reído de cómo el menor se concentraba en masturbarlo pero su respiración se hacía cada vez más pesada cuando sus labios se cerraron contra su pene, siendo lento para arremeter y meter todo dentro de su pequeña boca.

Las manos de John jalaron su cabello obligándolo a ir más profundo, Mark tuvo que respirar fuerte por la nariz para cuando llego a la base y lo podía sentir hasta en su garganta, el reflejo nauseabundo pasó cuando comenzó a mover su cabeza metiendo y sacando el pene del mayor de su boca con sonidos obcenos. Su lengua pasaba por las venas marcadas y sus mejillas se ahuecaban buscando darle mayor placer a John quien soltaba gemidos roncos moviendo su cadera contra la boquita hinchada del menor.

Mark abrió los ojos mirándolo directamente mientras chupaba su polla y le volvía loco como podía mantener esa falsa inocencia brillando en su mirada mientras su lengua se paseaba por su longitud, salivando al mantener tanto tiempo la boca abierta.

—Voy a correrme, cariño.—Avisó sujetando fuertemente sus cabellos.—Trágalo todo.—Ordenó con voz ronca y Mark sintió que casi se derretía contra sus muslos con ese tono de voz.

El sabor salado choco con su paladar y pronto inundó toda su boca, caliente chocando contra su garganta, encantado trago todo sin rechistar, sacando el pene de su amante para mostrar su lengua y demostrar que había tragado todo y había sido un niño obediente. La caricia en su mejilla le hizo sonreír acercando a besar los labios de John y recostarse contra su pecho mientras el mayor le ofrecía un poco del whisky. Mark bebió un poco haciendo una pequeña mueca que hizo reír al alto.

No sabía cómo su relación había tomado ese camino, un día cuando un inversionista canadiense llegó con aquel mocoso que acompañaba a su padre para aprender acerca de sus negocios y no resultó cómo creía, dedicándole miradas durante las reuniones, supo que al pequeños curioso no le importaban los negocios, era un jodido mimado Niño de papi que no dudó en sentarse en su regazo cuando su padre se fue, y comerle la boca con descaro. Había cedido ante sus deseos carnales y no se arrepentía ni un poco por que John estaba feliz de mimar a Mark y tenerlo para él solo. Su relación no tenía nombre y el menor se enamoraba de como lo usaba, el mayor no sabía que era lo que sentía por él, tal vez el tiempo diría que iba a pasar pero por ahora seguiría manejando sin necesidad de un gps para llegar a su pequeño.

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Yo no necesito un GPS
Pa' llegarte siempre donde estés
Déjame contarte, yo no vine a amarte
Sólo vine a darte hasta las seis

HellOoo mAtessss
Les traigo algo recién sacado del horno, calientito 🌚.
Ya volví, ya volví jsjsjs.
Con una canción de Maluma oppaaarrrr.
Díganme si les gusto o k pex.

La mua entró a la escuela y de hecho tiene proyectos tareas y exámenes pero les vino a escribir algo por que los tkm. 🤠🤘🏽

JohnMark's flow Donde viven las historias. Descúbrelo ahora