C a p í t u l o 21

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[Voy a incluir algunos saltos en el tiempo]

JOAQUÍN

Me dolía la idea de tener que separarme de él, pero también sé que debi entender desde el inició de éste "Juego", que el no era; no es mío.

Estoy pensando en regresarme por un tiempo a Bogotá, sería bueno distanciarme por un momento de ellos. Mañana lo veré, es muy tarde.

NARRADOR.

El sol salía anunciando un día más, las 7 de la mañana marcaba el reloj; el grupo conformado por 5 personas, estaba por tomar el avión, cada quién con problemas distintos. Emmanuel y Diego discutian por una bolsa de papas fritas, Emilio tenía una revolución mental, Joaquín por su parte, miraba a la nada buscando alguna manera de explicar "¿Por qué el destinó no es como uno siempre lo desea o planea?".

Pasadas las horas correspondientes a su viajé, llegando a su destinó Joaquín recogió maletas y se despidió de cada una de las personas, con Emilio simplemente soltó un pequeño "Hasta pronto". Emmanuel sugirió llevar a todos a sus respectivas casas pero el castaño solo dijo que irían por él.

-¿Hablaste con él?- Preguntó Emmanuel, una vez el menor se fue.

-¿Cómo quieres que lo haga?, me evita o siempre saca a María como tema principal- el rizado daba un sorbo a su café.

-Tienes que hablar con él, si de verdad lo quieres hazlo, habla claro con los dos- sugirió Diego.

-Hablaré con María en cuánto llegué a casa.

-Suerte, esperó no la cagues amigo- El mayor tomo a su amigo del hombro y lo sacudió un poco.

[...]

Aquél chico salió corriendo de su coche, para después tocar la puerta de la casa de su prometida.

-¡María!, ¿Estás?. Solo bastaron unos segundos para que la chica abriera la puerta.

-Hola amor, ¿Que tal tu viajé?- La chica trató de besar a Emilio, pero éste la alejó- ¿Qué pasa?.

-María, voy al punto, ¿Es o no mío?.

-¿Quién?, ¿El hijo que esperó?; es totalmente tuyo, ¿Qué estupideces preguntas?.

-Necesitó una prueba de paternidad.

-Cuándo quieras, estoy cien por ciento segura de que es tuyo.

-Pero quiero que sepas algo, si ése hijo resulta ser de alguien más, te alejaras de mí y me dejaras en paz, no harás tonterías ni mucho menos intentaras separarme de las personas que amo; por el momento la boda se suspende, ¿Estamos?, te cuidare durante éste tiempo pero nada más, no me diras "Amor", me llamaras por mi nombre. ¿Está bien?.

-Emilio, no veo necesario esto, la boda no tiene por que posponer...- La chica fue interrunpida por el joven.

-No, claro que se pospone, quiero estar seguro de casarme con la persona correcta- subió el tono.

Y es qué después de esa charla quién se imaginaria lo que pasaría con ésos chicos, ¿Las cosas seguirán igual?

7 MESES DESPUÉS...

Las cosas entré Emilio y María marchaban normal; tal y como lo acordaron, Emilio cuidaria de ella, sin embargo la boda si terrmino por posponerse, El padre de esté no estaba tan contento con aquélla decisión ya que veía estúpido el pensamiento de Emilio. Hace unos días llegaban los "amigos" de María; Marco y Abraham, quiénes venían gracias a que María los había llamado.
Joaquín por su parte se había alejado del rizado, mantenía distancia para procurar no ser lastimado, sin embargo lo seguía y seguira amando. El sol no puede ocultar lo que siente al ver a la Luna. Por que así es el amor.

Nikolas, sabía que lo mas difícil venía, el saber si ese hijo era, o no suyo. Y antes de saberlo tenía que enfrentar a Emilio, diciéndole lo que mantenía con María.

NIKOLAS

Sabía que tendría que enfrentar esto, tengo 23 años y tengo qué afrontar las consecuencias. Joaquín se va en un par de semanas y quiero dejar esto arreglado, para que mi amigo no se valla con el pendiente.

-Joaquín voy a... Hablaré con Emilio- Me aseguraba de que el pudiese escucharme.

-Claro ve... El botiquín está listo, solo faltan los golpes- bromeaba desde el baño.

-Eres un estúpido, esto es serio- Le gustaba hacer ese tipo de bromas ante esto- sinceramente tengo miedo.

-Pues... Solo, suerte daré el mejor discurso en tu funeral, lo prometo.

-¿Puedes dejar de bromear?, esto es serio.

-Discúlpame, ahora ve...- Fue lo último que escuché antes de salir de mi casa.

Al llegar a la casa de Emilio, respire lo mas profundo con los nervios recorriendome por todo mi cuerpo, estaba seguro de hacer esto si el responsable soy yo, pues así sera, yo me haré cargó de esa pequeña niña, por qué si, era una hermosa niña la que estaba en el vientre de María; Me dirigí a la puerta respire otra vez y toqué tres veces...

-¿Quién?-Una voz masculina respondió ante los pequeños golpes.

-¿H-hola?, soy Nikolas buscó a Emilio- Estaba un poco ansioso por saber de quién era esa voz.

-Ah Hola, ahora lo llamó- Al abrir la puerta, pude percatarme de que no era Emilio y ni uno de sus amigos, no lo conocía; Alto, no tanto 1.70 de altura, complexión delgada, cabello castaño, ojos color miel. Me dio igual quién era- ahora viene.

-Gracias- Esperé menos de 5 minutos, el rizado ya venía hacía mí, di un último suspiró antes de comenzar a hablar.

-Hola, ¿Nikolas?, ¿Que haces aquí?- chocamos las manos.

-Necesito hablar contigo- lo tomaba por el hombro.

-Si... Dime, ¿Todo bien con Joaquín?-. Abrió un poco los ojos.

-Si;no todo bien con el, el tema es... María.

-¿Que hay con ella?- No torno preocupación alguna.

-Éste... bueno, es que es entré los tres, ella, tú y yo- Lo señalé y luego me señalé a mi- Te lo voy a decir así de una- asintió- María y Yo teníamos una relación, te lo iba a decir luego, pero es mejor que lo sepas ahora, antes de que nazca la niña, ocupamos saber quién es el padre, ¿No?.

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¡Ya le dijo! Así de una. Amigoooouuuusss no sé cuándo voy a actualizar, ya que no tengo muy buena señal aquí por mi ranshito):

||ʟᴀ ʙᴏᴅᴀ|| ᴇᴍɪʟɪᴀᴄᴏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora