NARRA ALBA
Llevaba ya algo más de dos semanas sin saber nada de Natalia y estaba super preocupada, apenas podía dormir pensando que le había pasado algo. Durante esas semanas la llamé y le escribí muchísimos mensajes, pero acabé perdiendo la esperanza. ¿Por qué decidió desaparecer así de repente? ¿Hice algo malo? ¿Y porque se iría sin ninguna de sus cosas? Sin darme cuenta había empezado a llorar, pero el sonido de mi móvil me sacó de mis pensamientos. Miré la pantalla y vi que el mensaje que me había llegado era de Natalia, lo abrí rápidamente y pude ver en la pantalla que ponía: tenemos que hablar Albi, nos vemos en media hora en el banco de la última vez.
No pude evitar sorprenderme ante el mensaje. Me dirigí rápidamente a mi armario para buscar algo decente que ponerme ya que últimamente llevaba unas pintas... Me puse ropa cómoda y opté por no ponerme nada de maquillaje. Una vez acabé salí y me dirigí al banco en el que vi a Natalia la última vez. Cuando llegué ella ya estaba allí, me percaté de que ya le habían quitado la escayola. Nada más me vio se levantó del banco.
-Holi- dijo sonriendo ligeramente.
-Ni holi ni leches Natalia, llevo más dos putas semanas sin saber nada de ti ¿Te haces una idea de lo preocupada que estaba?- dije seria.
NARRA NATALIA
-Lo sé- no pude evitar que me cayeran las lágrimas- pero mi padre me quitó el móvil.
-¿Y eso que tiene que ver?- dijo seca- ¿no pudiste coger otro puto móvil y decirme por lo menos que estabas bien?
-Alba por favor, no es lo que piensas, déjame explicarme- dije entre lágrimas.
-Esta bien, vamos a sentarnos.
-¿Te acuerdas de la llamada que recibí hace dos semanas?
-Si
-Pues era mi padre- dijo triste- le había llamado su amigo diciendo que me había visto besándome con una chica. Me dijo que, si no volvía a Pamplona inmediatamente, te encontraría y me dio mucho miedo que pudiera hacerte algo Albi. Cuando llegué a Pamplona me quitó el móvil, por eso no pude contactar contigo y además me tenía todo el día vigilada- seguían brotando lágrimas de mis ojos- lo siento mucho Alba.
-Natalia tranquila- me abrazó- no es tu culpa- dijo mientras me acariciaba el pelo- pensaba que te habías ido por mi culpa, que no querías saber nada de mi.
-Joder Alba, de verdad que lo siento- dije llorando aún más.
-Tranquila Nat- miró mis labios y los besó con ternura- ¿Y cómo es que has podido volver?
-Anteayer le dio un infarto y falleció.
-Ostras Nat, lo siento.
-No lo sientas, era un cabrón, un día llegué a pensar que me mataba.
-Pero era tu padre...
-Mira- me levanté la camiseta dejando ver los moratones que tenía en los costados de mi cuerpo, me levanté también las mangas dejando ver más moratones en los brazos.
-¿Eso te lo hizo él?- dijo asustada a lo que yo asentí con la cabeza- madre mía ¿Y te duele mucho?
-Un poco.
-Siento que te haya pasado esto- dijo agachando la cabeza.
-No te preocupes, lo importante es que haya podido volver aquí contigo- cogí su cara suavemente y nos fundimos en un beso.
Espero que os esté gustando la historia :) Siento si actualizo menos pero las clases me quitan mucho tiempo ❤
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Corazón negro, corazón amarillo
أدب الهواةAlba Reche, una chica de 21 años llega a Madrid a vivir a una universidad donde conocerá a nuevos amigos y a una chica en especial que le romperá todos los esquemas. Va a estar mayoritariamente narrada por Alba pero habrá momentos en los que narrará...