El cielo y el infierno. (diakko)

Gran amistad y un pequeño amor.

Akko despertó emocionada y con toda la energía posible, fue rápidamente al comedor en donde esperaban sus padres, se sentó con una gran sonrisa en su cara.

- Y porque tan feliz?- Pregunto su madre la reina Chariot.

- Ayer conocí a una niña.- dijo emocionada mientras comía su cereal con un poco de prisa.

- Y donde vive esa niña?- Pregunto su padre con interés.

- Vive en...- estaba a punto de decirlo hasta que recordo que vivía en el infierno.- Padre... Porque pusiste esa ley de que si un ángel o demonio cruza a territorio enemigo es sentenciado a muerte?.

- ..... Porque preguntas eso?.- Dijo su padre levantándose de la mesa.

- ahh... Por nada.- akko termino su cereal y se fue a su cuarto.

Decidió ir a caminar un rato en lo que llegaba la tarde, se quedo jugando un rato con sus amigas lotte y sucy. Hasta que se hizo tarde y tenia que ir a la frontera en donde se encontraría con su nueva amiga (diana no sabia que akko ya era su amiga).

- Akko a donde vas?- pregunto lote con curiosidad.

- Voy a ver a... Una amiga.- Akko se invento una excusa para irse.

- Entonces podemos ir contigo, cualquier amiga tuya es amiga nuestra- Lotte estaba dispuesta a acompañar a akko.

- No pueden porque... Ella es tímida - dijo akko mientras se alejaba de sus amigas.

Llego hasta donde se encontraba la separación de ambos mundos, y encontró a esa niña a la que deseaba ver.

- Hola.- dijo akko hacercandose hasta la orilla.

- Ten cuidado, te puedes caer- Dijo la chica mientras se hacercaba hasta la orilla también.

- Ayer se me olvido preguntarte, como te llamas?- Akko fue directo al grano ya no aguantaba ni un segundo sin saber su nombre.

- Me llamo Diana- dijo la ojiazul- Y tu?

- Yo soy akko.

- Mucho gusto akko.- dijo la rubia con un poco de cortesía.

Siguieron hablando sobre ellas hasta que llego la hora de irse. Akko y Diana se despidieron, ambas no querían irse pero tenian que hacerlo.

Siguieron viéndose todas las tardes hasta tomarlo como rutina, paso un año y crecía cada ves mas su amistad, pero akko empezó a sentir un poco mas que amistad hacia diana.

Akko ya tenia 11 años y Diana tenía 12, ya era la hora en la que Akko iría a ver a su mejor amiga, por el momento nadie los había visto y cada ves mas se sentian mas confiadas, en su camino, akko tuvo una "gran idea": que diana cruzara la frontera y se la presentara a su madre y padre. Se le ocurrió sin pensar en las consecuencias de sus actos.

-Hola!!- dijo akko saludandola desde lejos.

- Hola akko!- A Diana le encantaba que akko fuera su amiga, ambas sabían que eran de la realeza e hicieron un juramento de sangre de que si se volvían reinas iban a romper la ley impuesta.

- Diana... Puedo pasar?.- Akko se refería a que si podía pasar al otro mundo o tambien llamado infierno, pero diana no le entendió.

- Como que pasar?... Pasar a donde?.- Diana estaba confusa no sabia a lo que se refería akko.

- Si... Voy a pasar al infierno. Contigo- dijo akko dispuesta a ir, ya había puesto un pie en la otra orilla de cráter, no era muy ancho.

- No espera!- al decir eso sonó un relámpago en el infierno. Esa era la alarma: cada ves que un ángel entrara o un demonio saliera se iba a escuchar un trueno proveniente de un rayo.

- Vete!- diana empujo a akko haciendo que akko retrocediera y volviera a su territorio.

- Entonces ven tu- No había pasado ni un segundo y akko agarro a diana y la jalo, la rubia se resistía, pero ya tenia un pie en la otra esquina del cráter.

El dibujo de hasta arriba representa esto ( el dibujo es mio )

- Que?? No, espera!!- intento aletear para liberarse pero fue en vano, akko había agarrado sus alas y no podía hacer nada.
Del infierno se escucharon 3 truenos por ser la hija de la reina, diana entro sin otra opción al cielo, el mundo de los ángeles, en donde todo era alegría y felicidad lo que ella muy pocas veces había visto en su mundo.

- Que has hecho!?, tengo que volver!- le dio la espalda y se dispuso a volar hacia su casa, pero se sintió débil y no pudo volar.

- Ahh??...- la ojiazul estaba sonrojada al ver que la castaña le había agarrado la cola, su punto débil (7w7).

- No te vayas - Suplico akko mientras jalaba un poco mas la cola de la rubia.

Diana sintió un escalofrío en todo el cuerpo, enserio que su cola era su punto débil a tal punto que no se podía mover. Nadie le había tocado su cola y se sentia raro.

Akko abrazo a Diana para que no se fuera y le susurro ala oreja. - Quedate conmigo.- la ojiazul se sonrojo levemente.

Seguían abrazadas, pero la rubia vio a un ángel en una nube cercana y que al poco rato se fue volando, tardo un momento en procesarlo, pero al final supo que el ángel iba a avisarle al rey de que un demonio había entrado al cielo.

- Akko!- Se separo inmediatamente.- Ya saben que estoy aqui!- dijo con inquietud.

- Entonces vamos.- Akko empezó a jalarla de la mano mientras caminaba en dirección a su casa.

- Me vas a entregar!?- dijo la ojiazul intentando librarse de la castaña.

- Claro que no, te voy a ocultar en el palacio. Es un lugar muy grande, con pasillos secretos.- akko siguió caminando junto con diana, estaban agarradas de la mano y ambas estaban asustadas por lo que les pudieran pasar, ya que en su camino al palacio iban a haber muchos ángeles y tenían que ingeniárselas para pasar sin ser vistas. Seria la misión suicida :v