El diario de Cero.H ||TERMINADA|| (Reescribiendo)

Capítulo 27

pov's Cero.

Intentaba dormir, pero había un ruido que no me dejaba, no sabía con seguridad que era, pero en mi interior sentí dolor, uno diferente al que yo había pasado hace unas horas.

Al fin abrí los ojos, parpadeando unas cuantas veces, me levante con cuidado, estirando mis brazos hacia el frente.

abrí la puerta del remolque y el aire frío rozó mis piernas, ____ me había prestado una pijama de short gris y camiseta de mangas largas color vino, esta me quedaba muy bien, la camiseta un poco holgada pero fuera de eso bastante bien, lo que me sorprendió un poco pues yo era mas alta que ella.

Salí dejando que mis pies tocaran el frió césped, lo que hizo que mi piel se erizara , el sonido cada vez se hacia mas y mas claro, volviéndose unos sollozos.

estos provenían de atrás de los remolques, justamente venían del pequeño bosque donde tanto me gustaba estar, me volví invisible y camine a gatas, para saber de quién eran esos sollozos.

La luna como siempre iluminaba de forma bella, para mi era mucho mas bella que el sol, dejaba pasar algunos rayos entre los árboles, por lo que era más sencillo ver y le daba un aire de cuento de hadas al lugar.

sentí ese dolor emocional más fuerte, me detuve a las espaldas de alguien, y ese alguien era número Cinco, estaba sentado en un tronco, bajo un rayo de luna y estaba llorando...

pudo ser lo peor conmigo, pero sabía que era estar solo y me negaba a verlo así, me rompia el corazon ver a Cinco llorar, aunque jamás hubiera visto al mio hacerlo pero aun asi, sentia como  se me partia el corazon.

me acerque con cuidado, puse mi mano en su espalda con delicadeza, aunque eso no pudo evitar que se sobresaltara y me apuntara al pecho con un arma que llevaba consigo, sus ojos estaban algo hinchados, y aun estaban llenos de lágrimas.

- tranquilo, no vengo a hacerte daño, ni con ganas de pelear- dije de forma dulce, alejando mi mano un poco.

- vete de aquí - me habló, frió, volviendo a sentarse en el tronco dándome la espalda.

-se que no te agrado, pero también se que no estas bien Cinco- dije volviendo a poner mi mano en su espalda, manteniendo mi tono tranquilo y suave.

- porque te importa? si bien sabes que no me agradas y tu ya lo dijiste- 

- porque- dije sentandome a su lado.

- se que es estar solo y sentir tristeza, ser el más fuerte y que no puedas acudir a nadie-

miré al suelo, sentí los ojos de Cinco puestos en mi, al parecer no esperaba que lo entendiera de esa forma.

suspiro de forma pesada, limpiando las lágrimas de sus mejillas.

- si te digo, me dejaras en paz?- 

- solamente si de verdad quieres decirme, tu y yo somos lo suficiente adultos para dejar diferencias del lado Cinco- lo mire directo a los ojos esperando su respuesta.

- supongo que tienes razón Cero, creo que te juzgué mal- 

- siempre se puede volver a empezar- dije sonriendo un poco.

- ciertamente, sabes es solo que-

su mano se tenso, volviéndose un puño.

- deje a _______- dijo con voz entre cortada.

al escuchar eso no pude evitar abrir la boca sorprendida.

- se que yo no la hago feliz, ademas ella me mintió-