Cap. 2 "La clase de matemáticas"

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Papá estacionó en la entrada principal de la escuela, me despedí de él con un beso:
-Te quiero mucho papá, que te vaya bien en el trabajo
Papá: -Que tengas un buen día mi princesa (me dedicó una sonrisa)
Mí hermano se reía
Esteban: Por Dios, es por eso que eres la preferida de papá, eres tan lambiscona JAJAJA
-Papá: No! Solo es que tu hermana sí se preocupa por uno y no me da tantos problemas como con ustedes que siempre....
Esteban: ¡Bueno, bueno!  Ya entendí, ahora papá tenemos que irnos porque sí no llegaré  tarde a la facultad.
Papá: Cierto; adiós hija, cuidate, te quiero.
Esteban: Adiós enana, ten cuidado con los hombres, ¡te amoooo! Y recuerda, no le hagas caso a ningun mocoso de esta escuela, sí alguien se mete contigo, se las verá también conmigo... (esto último lo dijo casi en grito pues papá ya había acelerado).
Me reí de las incoherencias inoportunas que siempre tiene para decir Esteban.

Caminé hasta la entrada principal en donde se supone vería a mis mejores amigas, pero mientras caminaba en esa dirección me topaba con caras con las que jamás había notado o visto alguna vez... Era tan extraño, demasiadas personas en esta preparatoria que nunca se tiene la oportunidad de conocer a todos.
Estaba tan sumergida en mis pensamientos que no me percaté de que alguien me hablaba, hasta que sentí su mano tirando de mí brazo.
-Aaaah! ¿Qué, qué sucede? (Dije sorprendida por el bruzco movimiento mientras me encontraba con el rompecorazones de ojos verdes, él capitán del equipo futbol).
-Cam: Hola preciosa, disculpa por esto, pero te he visto distraída y supuse que no me escuchaste, así que decidí venir hasta aquí para...
-Sí, eeh! lo siento, no te he escuchado, y hola, buenos días Cam
-Cam: Sí, seguro, te veo en clase de matemáticas y de filosofía entonces hermosa (diciendo esto se aproximó a mí rapidamente dandome un beso rozando mis labios sin que pudiera reaccionar)
-¡Cam! Por favor no hagas eso...
-Sí, como digas preciosa (dedicándome una sonrisa mientras corría a reunirse con su equipo).

En eso escuché a Sophi...
-Sophi: Heeeey! Amanda, por aquí estamos
-Moníc: Amandaaaa!  Por Dios, ese cuero de hombre que te sigue, se nota que le gustas
-Sophi: Sí, ya hazle caso, o sí no regalamelo, es un bombón
-Hillary: Oigaan no, Amanda hace bien en no hacerle caso, debes hacerte del rogar, es capitán del equipo de fut, todo lo quieren fácil.
-Esta bien amigas, entiendo, pero tranquilas, no pasa nada con Cam, él es guapo pero no hay nada entre nosotros, ¿De acuerdo?
Sophi: Sí, la Santa de Amanda como siempre, amigaaaaaa!  Date cuenta, es un hombre guapísimo y es EL CAPITÁN DEL EQUIPO, todas estan tras él y el está detras tuyo...
-Mónic: Sophi por favor, no empieces JAJAJA!
-Sí Sophi, ahora no, no quiero pensar en ello.
-Hillary: vamos a clase o llegaremos tarde,  ahora tenemos matemáticas.
-Sophi: Uuuuuh!  Con el maestro más guapo...
-Sophi Dios mio, eres un caso perdido...
-Moníc: Sin duda pero vamos, que llegamos tarde.

El salón estaba acomodado de tal forma que el escritorio del maestro estaba cerca de la puerta, eran cinco filas de a 8 personas, mis amigas y yo nos acomodamos como en todas las clases: Moníc y Sophi en la primera fila y Hillary y yo detras de ellas.
El salón ya estaba llenándose, pero las primeras filas eran más difíciles de ocupar, a casi nadie le gustaba estar adelante con este maestro, pues siempre hacia que participáramos. En lo que la clase comenzaba, mis amigas platicaban sobre que color les quedaría mejor para teñirse el cabello, mientras yo escribía la fecha y garabatos en libreta y las obsevaba por momentos, cuando a la morena de cabello rizado habló
-Sophie: ¡Oh por Diooos! Miren a esos Ángeles caídos del cielo...
Al instante las tres miramos hasta donde apuntaba la mirada de Sophi, y allí fue cuando lo ví, entrando con dos amigos, que a pesar de ser guapos y de buen físico, no se comparaban con él...
Cabello ondulado, que casí caía por su frente, naríz perfilada, ojos castaños claro que resaltaban por sus enormes pestañas, una quijada que se marcaba, labios perfectos y rosados, alto y cuerpo en perfectas condiciones, pero... Su sonrisa, venía tan entretenido con sus amigos que no se percató de mí análisis detallado, y me alegro por eso, pues puedo jurar que tenía baba en los labios de solo mirarlo...
-Maestro Gabo: Muy bien chicos, ya es tarde, sientense por favor, aquí adelante hay lugares aún, comenzaré con la clase chavos...
El atractivo muchacho habló: -maestro, no suelo sentarme adelante, por favor no adelante...
-Maestro Gabo: Mmmh!  Pues cambien lugares, no me interesa, solo quiero dar mi clase
Yo no le perdí la mirada desde que entró hasta que llego a los asientos de atras del salón, unos se levantaron y caminaron hasta el frente para sentarse, mientras él y sus amigos ocuparon los lugares ahora vacios.
Lo seguí mirando hasta que la clase comenzó, el se veía increiblemente bien mientras escribía en la libreta, hasta que levantó la mirada y sus ojos coincidieron con los míos, me sentí tan apenada que mis mejillas seguro estaban tan rojas como un tomate, me sonrió de lado, y yo sin saber que hacer, volteé de nuevo al frente donde el maestro escribía en la pizarra.
Me mantuve al margen y prhibiendome mirar de nuevo.
-Hillary: hey! ¿Es guapo cierto? (Casi en susurro)
-¿Qué?
-Hillary: te he visto, desde que comenzó la clase lo has estado mirando
-No, no es cierto,  solo es, solo...
-Hillary: No te preocupes, no es malo mirarlo, ni sería malo devolverle la sonrisa, ¿No crees?.
-Sí, lo se, pero no estoy segura, me da pena... (Y le Sonreí)
-Hillary: Mírate, eres hermosa, confía en tí.
-Gracias... (Le dije a Hillary mientras alargó su brazo para acariciar mi cabello como para darme seguridad y tranquilidad)...

Un Ángel Para AmarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora