❝ En donde Finn y Millie, tienen que enseñarle inglés a Adelaide, la hija de ambos. ❞
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⇾Portada hecha por @_beautifuldisaster <3
⇾ Segunda temporada de 'Español'.
⇾ Fecha de inicio: 03-09-2019
⇾ Fecha de finalización: ???
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El día iba con normalidad, Millie había pasado a dejar a Addy en casa de Finn hace un par de horas.
Cuando la pequeña llego, le pidió a su padre un día más de descanso de las clases de inglés y, a pesar de que Finn ya haya tenido todo planeado para ese día, decidió aceptar, le apetecía pasar un rato con la niña.
Así que, ahora mismo, ambos se encontraban recostados en uno de los sofás, mientras el pelinegro buscaba una película para ver junto a Addy, mientras comían dulces y palomitas, ambos eran fanáticos de los dulces.
Addy tenía su cabeza sobre el brazo del pelinegro y a la misma vez pasó uno se sus brazos por encima de su pecho, en forma de abrazo. Finn no podía sentir más amor por esa pequeña niña a la que sólo hace unas semanas había conocido.
Cuando por fin encontraron algo para ver, la mitad de las golosinas habían terminado, pero Finn no le tomó importancia, ya iría a tomar mas cuando se terminasen por completo.
No estuvieron ni quince minutos viendo la película, cuando Adelaide ya de había quedado completamente dormida. Cuando Finn lo notó, no pudo evitar mirarla con total cariño, estaba seguro que ella, al igual que Millie, algún día lo matarían de amor. Eran completamente idénticas y eso sólo hacía que él la amase más.
La apegó más a él y besó su frente con cariño.
Tan sólo pasaron unos minutos, cuando el chico ya había quedado igual de dormido que la pequeña.
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El timbre de la puerta sonó, haciendo que él se despertase.
Se levantó con sumo cuidado de no despertar a Addy y, antes de ir a abrir la puerta, dejó un pequeño beso en la frente de la pequeña. Miró la hora, aún era muy temprano como para que fuese Millie a recoger a Addy.
Abrió la puerta, encontrándose con Mackenzie, había olvidado por completo que la había invitado.
—Finn, hola.
—Hola, Kenzie —le sonrió el pelinegro —, pasa, sólo ignora el desastre que hay.
—No, no te preocupes, mi casa está peor —rió y entro, pasando a un lado de Finn.
Le fue imposible no notar la presencia de la pequeña niña durmiendo en el sofá, la miró con ternura y sonrió.
—¿Ella es Adelaide?
Finn asintió sonriendo.
—Es idéntica a ti, pero a la vez también a Millie —dijo —, tiene un gran parecido a ambos, no hay duda de que sea tu hija, Wolfhard.
