Capitulo 45 (Diego Hargrevees)

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- El infeliz casi mata a Allison y está con Vanya, hay que ir tras el -

Enojado expresé a mis hermanos la solución a todos nuestros problemas, ya estaba harto. Primero Cero desaparece y ahora Allison casi muere.

- Vanya no es importante -

Cinco cómo siempre pero ahora mucho más amargado que antes me Interrumpió, sabía que el era un hijo de perra pero no tanto.

- Hey! es tu hermana - defendí por primera vez a Vanya y se sentía raro hacerlo.

- Eso es cruel hasta para ti Cinco - obviamente iba a decirle sus verdades, ya me estaba sacando de mis casillas este niño anciano.

Klaus por su parte solamente estaba en el sillón, mordiéndose las uñas, absorto en no se si eran sus pensamientos o bajo el efecto de las drogas, algo difícil de saber.

- No estoy diciendo que Vanya no me importe pero si el mundo va acabar hoy, ella morirá igual que todos nosotros -

Aquí vamos de nuevo, Cinco enojado y buscando la forma de tomar el mando, obsesionado de detener el fin del mundo. Aunque odiaba admitirlo de cierto modo tenía razón.

- Harold Jenkins es nuestra prioridad -

Y esas palabras de Cinco fueron lo único que necesitaba para darle la razón y salir a buscar a ese imbécil.

- Cierto, vamos -

Dije para poder irnos, hasta que Klaus habló. Por un segundo olvidé que estaba allí con nosotros; Nunca había estado tan serio cómo en esos momentos era extraño, pero que podría esperar de esta familia. Lo raro era normal y lo normal era raro para nosotros.

- Yo no voy -

Klaus, antes que pudiéramos decir algo, siguió dando sus razones del porque no iría.

- No, no me mal entiendan es solo que es demasiado para mi nueva sobriedad así que -

Cinco lo miraba molesto casi apunto de querer matarlo, empezó a dar lentos pasos hacia Klaus, por lo que mejor intervine.

- Vas a venir -

Dije firme, dándole una orden a Klaus. Cinco asintió a mis palabras, metió sus manos a los bolsillos del uniforme pero de igual forma apretaba los dientes, ya que se marcaba el músculo de su mandíbula.

- saben que mis poderes son inútiles, lo único que haría sería estorbar -

Intentando salir de nuestra misión Klaus empezaba a hacerme enojar y a pesar de que ya habia tranquilizado un poco a Cinco, también estaba empezando perder la paciencia.

- Klaus, arriba -

Ordenó Cinco una vez más, pero Klaus se negó, haciéndome enojar. Estábamos perdiendo tiempo valioso y de por si al parecer ninguno estaba en un buen ánimo.

Así que la decisión más sabía que pude tomar en ese momento fue lanzar un cuchillo directamente al sillón justo entre sus pies, cómo última advertencia.

- Aunque un poco de ejercicio no estaría nada mal -

Por fin se levantó del sillón caminando hacia la salida de la sala junto con Cinco. Yo estaba por salir cuando escuché unos ruidos arriba.

Demasiado ligeros para ser de Luther, muy rápidos y sigilosos para ser de pogo o Grace, mucho menos de Allison.

- Ahora los alcanzo, olvidé algo -

Dije sin despegar la vista del piso de arriba, al parecer nadie más se había dado cuenta de los pasos, solamente yo.

- Apresúrate Diego -

Cinco suspiró saliendo y cerrando fuertemente la puerta. Ignore su reacción pues había algo raro que me estaba diciendo que fuese a revisar quien provocaba ese ruido.

Subí las escaleras mirando a todos lados, tomé un cuchillo de mi cinturón para tenerlo listo por si eran otra vez Hazel y Cha-Cha o cualquier otra persona.

Ahora lo qué me había puesto más alerta eran unos libros cayendo al suelo, venían de la oficina del viejo, nadie podía estar allí, Pogo y Mamá cuidaban de Allison y Luther se había ido a no se y tampoco me importaba dónde.

Al llegar al último escalón corrí y me pegué contra la pared, empecé a deslizarme lentamente hacia la puerta, por cada pequeño paso sentía cómo la adrenalina empezaba a correr por mis venas, alerta de cualquier sonido o movimiento.

Tomé aire y abrí de un golpe la puerta, al entrar no había nada ni nadie, ni siquiera libros en el suelo, todo estaba absolutamente intacto.

- Pero que mierda -

Susurré, relajando mi mano dónde tenía el cuchillo, metiéndolo nuevamente a mi cinturón.

Juraba haber escuchado pasos y demás cosas, pero no había nada, absolutamente nada.

Salí de la habitación y fruncí el ceño,aún extrañado por lo que acababa de suceder, di un vistazo rápido antes de cerrar y al ver todo en orden por última vez, cerré la puerta, para irme con Cinco y Klaus.

Empecé a caminar hacia las escaleras cuando nuevamente escuché ese ruido de pasos pero ahora venían de la habitación de Cinco.

Me quedé escondido tras una columna para ver quien o que era, el causante de los ruidos.

Vi una sombra moverse en su habitación, se acercó a la puerta y se escuchó como la perilla empezaba a girar.

Me puse en posición para atacar a esa persona. Sabía que no era Cinco pues el estaba con Klaus y estoy seguro que no lo dejaría solo.

Al momento en que la puerta se abrió, aguanté la respiración, no moví ni un músculo, estaba esperando el momento exacto para atacar.

Cada segundo era más intenso que el anterior, escuché sus pasos acercarse a la puerta, aferré mis manos a la columna con fuerza.

Unos zapatos negros tipo de uniforme salieron de la habitación de Cinco, en cuanto los ví no esperé ni un momento y sin hacer ruido me avalancé, tacleando a aquel intruso para inmovilizarlo.

Ni siquiera me tomé el tiempo de saber si era enemigo o no, pero igual no importaba, a estas alturas todo mundo o casi todo el mundo era nuestro enemigo.

Lo único que pude alcanzar ver fue lo que me parecía una larga y lacia cabellera incolora.

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- Sandra.


Un saludo para Boy_with_glasses !!!

Ya saben si quieren un saludo en el siguiente capítulo dejaré una pregunta, deben poner mucha atención a los capítulos ya que en base a ello será la pregunta. Recuerden que el saludo es para la primera persona en resolver la pregunta y obviamente de forma correcta.

El diario de Cero.H ||TERMINADA|| (Reescribiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora