2.9

816 119 45
                                    

Los días pasaron rápidamente, ChangKyun y JooHeon tenían sexo de vez en cuando, quizás cuando Nanami no estaba en casa o en otras ocasiones iban a algún motel, en fin, sus encuentros no eran para nada más que tener relaciones sexuales.

ChangKyun salió de su última clase del día y se despidió de sus dos amigos para luego irse caminando a casa. Su teléfono sonó dándose a saber que había llegado un mensaje, en él decía: «te espero en motel de siempre, es la habitación 110», ChangKyun soltó un suspiro y caminó hasta la calle para tomar un taxi, nuevamente era de esos días en que a JooHeon se le había dado la gana de tener un poco de sexo luego de salir del trabajo. Pero ChangKyun aceptaba, porque de un principio él mismo fue el que dejó en claro que su relación no era más que sexo entre amigos.

Al llegar al lugar, se encontró con un JooHeon en bata sobre la cama, le miró con desgano aunque admitía que se veía malditamente bien de esa manera.

— me daré una ducha, vuelvo enseguida — se giró para caminar al baño pero JooHeon le abrazó antes.

— ¿por qué no nos damos una ducha juntos? — le mordió la oreja luego de decir aquello, causando que el cuerpo de ChangKyun reaccionara rápidamente. — estuve mucho rato esperando que creo que transpiré bastante por el calor que hace.

Caminaron ambos hasta la ducha, mientras sus labios de besaban de forma descontrolada, porque se sentían ansiosos de probar el cuerpo del otro, aunque lo que de verdad deseaban era poder tomar su corazón pero si no lo lograban, ambos se sentían felices sólo con poder tocar al contrario.

La ropa de ChangKyun fue sacada por ambos e hicieron correr el agua, ChangKyun se giró dándole la espalda a JooHeon y posicionando sus manos sobre los azulejos de la ducha, el mayor mientras tanto introdujo un par de dedos dentro de ChangKyun, generando que este soltara un fuerte gemido, comenzó a estimularlo sólo con sus dedos, mientras lo hacía y observaba aquella escena, ChangKyun gemía suavemente, llenado los oídos de JooHeon, porque para JooHeon cada gemido que daba ChangKyun en todas las veces que habían tenido sexo, quería decir que lo había hecho sentir bien

la tarde pasó rápido, ambos luego de haber tenido sexo en la ducha, lo hicieron sobre la cama de aquella habitación y luego durmieron plácidamente ahí.

El sonido del teléfono del menor le despertó, miró la hora y eran al rededor de las nueve de la noche, contestó el teléfono medio dormido y escuchó una voz feminina a través de la línea.

— ChangKyun, ¿te parece si vamos a comer juntos hoy?, Tengo que hablar algo contigo — la voz habló suavemente, intentando quizás, convencer al otro.

— está bien, mándame la dirección por mensaje — el chico cortó la llamada y miró a JooHeon. La verdad es que no deseaba ir, pero prefería estar con ella a que JooHeon despertara y que ambos estuvieran en un ambiente lleno de tensión. Definitivamente lo que más odiaba ChangKyun de haber dejado claro que su relación era solamente de sexo, era que su relación de amistad ya se había perdido por completo.

Se levantó de la cama, se dio una ducha rápida y luego de vestirse, tomó sus pertenencias y se marchó del lugar.

Al entrar al restaurante, la chica le saludó desde lejos y ChangKyun se acercó a ella.

— ¿qué deseas pedir, ChangKyun? — Nanami le miró amable. — hoy invito yo.

ChangKyun tomó la carta entre sus manos y eligió algo para comer, junto con una bebida.

— bien, ¿qué es lo que deseas hablar conmigo? — habló algo cansado ChangKyun y Nanami le miró.

— nada especial la verdad — susurró — sólo que en todo este tiempo, no he podido conocerte bien, siendo que estamos conviviendo bajo el mismo techo.

El menor asintió, la chica tenía razón, de el tiempo que llevaba ella ahí, sólo habían cruzado palabras unas cuantas veces porque el resto del tiempo ChangKyun estaba fuera debido a la universidad o teniendo sexo con JooHeon.

Comieron la comida de sus platos mientras hablaban de esto y aquello, Nanami le contaba un poco de su vida y ChangKyun, aún que le costaba, soltaba un poco de la propia.

— JooHeon ha crecido bastante bien, ahora es un chico muy guapo — Nanami miró su plato, con sus mejillas algo sonrojadas o así lo percibió ChangKyun. — es inteligente y tiene un buen trabajo en el cual gana bastante dinero, aún no sé como no se ha conseguido novia. ¿cierto, ChangKyun?

La mirada de ChangKyun bajó, algo incómodo y luego le miró.

— ¿a ti te gusta JooHeon? — preguntó ChangKyun. Nanami le miró extrañada, iba a responder en negativo pero ChangKyun no le permitió. — bueno, tampoco debería importarme si te gusta o no, sólo te puedo decir que — se levantó, dejando los servicios para comer sobre la mesa — ambos son el uno para el otro.

Caminó rápidamente, se sentía fuera de lugar, sentía que Nanami le estaba diciendo en su propia cara que estorbaba entre ella y JooHeon.

Al llegar a casa, tomó sus maletas y guardó cada una de sus cosas, miró al rededor y se percató de que aún no llegaba JooHeon, así que aprovecharía de irse sin que nadie se diera cuenta. Caminó con sus maletas hasta la sala, pero su plan fracasó porque JooHeon había abierto la puerta y le miraba algo sorprendido.

— ¿qué estás haciendo? — preguntó asustado y se acercó a ChangKyun.

— no quiero dar explicaciones, sólo dejame ir — tomó sus maletas, dispuesto a salir, pero JooHeon no se lo permitió.

— ¿qué pasó?, ChangKyun dime que mierda pasó — habló con voz fuerte pero afligida. ChangKyun no habló. — ChangKyun, entonces respondeme esto... ¿acaso tu me odias?

La mirada de ChangKyun se elevó y le miró a los ojos, aquellos ojos estaban poseídos por la tristeza pero también por la rabia.

— sí JooHeon, te odio — le respondió sin remordimientos. — ya no quiero ver tu maldita cara nunca más, ahora dejame salir.

— después de todo lo que hice por ti, ¿de verdad me odias? — susurró.

— ¿qué?, ¿ahora me sacarás toda esa mierda en cara? — el menor soltó una risa sarcástica y le miró. — bien, entonces haré algo por ti para poder pagarte, vamos pide lo que quieras menos que me quede aquí, sabes que ese será un no rotundo.

JooHeon le miró serio, unos segundos pasaron en que ninguno de los dos habló, pero para ambos aquello se sintió como minutos, largos y dolorosos minutos, porque ambos sabían que aquellos momentos, eran los últimos que vivirían juntos.

permiteme tener sexo contigo la última vez y te dejaré ir, Im ChangKyun. 



🐺🐺🐺

Bueno, aquí está el último capítulo de la semana, desde la próxima comenzaré a subir los capítulos como normalmente lo hago, una vez a la semana. 💖

Espero que estén disfrutando la historia. :(

🐺•

LET ME • JooKyunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora