Tú... Mi fuerza

Silencio

- ¿Y ahora?

- Ahora te llevas este informe a la comisaría y montas la denuncia.

- ¿Crees que será suficiente? - Ella lo miró por un momento. - ¿Qué pasa si queda libre?

- Entones pediremos una orden de alejamiento.

- Tú no lo entiendes, él no se va a detener, esta... Obsesionado con Jen.

- ¿A que te refieres? - torció la boca tratando de evitar decir algo que quizás no le competía - ¿Esto había pasado antes? - desvío la mirada - Dani...

El maestro suspiró rendido, reposaba las manos en su cadera que no tardaron en pasar a su cabello desordenándolo.

- Si... Bueno, algo así... Pasó hace unos meses, después que ellos... Ya sabes, terminaran. - explicaba de manera torpe.

- ¿Qué fue lo que pasó? - él se quedó en silencio - Dani...

Dani se quedó en silencio mirando detrás de la doctora, una mano reposo en el hombro de ella. En busca del autor del contacto encontró a Janneth a su lado con una sonrisa ¿Cómo podía sonreír después de lo que acababa de vivir? La catira pensó en que si no fuese por los moretones en su cuello nadie se daría cuenta de lo que había pasado, cualquier otra persona estaría atemorizada o en shock pero la castaña emanaba una alegría con su sonrisa despampanante a pesar de todo.

Abrió la boca intentando decir algo.

- ¡Hey! Nada de hablar - detuvo la doctora y Janneth hizo un puchero.

- Yo cuidaré de ella, doc - el maestro hizo una seña para que la castaña andará y ella así lo hizo, el sacudió el papel en el aire y siguió a su amiga.

Ambos entraron al auto, Dani colocó descuidadamente el papel en el tablero y arranco. No pasó mucho tiempo para que Janneth lo tomará.

- ¡Hey! - intento arrebatarle el informe, pero entre coordinar sus acciones y evitar tener un accidente automovilístico fracasó.

La castaña leyó el documento, frunció el ceño y luego volteó hacia su amigo, su expresión era de esas que no necesitan estar acompañadas de palabras, decía "¿qué es esto?

- No me mires así... - no apartaba la mirada del camino, tampoco necesitaba verla para saber lo que pensaba o quería decir - se lo que piensas Jen, pero esta vez no... - ella suspiró fuertemente dirigiendo su mirada a la ventana, quizás frustrada por no poder argumentar - no te enfades conmigo, solo quiero protegerte.

Había parado en un semáforo en rojo, tomó su mano apretándola, no tan fuerte como para lastimarla pero sí para hacerle sentir que estaba allí, con ella. La castaña lo miró, aún con el entre cejo arrugado pero esta vez en señal de preocupación.

- Jen... No puedes protegerlo siempre, Fernando es un adulto, responsable y consiente de sus actos - ella intentó articular palabra pero el dolor en la garganta no se lo permitía - se lo que vas a decir y no... - su voz ya no era tan suave - Sin importar que, nada de esto es tu culpa, así que sácate eso de la cabeza de una vez por todas.

Volvió a la ventana, el silencio termino por invadir la camioneta durante el resto del viaje. Ya en la entra de su departamento Janneth bajó del auto, miró la puerta por un tiempo, un poco más de lo considerado normal preguntándose internamente que había pasado con Fernando, seguramente no seguiría ahí, Dani no la llevaría allí si fuese así. Salió de aquel transe al escuchar a su amigo indicándole que entrara.