Uniendo a Nuestros Padres [GABENATH] [TERMINADA]

Aclaraciones

Era la madrugada y una Nathalie exhausta se levantaba algo desganada para iniciar el día. La noche anterior habló de más con su jefe y estaba muy avergonzada, quería arreglar las cosas y una idea rondó por su cabeza.

La azabache recordó que era la primera vez desde hace mucho tiempo que Gabriel había salido al exterior, esto se debía celebrar al menos con un café.

Nathalie tomó una variante de su uniforme de siempre, en lugar de su pantalón de siempre, optó por una falda lápiz negra hasta el inicio de la rodilla, decidió no usar saco, y en lugar de su suéter de cuello alto rojo, decidió usar una simple blusa roja de botones de manga larga.
Se puso medias negras y sus tacones que usualmente usaba. Al hacer su rodete dejó suelto un pequeño mechón de cada lado y adornó sus labios con un hermoso labial cereza.

Nathalie tomó su tableta y su bolsa y salió de su habitación para despertar a los chicos.

Esta ya había despertado a su hijo, era hora de ir tras el modelo.

La mujer tocó un par de veces la puerta del chico, y al oír un murmullo fue señal de que podía entrar.
Esta abrió la puerta y Adrien escuchó cómo se aproximaba más y más ese sonido de tacones que ya estaba acostumbrado a escuchar cada mañana.
La ejecutiva se sentó en la cama del rubio y lo empezó a mover lentamente.

"Adrien... Vamos, es hora de levantarte. ¿No quieres llegar tarde a la escuela o si?" Nathalie lo despertaba siempre de una manera tan dulce, como si fuera su madre.

Adrien se volteó para mirarla y se sentó en la cama, dando un largo bostezo mientras frotaba sus ojos.
"Claro, Nathalie... Buenos días..." dijo este algo soñoliento.

La pelinegra se levantó de la cama y se dirigió a la ventana para abrir las cortinas, dejando entrar los rayos del sol que apenas se asomaban por la ciudad del amor.

"Hoy Gorilla los llevará solos a ti y a Matthew a la escuela, y su desayuno estará ya preparado cuando bajen. Me ocuparé muy temprano, iré a una junta con tu padre..." esta última frase la dijo algo nerviosa.

Y el rubio al escuchar la última oración, despertó de su estado flojo sorprendido.
"¿Mi padre saldrá?, ¿qué mosco le está picando?"

"Eso quisiera yo también saber..."

Entonces fue cuando el ojiverde sonrió ladinamente.
"¿Por eso decidiste vestirte de diferente manera, no? Me gusta el nuevo look." dejó salir un poco su voz de Chat Noir.

Nathalie lo miró sorprendida y le frunció el ceño.
"¡Adrien!, ¿cómo puedes pensar esas cosas? En fin, se me hace tarde y no quiero hacer enfadar a tu padre. Los veremos luego..." bufo esta al salir y cerró la puerta de golpe.
"...más de lo que ya está..." susurró algo triste para ella misma.

Nathalie bajó lentamente las escaleras y Gabriel ya la esperaba a un lado de la puerta principal. La mujer se tensó pero ocultó todo sentimiento con ese rostro frío y serio de siempre.

Gabriel abrió los ojos como platos al ver a la dama bajar. Nathalie a veces cambiaba de colores de su uniforme, pero nunca había usado una falda o blusa así. Su variante de peinado, esos labios rojos que contrastaban perfectamente con su pálida piel y su parte de zafiros. Debía admitir que se veía muy bella.

"Buen día señor Agreste. Lamento que me haya esperado, los chicos son algo difíciles de despertar..." se disculpó la azabache aún con algo de remordimiento por lo de anoche.

"Eso es totalmente comprensible, Nathalie. Aún estamos a tiempo. Vamos" sonrió este sinceramente mientras le abría la puerta a la dama para que saliera ella primero.