Corazón negro, corazón amarillo

CAP. 4

NARRA ALBA

Rebusqué en mi armario para encontrar un modelito para la fiesta. Al final decidí ponerme un vestido negro de tirante ancho por encima de la rodilla, una riñonera y unas zapatillas con un poco de plataforma. Fui al baño para maquillarme, me hice un maquillaje bastante básico y me pinté los labios de rojo. Llegó la hora a la que habíamos quedado y bajé a la sala de baile. 

Cuando entré vi a Julia y a María dejando las bebidas y las cervezas en una mesita y a África enchufando su móvil a los altavoces.

-Mírala, preparándose para perrear- dijo María refiriéndose a África.

-Y tú para emborracharte- le contestó Julia riéndose.

-Hola chicas- dije riéndome ante la conversación.

-Holaaa- contestaron las tres.

Estuvimos unos minutos hablando, Julia era super divertida y su acento andaluz le hacía serlo aún más. Al poco vimos aparecer por la puerta a Damion, Joan y Marta. Y por último llegaron Miki y Natalia. Natalia iba super guapa, llevaba un pantalón vaquero pitillo de color negro, unas botas y una camiseta ancha. Sin darme cuenta me quedé mirándola fijamente.

-Eh despierta- dijo Natalia riéndose mientras daba una palmada enfrente de mi cara.

-Os gusta llegar tarde eh- contesté como si no hubiera pasado nada.

-A mí no, pero es que aquí el amigo es un lento, he estado a punto de no esperarlo- contestó Natalia mirando a Miki- por cierto, estás muy guapa rubia.

Tras decir esto Natalia se alejó a hablar con otra gente. No entendía como cada vez que me decía algo así decidía apartarse. En ese momento vi a Miki subirse a una silla.

-QUE EMPIECE LA FIESTAAAAAAA!!!!- gritó.

Entonces África dio al play a su lista de reggaetón y empezó a sonar la música a todo volumen. Me acerqué a la mesa de la bebida a por una copa y empecé a beber. La gente empezó a ir hacia la pista de baile y a mí me daba un poco de vergüenza porque los conocía de hacía una semana así que miré a mis alrededores en busca de alguien con quien hablar. Entonces apareció alguien por detrás de mí.

-¿Qué buscas rubia?

-Joder que susto Natalia- dije girándome y dándole un pequeño golpe en el brazo.

-Lo siento, no quería asustarte- dijo riéndose- ¿Vienes a bailar?

-Me da un poco de vergüenza...

- Va, venga, no seas tonta- dijo cogiéndome del brazo y tirando de mi hacia la pista.

Empezamos a bailar al ritmo de la música a cierta distancia, pero entonces Natalia me cogió de las caderas para acercarme un poco más a ella. Me pareció un poco precipitado, pero decidí seguirle el rollo. Empecé a tener mucho calor y me separé poco a poco de ella.

-Eh... Esto... Voy a por una copa- dije apartándome completamente de ella.

Cogí la copa y fui bebiendo mientras iba al baño a mojarme un poco la cara. ¿Pero que me está pasando?

NARRA NATALIA

Vi a Alba marcharse, mierda Natalia, ¿Qué has hecho? La has espantado. Decidí salir a la entrada del edificio para fumarme un cigarro. Se que fumar no es la solución a todos los problemas, pero me relaja bastante. Tras acabarme el cigarro me dirigí a mi habitación ya que se me habían acabado las ganas de fiesta.