Capitulo 7: "Presas"

2K 143 12
                                    

La noche caía en las calles de New York, las personas poco a poco se dispersaban de la zona hacia sus casas, sin enterarse para nada de lo que sucedía a tan solo unos metros de ellos, pero no siendo los únicos, pues una encapuchada estaba igual

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La noche caía en las calles de New York, las personas poco a poco se dispersaban de la zona hacia sus casas, sin enterarse para nada de lo que sucedía a tan solo unos metros de ellos, pero no siendo los únicos, pues una encapuchada estaba igual.

Hace unos segundos que Gwen se había alejado de Peter. Estaba bastante sedienta, así que aprovechando que el arácnido se fue a comprar unos Hot Dogs, ella fue a buscar unas bebidas a otro puesto, que para su suerte, no estaba muy lejos.

Ya con las bebidas en mano, luego de comprarlas en el puesto, se dispuso a volver con Peter. A paso lento regresó por donde vino, mientras observaba algunas tiendas y casas con curiosidad, pensando en cómo todo era tan diferente a como lo conocía...

Luego de unos segundos de caminar y caminar por fin llegó donde se encontraba Peter, pero para su sorpresa, él no estaba solo, un tipo bastante corpulento: que llevaba lo que parecía un chaleco de leopardo, en conjunto con una melena de león en el cuello, estaba parado delante del chico, y la verdad, no parecía dar una buena espina...

Con lentitud la rubia se acercó por la espalda al arácnido, que parecía no estar muy tranquilo, y algo dudosa pregunto por el loco ese, que ahora que lo veía bien, parecía ser un cazador.

— Eh... ¿Quién es tu amigo, Peter? — Dio unos toques en la espalda del chico, que al instante se giró y lo miró con los ojos bien abiertos. — ¿porque lleva una melena en el cuello?, acaso no tiene calor.

— ¡G-Gwen!, gracias a dios estas aquí— Se alegró, para luego observar las bebidas que llevaba en ambas manos la chica— ¿Dónde estabas?

Ella le extendió una bebida. Algo dudoso Peter la aceptó y viendo que el otro tipo que hace 10 segundos casi lo mata, no hacía nada, levantó un poco su máscara y aprovechó para tomar un poco, estaba sediento.

— Y... ¿Vas a decirme quien es el otro? — Preguntó Gwen, observando al tipo, que parecía estar matándolos con la mirada. Peter dejó de tomar un segundo y respondió.

— No lo sé... Solo sé que intentó matarme— La rubia se sorprendió— Pero creo que se confundió de persona.

Con algo de precaución, el chico comenzó a acercarse al tipo, con la intención de explicarle de que él no es la persona a la que busca. Se detuvo a unos cuantos centímetros del señor, con las manos levantadas, dando a entender que no haría nada extraño.

— ¡Oye!, no sé a quién estas buscando, pero te equivocaste, soy nuevo en la ciudad— Informó Peter, recibiendo una mirada extrañada del cazador.

— Tu eres Spider-Man, no me engañas arañita— Contradijo con seguridad, frunciéndole el ceño nuevamente— Tienen el mismo olor... solo te cambiaste de traje.

— Espera, espera, espera... ¡No soy Spider-Man!, solo me hago pasar por él, ¡para entretener! — Alegó el arácnido. El cazador solo le sonrió.

— No me veas la cara de tonto, no cualquiera esquivaría al gran Kravinoff— Empezó acercarse poco a poco, alertando a ambos arácnidos— No tengo idea de porque estas en la calle haciendo estupideces, o de porque ahora tienes una novia araña, pero de lo que sí estoy seguro, es que ahora, me las pagaras. — Dirigió su mirada hacia la encapuchada— Supongo que puedo hacer espacio para otra cabeza más, nunca he cazado una presa femenina.

Peter Parker in the Spider-VerseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora