¡Quiero que seas mi papi! »MingKit«

Capítulo Cuatro.

Realmente quiero saber cómo una salida a tomar un helado entre compañeros de trabajo y sus hijos, que eran amigos y ellos sé enteraban recién, termino incluyendo a un profesor y al enfermero del lugar donde estudian los niños.

¿Cómo llegamos a esto? Fácil. Cuatro adultos hemos sido manipulados por las lágrimas falsas de mi hijo diciendo que "quería que nos sentamos todos juntos"

Como padre no puedo ver llorar a mi hijo, por lo que prácticamente les rogué con la mirada que se unieran a nosotros. El enfermero o Beam, como le había dicho antes Forth, no tuvo problema alguno. En cambio Kit se mostró más recio a aceptar. Igual, solo basto con que Wayo lo mirará con sus ojitos de cachorrito para aceptar.

Por lo que ahora estábamos todos con un helado en la misma mesa. Wayo y Phana jugaban. Forth y Beam estaban discutiendo en susurros. Lo que nos dejaba tanto a mí con a Kit juntos. Él estaba incómodo. Lo cual no era raro.

Kit me parecía fascinante. No lo conocía mucho. Pero podía decir que era amable, educado, inteligente y ama a los niños. Y su apariencia no de queda atrás. Desde sus ojos con una mirada suave, y suave cuando habla con los niños, su cabello negro, su cuerpo delgado y su buen gusto en la ropa lo hacían por lejos un hombre espectacular.

Por supuesto que me había llamado la atención hace unos días cuando deje a Wayo. A él tampoco le era indiferente mí presencia. La tartamudez y el enrojecimiento de su rostro lo delataron.

Hace años que no estaba en un relación. Siempre estará primero Wayo. Pero Kit siendo un profesor debe entenderlo.. ¿O no?

"Y... ¿Cómo estás?" Inicie la conversación.

"Bien, ¿Y usted?"

"Igual. ¿Recuerdas que te pedí que me llamaras por mi nombre? No me hagas sentir más viejo, aún no tengo tantas canas" intenté bromear para que de relajara un poco. Funcionó. Sus hombros se relajaron y pude ver una media sonrisa. Me emocioné. Era un paso.

"Como nos han excluido de las conversaciones de nuestro comprañeros de mesa" dije refiriéndome a la charla de algún dibujito animado de los niños y la discusión entre Forth y Beam. "¿Quieres jugar a las 20 preguntas? Para conocernos un poco más"

Dudo por un momento. Pero igual acepto.

"Claro, ¿Empiezas?"

"¿Cuántos años tienes?" Una pregunta sencilla.

"24, ¿y tú?"

"Tengo 26." Seguimos preguntándonos cosas básicas como gusto musicales, trabajo, entre otros. Cada detalle nuevo que me entraba de Kit me gusta más y más. Guarde mi última pregunta para lo mejor.

"Muy bien, última pregunta. ¿Tienes pareja?" Directo. Aunque sinceramente, mi corazón latía al ritmo de un tambor por culpa de los nervios. Realmente quería que diga que no. Hace años que nadie me interesaba tanto como él.

Kit me miró por un segundo antes de decir "no, no estoy saliendo con nadie" sonrió antes de continuar "¿Tú sí?"

"No, no. En mi corazón solo está mi pequeño Wayo" Kit sonrió aun más al escucharme decir eso.

"¡Papá! ¡Deja de robar la atención del profesor Kit! ¡Yo también quiero!" Mi hijo grito mientras se tiraba arriba el mencionado.

"Hey... tranquilo. Tú siempre estarás primero que tú papá" le dijo Kit mientras besaba la frente de Wayo y sonreían.

Quedé embobado viéndolos conversar. Yo era un niño callado ante extraños pero aparentemente con su profesor favorito no. Él solo hablaba mientras Kit asentía o hacia algún que otro comentario.

Me imaginé a los tres como una familia. En el sillón viendo alguna película comiendo dulces abrazados los tres. Wayo gritando emocionado por la llegada de Santa mientras los tres decorábamos el arbolito. O algo más cotidiano. Desayunar juntos en la mesa todas las mañanas antes del trabajo y el colegio. Juntos, los tres. Como una familia.

Nunca había pensado en ello. Quería darle todo a Wayo no tenía tiempo para formar pareja. Pero ahora, viendo cómo Kit sostenía a Yo entre sus piernas y escuchaba atentamente algo que le contaba sobre sus juguetes, me di cuenta que faltaba algo. Faltaba alguien al que Wayo pudiera llamar «papi». Alguien que lo ayudará en las tarea cuando yo tenía mucho trabajo y no llegaba hasta entrada la noche. Alguien le gustara pasar tiempo conmigo. Más importante aún, alguien que amaran a Wayo. Que lo pudiera delante de todo aún no siendo parte de su sangre.

Realmente quería todo eso.

Y pensaba que Kit era el indicado.

Por lo que iba a luchar duro por esto.

Wayo merecía una familia completa y feliz.

Y yo quería a Kit en ella.

Sin corregir. Lo siento.

Gracias por leer ♥

Red