Kinktober 🎀 NCT

Día 5: Hotdogging |NoHyuck|

«Sé que tal vez sea tranquilo
tal vez sea tímido
pero siento ganas de hablar y bailar cuando veo a ese chico
(...)
no puedo contenerlo, no puedo controlarlo...»

Haechan se dejó convencer por sus amigos para asistir a un club nocturno. Desde el primer segundo que pisa el lugar, se siente abrumado y el humo del cigarro limita parcialmente su visión.

Son sólo cuatro chicos que acaban de cumplir la mayoría de edad, pero que quieren jugar a ser adultos. 

Tristemente, Donghyuck es el más tímido de todos. Mientras Chenle, Jaemin y Renjun parecen estar maravillados con al ambiente de luces de neón, él siente que está temblando. Definitivamente no es su ambiente, pero sus convicciones son débiles, al parecer.

— Haechan, ¿quieres, por favor, quitar tu cara de 'Oh mierda, es la primera vez que entro a uno de estos lugares'? — le grita en el oído Renjun, tratando de hacerse escuchar por encima de la intensa música del lugar.

Haechan se remueve ligeramente. — Pero es que sí es la primera vez.

Renjun pone los ojos en blanco. — ¡Jaemin! Ven acá.

El castaño interrumpe su tarea de guiñarle el ojo a algunas chicas que se le han acercado. — ¿Qué? — responde visiblemente irritado.

— Haechan está poniendo cara de presa fácil, la gente no tardará en burlarse de él. — Renjun  explica, intentando ayudar a su amigo. 

Chenle les hace señas a unos metros de distancia, mostrándoles que ha encontrado un espacio libre en la barra para que pidan de beber. — A ver, Renjun, es cosa de embriagarlo y su verdadera personalidad saldrá a flote, te lo prometo. — les explica, caminando hacia la barra para reunirse con Chenle. — A ver, Lele, pide tú el alcohol. Algo poderoso para que el buen niño Haechan se desenvuelva.

El chino se ríe. — ¿Sigue avergonzado?

Donghyuck se sonroja. — ¿Quieren parar de hablar como si no estuviera aquí? Además, mira la ropa que me pusieron, ¿cómo no voy a estar avergonzado?

Renjun interviene otra vez. — Te ves genial. ¿Ya notaste lo bien que contrasta la cadena de plata con tu cabello gris? Amigo, somos unos genios. Te ves fabuloso.

— Al menos pudieron dejarme abotonar toda la camisa.

Jaemin niega, alzando una ceja.— No, no. Los botones libres le añaden estilo, igual que el simulador de arete, ya que no te has querido oradar las orejas.

Chenle los interrumpe, dándole la espalda a la barra para dirigirse a ellos. — Tengo el alcohol ahora.

Jaemin fija su vista en los pequeños vasos de shots. — ¿Qué pediste?

El menor de todos se encoge de hombros. — Vodka.

Renjun y Jaemin se miran, dándose a entender entre sí, que darle una bebida tan traicionera a alguien con tan poca tolerancia al alcohol es pésima idea. — Lele...

— Tú dijiste que algo para que Haechan se desenvolviera. Yo obedecí. — responde con su típico tono despreocupado.

Jaemin toma su respectivo vasito e ingiere el líquido de un sorbo; después, le retira a Chenle otro de los vasos y se lo extiende a Donghyuck, quien lo mira dudoso. — Anda, para que pierdas el miedo.