Trap In Heart - [Fugo xNarancia]

Abuso De Poder

¡A D V E R T E N C I A !

Antes que nada: La trama se torna un poco oscura, pero no hay nada que temer, no tendrá mal final, solo se podrá un poco sombrío Fugo por un momento.

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Ya eran las 11 am y me había acomodado en mi nueva oficina. Era muy grande, sobraba mucho espacio. Tal vez podría decorarla con muebles caros para llenar los espacios vacíos, pero nada podría llenar los vacíos de mi corazón.

Por la puerta, se asomaron tímidamente aquellos mechones alborotados que tanto conozco.

—Felicidades por el ascenso—Dijo con una felicidad sincera— Brunito dijo que al promoverlo a usted, a mi también me ascendían, ahora tendré mi propia oficina mientras sea su secretaria.

—Puedes usar el género masculino cuando estemos a solas— le dije seriamente.

—Es la costumbre—Se acercó a mí y me extendió una cajita— Le traje esto, es una señal de disculpa, espero que todo sea como antes, sigamos siendo amigos y...

Tiré la cajita a un lado, sin ver su contenido, y bruscamente le interrumpí con un apasionado beso, atrapando sus muñecas y sin dejarlo escapar. Esta vez sí opuso resistencia.

—Oiga, ya fue suficiente con que ayer me robara mi primer beso, ya le dije que yo no soy homosexual, me gusta Trish y...

Lo acorralé en un muro vacío, y atrapé su rostro con firmeza.

—Mira Narancia, así es el asunto. Conozco tu secreto, no has terminado la escuela. Ahora soy el vicepresidente de esta empresa.

—¿Ah? ¿Y eso qué tiene que ver con tenerme atrapado y besuquearme?

—Si no quieres que revele tu secreto y te despida, vas a tener que acceder a todo lo que te pida...!TODO¡

Lamí su oreja lascivamente y llevé mi mano a su plano pecho. Puedo notar que usa Brasier con un poco de relleno. Narancia gemía y se dejaba llevar, creo que su miedo por ser despedido era mayor. Por un lado me sentía culpable, pero las ganas que le traigo a este chico son superiores a mi moralidad.

—No quiero que me despida... de verdad necesito trabajar, no tengo nada más en el mundo que mi gato. Si me echa, no tendré para pagar el alquiler y no tendré donde ir, haré lo que sea, hágame lo que quiera, pero por favor, no me eche a la calle.

—Entonces harás lo que te ordene— Robé otro beso brusco de sus labios y jalé su cabello.

—mmh... Duele

—¿Pero te gusta?

—Un poco, se siente un cosquilleo abajo.

Me quité de encima de él, y luego apreté uno de sus glúteos, posteriormente le di una nalgada y le susurré de cerca.

—Esto queda entre nosotros.

—S...si, no le diré a nadie, pero por favor, no me despida

—No lo haré si obedeces. Tengo reunión a las 9:30. Cuando esta termine, te quiero aquí, así que prepárate para debutar.

—¿Debutar? ¿Qué es eso?

—Será mejor que lo googlees por el bien de tu trasero.

—¿Me puedo retirar? Quiero ir a ordenar mi nueva oficina.

—Ve y hazlo, solo recuerda, te quiero aquí cuando termine la reunión.

Narancia de fue lentamente de mi oficina. Me tiré sobre la silla y cubrí mi rostro con ambas manos. 

¡Por qué soy tan imbécil!

No quiero tratar así a Narancia, es demasiado puro, no se lo merece, se que sólo merece amor en su vida, pero no quiero que nadie lo aleje de mi, debo probarlo, estrenarlo, debo ser yo quien lo tome por primera vez. No dejaré que escape, se que es la peor manera posible, soy un completo abusador, pero peor sería si Narancia se opusiera rotundamente, pero ha cedido con el chantaje de sus estudios, por lo que para mi, no es violación lo que haré luego de la reunión.

Rayos, en lo que estoy pensando, ¡ESTO SI QUE ES ABUSO SEXUAL Y ACOSO LABORAL! No puedo creer la clase de persona en la que me he convertido. No, es la desesperación por hacer mío a Narancia. Antes, cuando pensaba que era chica, jamás despertó un sentimiento tan salvaje y profundo, y tal vez de saber la verdad tampoco habría sucedido...

¡Pero el hecho de que él guste de alguien más es lo que me descoloca!

Necesito marcar territorio sobre mi amado naranjito, proclamar su cuerpo como mío, de nadie más. Ya dije que si no lo tengo yo, no lo tendrá Trish.

Miré el reloj y ya era hora de la reunión.

Me puse mi chaqueta roja con agujeros en los brazos, y tomé un cuaderno con un bolígrafo para tomar nota de lo que se hablara en la importante reunión de gerencia.

Fui a la sala de Reuniones, y no había llegado nadie aún. Tomé asiento en el lugar de siempre. Tras de mí, llegó Giorno, quien se sentó en la punta de la mesa y luego me habló.

—Ahora eres mi mano derecha, siéntate en la otra esquina de esta mesa, ya que tienes un cargo tan importante como el mio.

Asentí con la cabeza en silencio y me cambié de lugar. Luego comenzaron a llegar los demás. Como siempre, la reina de las odiosas llegó de las últimas, sin siquiera disculparse. Comenzó la reunión, pero Narancia no estaba esta vez. Me deprimí un poco al respecto, y me distraje pensando en qué cosas sucias le haría al salir de la junta.

Inconscientemente, hice contacto visual con Trish, le vi con cara de odio, mientras ella quedó plasmada en mi rostro y luego volteó con el ceño fruncido y un leve sonrojo en sus mejillas.

Luego de exponer mi trabajo y de ser aprobado por todos, se dio por finalizada la reunión. Pasé al baño a lavar mi cara, los pensamientos me tenían demasiado caliente y quería ser gentil con Narancia para que él recuerde con cariño su primera vez, debía calmar mis impulsos, ya que por la manera en la que estaba pensando, probablemente me colocarían en un capítulo de Mentes Criminales.

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Yapas, si es un poco fuerte esta parte de la historia, pero no se asusten.