Peter Parker in the Spider-Verse

Capitulo 6: "¿Trabajo?"

La hora pico, la gente transitaba las aceras rápidamente; pasando entre varios puestos de comida, artistas callejeros y vagabundos pidiendo dinero, estando entre todos estos, 2 enmascarados, que llamaban bastante la atención.

Algunos detenían su caminata y observaban a los adolescentes con curiosidad e intriga, mientras otros simplemente los ignoraban, pasando de largo. Pero lo peatones siempre tenían algo en común, fijar su mirada aunque sea un solo segundo allí, en especial a un chico en mallas, que no paraba de gritar y ganarse la atención de los niños y sus padres.

— ¡Lleven su telaraña del Gran Spider-Man! — Exclamó el arácnido mientras hacía varias figuras con su telaraña— ¡Solo por 2 dólares tendrán una telaraña completamente flexible y 50 veces más resistente que el acero!.. ¡Y no olviden que es del Hombre Araña!

— Y si compran 2, ¡Se llevan una de la gran Spider-Girl! — Agregó señalando a Gwen. Ella solo  masajeó su brazo y saludó tímidamente a los niños con su mano. 

Todos esos gritos y anuncios de los arácnidos, realmente habían asombrado a los niños y niñas de la zona, que con una sonrisa en sus caras y bastante sorprendidos, comenzaron a rodear a los héroes, no dejándoles más opción a sus padres que tener que seguirlos.

—¿Es telaraña?

—¿Ese es Spider-Man?

—¿Quién es?

Peter se sorprendió al ver a tantos niños rodearlo, y con una sonrisa detrás de su máscara, viendo que su plan había resultado, comenzó a hacer varias figuras con sus telarañas de; cachorros, objetos, personas e incluso un mini Spider-Man, asombrando aún más a los niños, que no dejaban de babear y exaltarse.

— ¡Wow!, esas cosas son geniales— Exclamó un niño castaño, con los ojos bien abiertos— Papá, ¿puedes comprarme un mini Spider-Man?

Su padre suspiro y acercándose lentamente hacia el arácnido, sacó 2 dólares de su bolsillo.

—Oye amigo, quiero uno— Pidió el señor, extendiéndole el billete al enmascarado, que se emocionó internamente.

— ¡Claro! — Aceptó el dinero, haciendo lo más rápido posible la figura que le pedían, terminándola en cuestión de segundos. — Aquí tiene señor— Le extendió el pedido, siendo aceptado por el hombre, que miró algo extrañado el material del que estaba hecho.

—¿De qué está hecha esta cosa?, parece telaraña de verdad— Afirmó con curiosidad, sintiendo sus dedos algo viscosos— Supongo que no importa.

Y sin más que decir, el hombre se fue junto a su hijo, entregándole al niño el juguete y desapareciendo poco a poco de la vista de Peter. El solo sonrió, y con algo de felicidad observo a otros niños que lo rodeaban, viendo como incluso algunos se peleaban para acercarse a él.

—Oigan, oigan, oigan, ya... Calma— Intervino Peter, al ver como las cosas se salieron un poco de control— No se desesperen, todos tendrán su turno. — Alegó con tranquilidad— Ahora, ¿Qué cosa les gustaría que haga con mi telaraña?

El alboroto no tardó en llegar de nuevo, y con miles de peticiones y gritos, el arácnido solo suspiro.

— ¡Que haga un árbol!

— ¡Eso es tonto, mejor un auto!

— ¡Tú eres tonto!

— ¡Cállate!

Con lentitud giró su cabeza hacia Gwen, y viendo como ella observaba la esceneda de brazos cruzados, habló.

— ¿Me ayudas? — Preguntó el castaño, no dejando de escuchar el ruido de los niños detrás de él.