BlackPink y Tú

Anillo

Jisoo llegaba a casa luego de salir a comprar un anillo con las chicas.
Ella y T/n han estado juntas desde hace años, crecieron juntas, se enamoraron casi que al mismo tiempo; y de ese gran amor salió la pequeña Chaeyoung, su hija.

Muchos pensarán que están muy jóvenes para ser madres, pero el amor y el apoyo que se dan no tiene que ver con la edad. El amor llama a tu puerta cuando menos lo esperes.

T/n es cantante y compositora del grupo de su hermano mayor, EXO, así que se la pasa en viajes y en el estudio; y Jisoo también tiene una vida muy ocupada, así que decidieron tomarse unas largas y merecidas vacaciones para cuidar a su pequeña.

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Jisoo entraba a la casa, pero para su sorpresa, el silencio inundaba el lugar.
Llamó varias veces a T/n, pero no obtuvo respuesta.
Eso es extraño.

Caminó hacia la cocina y pudo ver a su tierna novia cocinando una delicia.
Se acercó por la espalda rodeando su cintura, haciendo que la menor diera un leve saltito por el susto.

—Hola, bebé

T/n simplemente sonrió un segundo, sin atreverse a mirar a Jisoo.

'¿Qué rayos le pasa?' Pensó la mayor.

La tomó de sus brazos, haciendo que diera media vuelta, por lo cual recibió un suspiro de parte de la más baja.

—Jisoo, estoy tratando de cocinar. ¿Qué es lo que quieres?

—Primero, no me diste mi beso de bienvenida —Jisoo tomaba su mejilla suavemente, intentando cruzar sus miradas. —Segundo, ¿Qué sucede contigo? ¿Por qué no estás con Chae? ¿Por qué evitas mi mirada?

—Chaeyoung está durmiendo

—Eso no responde mi pregunta —Jisoo respondió un tanto molesta.

—Por Dios, Jisoo. Tal vez solo estoy cansada, ¿Si?

Fue lo último que dijo la menor antes de salir de allí.
Jisoo rápidamente apagó todo en la cocina y fue a buscarla.

Buscó y buscó pero nada encontró.
Soltó un suspiro rendida y fue a buscar a su pequeña hija.
Entró a su habitación y le dio un tierno beso en la frente al verla allí acostada.
Fue en ese momento que escuchó unos sonidos provenientes del closet de la pequeña.

Se acercó allí, abriendo la puerta, encontrando a su novia en el suelo sollozando.

—Ay, cariño —Se agachó frente a ella. —¿Qué te ocurre? —La tomó entre sus brazos y la sentó en su regazo.

—E-es solo que... — Sollozó. —Me he sentido muy insegura últimamente

—¿Insegura? ¿Sucedió algo? ¿Te dijeron algo?

—No es eso —Negó la menor. —Es solo que desde que tuve a Chaeyoung, siento que ya no soy atractiva. Ya no quiero que me veas, no quiero que nadie lo haga —Comenzó a llorar de nuevo

Para Jisoo, T/n es la mujer más hermosa que hay en la tierra.
La chica más PERFECTA que existe y que ha visto jamás.
Ella ha sido hermosa antes y después de tener a Chaeyoung.

—No, no, no, cariño — Negó la mayor. —Tú eres la persona más hermosa que ha pisado esta tierra. Yo te amaré sin importar tu apariencia. Te amo tal y como eres. Estoy enamorada de tu mente, tu personalidad, tu actitud, tus inseguridades... — Sonrió. —Tu apariencia es lo que menos importa porque tú ya eres perfecta, y sin embargo, eres hermosa por fuera también

Luego de aquellas palabras, ambas compartieron una tierna y larga sesión de besos mientras la menor se calmaba.

—Iba a hacer esto luego pero contigo cada momento es el indicado —Jisoo suspiró nerviosa. —Sé que las ultimas semanas han sido algo agotadoras para ti, pero aun así siempre das lo mejor de ti cada día. Nos das amor a mi y a Chaeyoung sin importar qué tan cansada te encuentres. Tú tienes el corazón más puro y honesto que conozco, eres muy amable y perdonas a las personas aun sabiendo que nadie merece el perdón de alguien tan extraordinario

Hizo una pausa, tomando un respiro.

—Te preocupas por todo lo que sucede, no importa que tan pequeño sea —Continuó hablando. —No puedo imaginarme una vida sin ti. Por eso te amo mucho y quiero que pases el resto de tu vida a mi lado casándote conmigo —Sonrió abriendo la pequeña cajita con un anillo de diamante adentro.

—Claro que me caso contigo, Unnie —Respondió con una sonrisa y Jisoo rápidamente le puso el anillo con emoción. —Te amo más de lo que te imaginas

Jisoo la tomó entre sus brazos, con una sonrisa. —También te amo —Se acercó a sus labios, compartiendo un tierno beso, el cual fue interrumpido por la risa de la menor.

—¿Ahora qué, tontita?—Bromeó Jisoo.

—Acabas de proponerme matrimonio en el armario de nuestra hija, la única tontita no soy yo