¿¡EN QUE LÍO ME METÍ!?

¿Está todo bien?

Umi: ¿Que esperas? Dilo de nuevo -insistía la peli azul mirando fijamente a la menor que tenía en frente-

Rin: no es necesario umi-chan nya, ya la has hecho repetirlo demasiadas veces -le decía la chica gato mientras jalaba un poco la manga de su camiseta- se que estás emocionada pero...

Umi simplemente la ignoró y siguió insistiéndole a la niña para que hablara, Rin decidió quedarse callada para luego dirigirle una mirada cansada a la pelirroja y a la rubia que se encontraban en el lugar, estás respondieron asintiendo con la cabeza, umi se estaba pasando de verdad.

Desde que la pequeña kanan había dicho su primera palabra umi no dejaba de insistirle para que dijera nuevas, lamentablemente su plan funcionó y desde entonces cada vez que la menor aprende algo nuevo la primera reacción de la arquera es llamar a sus amigas diciendo que es algo urgente para luego simplemente hacer que la pequeña peliazul diga la misma palabra cientos de veces durante dos horas o mas y esto claramente tenía artas a las pobres chicas que solo le seguían el juego para complacerla.

Umi: ¿Pasa algo kanan? ¿Porque no hablas?

Eli: umi...ella ya se durmió.

Umi: ¿En qué momento?

Maki: hace como media hora
-dijo mientras le dedicaba una mirada agotada- umi, deberías acabar ya con esto.

Umi: ¿acabar con que?

Rin: ¿¡¡Como que con que nya!!? -vociferó la menor de las musas- ¡Llevas dos malditas semanas con la misma rutina y la pobre carmen no puede decir una palabrita porque automáticamente enloqueces, incluso hiciste que nozomi-chan, kayo-chin y nico-chan se cansaran de venir a verte! ¡nisiquiera la jodida panadera duró más de tres días nya!

Maki: c-cálmate rin -dijo mientras la miraba con sorpresa y miedo-

Eli: el vocabulario jovencita!

Umi: primero que nada, su nombre es kanan, no carmen y te pido que bajes la voz o podrías despertarla.

Rin: no me estás escuchando nya...

Umi: ¿Como dices?

Rin: ojalá kotori-chan te dejé por tu hermana nya!!! -dijo mientras salía de la casa rápidamente hecha un mar de lágrimas- umi-chan antes eras chévere!

Eli: umi! Hacer enojar a rin es pena de muerte.

Umi: pero yo no hice nada...

Maki: bueno, yo también me tengo que ir, nico-chan está teniendo problemas con dia.

[Nota del autor]: sip, leyeron bien, en esta parte de la historia tanto Mari como dia ya nacieron, solo quería aclararles eso.

Umi: eh, si hasta luego.

Eli: iré contigo, necesitó que me lleves a un lugar en tu auto -la rubia sonrió y apretó un poco las mejillas de umi- nos vemos luego demonio azul.

Ambas mujeres salieron dejando solas a las dos peli azules, umi se quedó mirando fijamente a kanan con una sonrisa en sus labios y no pudo evitar sentarse en el piso de madera para acariciar su cabeza con ternura.

Umi: me pregunto que estará haciendo kotori...-dicho esto soltó un gran suspiro y recostó su cabeza en el sofá- ojalá y vuelva pronto.

Narra kotori:

Por fin terminé con otro día de interminable trabajo y ya estoy lista para volver a la habitación mí hotel, jamás pensé que un desfile moda podría llegar a ser tan aburrido y agotador como este, pero con solo pensar que dentro de algunos pocos días podré volver a ver a umi-chan todo ese cansancio se convierte en Alegría, aunque últimamente he recibido llamadas un tanto extrañas de las chicas diciendo que umi-chan se había vuelto loca y cosas así pero no le di tanta importancia al tema y simplemente me lo tomaba a juego, después de todo umi-chan es el ser más puro y firme que existe ¿Verdad?

Kotori: hasta que por fin terminanos, ¿cuando será último desfile de modas takada-san? -dirigí la vista hacia mi asistente la cual se acercó a mí con una sonrisa-

Takada: dentro de dos días sonoda-san, luego podremos finalmente volver a Tokyo -dijo mientras dejaba un mechón de cabello detrás de mi oreja lo cual me pareció extraño pero no le di tanta importancia- sonoda-san, cuando todo esto termine ¿No le molestaría salir conmigo a cenar?

Kotori: ¿eh? claro, no hay ningún problema, puedo llamar a alguna de mis amigas para que se encargue de mi hija.

Takada: ¿y que hay de su esposa?

Kotori: pues estará cenando con nosotras tontita -dije mientras le dedicaba una sonrisa, me di cuenta de que estaba por decirme algo pero en ese momento mi teléfono comenzó a sonar- disculpa un momento, ¿Hola?

Maki: ¡Si no vuelves en estos momentos a Tokyo juro por mis tomates que te volverás viuda!

Kotori: ¿onee-chan?...aaah ya veo, umi-chan se está pasando otra vez.

Maki: ¡kotori! Eli y yo íbamos de camino a nuestros hogares pero tuvimos que parar porque encontramos a rin incendiando su teléfono en medio de la calle diciendo que no volvería a contestar una llamada...¿De quien crees que es la culpa?

Kotori: no exageres, seguramente debe haber otro motivo y si me disculpas debo colgar.

Maki: pero... ¿hola?

Kotori: ahora sí takada-san, ya puedes decirme.

Takada: pues...sobre la cena yo quería que...-pero nuevamente el teléfono volvió a sonar y nuevamente tuve que contestar la llamada-

Kotori: es umi-chan, disculpame otra vez pero debo contestar, si gustas podemos hablar después -dije colocando nuevamente el teléfono en mi oreja- Holi amor ¿Pasa algo?

En ese momento vi como mi secretaria salía de la habitación del hotel con una expresión que estaba entre rabia y ¿Desilusión? No sé bien que le pasa pero de seguro no debe ser nada grave, pero bueno hablaré con ella más tarde.