Compromiso ✔️

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Sus días en Hasetsu estaban por terminar. Esa sería la última noche que pasarían ahí; tenían que regresar a Rusia a primera hora. Viktor y Yuuri habían mantenido su distancia desde el incidente con su madre. Acordaron que el ruso se quedara en una habitación del hotel.

Sabía que su pareja era una persona amada pero, el ruso no se esperaba que tantas personas acapararan a su hermoso omega. Yuuri ayudó a Minako un día en su academia, pasó otro patinando en el Ice Castle con los Nishigori, ya que las trillizas le pidieron lecciones de patinaje; era algo que Viktor no sabía, él también llegó a practicar patinaje; otro el omega se lo dedicó a su familia.

Esos tres días de estancia cerca de sentir una conexión más profunda con Yuuri, se dio cuenta de la gran brecha que creció. No quería ser egoísta pero no pudo evitar sentirse celoso y solo, más con la decisión de dormir en habitaciones separadas.

Estaban disfrutando del atardecer en la playa. Viktor estaba serio, no era usual en él. Yuuri estaba preocupado. Recostó su cabeza en el hombro del platinado y tomó su mano.

—Vitya... ¿estás molesto?
—No amor ¿por qué lo preguntas?
—Por tu aroma, es un poco amargo... —dijo sonrojado y feliz.
—Me alegro que ya puedas comenzar a detectarme —lo abrazó.
—Yo también estoy feliz... Entonces... ¿Qué sucede?
—Yuuri —no quería mentirle— ¿Estas seguro de... que no quieres quedarte? —vio que Yuuri iba replicar— Déjame terminar, obviamente no quiero alejarme de ti, pero veo cómo te han extrañado tu familia y amigos. Fueron 5 años que vivieron en la zozobra. Se nota que tu familia te desea de vuelta y tú también quieres estar con ellos...
—Viktor...
—No me respondas. Piénsalo un poco... me adelantaré a casa amor. Espero tu respuesta en la cena —Viktor lo besó y se encaminó al onsen...

Viktor no quería poner a Yuuri en una encrucijada pero al ver lo feliz que el omega se veía lo hizo dudar de si era buena idea que regresara al lugar donde tanto había sufrido. Había tomado la decisión de aceptar lo que decidiera, aunque tuvieran que separarse.

Yuuri por su parte, hizo caso al alfa; Viktor tenía razón quería quedarse, estar con su familia y amigos pero no podía dejar al ruso. Realmente no había mucho que pensar su decisión estaba tomada desde Rusia.

—¿y el Katsudon? —preguntó el rubio quien descansaba en el tatami de la sala.
—Está meditando y deja de decirle Katsudon.
—Le va el apodo...
—Fue mala idea contarte lo del problema de peso de Yuuri —suspiró— Por cierto ¿Donde está Otabek?
—Está tomando un baño, estuvimos todo el día caminando...
—Chicos —interrumpió Hiroko, quien traía una charola— ¿Quieren mochi y té?
—¡Claro!
—Vicchan —dijo la madre del omega— ¿porqué Yuuri no está contigo?
—Él está meditando si debe quedarse con ustedes —se sinceró.
—¿Qué? Espero que tú no le hayas hecho esa sugerencia —reclamó el rubio, el mayor sólo asintió— ¡Calvo! ¡Yuuri dijo que regresará con nosotros! —se quejó molesto y le dio la espalda.
—Vicchan, sé que acaparamos a Yuuri estos días pero... ten un poco más de fe en él...
—Señora...
—Mi cachorro, puede ser terco y algo inseguro pero su lugar no está con nosotros...
—¿Cómo es que...?
—Te llevó unos cuantos años de vida, sé reconocer las actitudes de mi cachorro. Yuuri no te dejaría, su comportamiento es diferente al que tuvo con ese Beta... él está feliz, está enamorado de la manera correcta —sonrió Hiroko— Toshiya y yo estaremos felices si eres tú con quien está nuestro hijo.

La sonrisa de la mujer lo hizo recobrar un poco de la confianza ahora sólo faltaba escuchar la respuesta del omega, que para su madre era más que obvia.

Yuuri llegó justo a la hora de la cena, Viktor, Otabek y Yuri ayudaban a poner todo en la mesa. Viktor rehuyó la mirada de Yuuri. Todos comían en silencio, era notoria la tensión y los nervios del ruso.

—Mamá... papá... Mary... Yo los extrañé mucho todos estos años y tomé una pésima decisión en ese entonces... he disfrutado mi estancia aquí y la verdad quisiera quedarme pero... yo no quiero alejarme de Viktor... papás, hermana por favor, permítanme volver a mi hogar con la persona que amo... —imploró Yuuri.
—Claro hijo —respondió Toshiya— Confiamos en Viktor y sabemos que es la mejor persona que pudiste escoger.
—¡Gracias!

Viktor no daba crédito a lo que el japonés le había dicho a su familia, estaba impactado y feliz.

—Calvo... cierra la boca te entrarán moscas.

Viktor no pudo contener su emoción. Yuuri lo había elegido. Salió corriendo del comedor. Todos se quedaron extrañados, regresó al lugar pero ahora tenía una caja en su mano. Era parecida a la del anillo que le había dado el día del restaurante. Yuuri se puso felizmente nervioso.

—Yuuri... éste es el anillo con el que vine a pedirte matrimonio hace casi 6 años... para mi desgracia no te encontré pero yo sabía que algún día te lo podría entregar... Yuuri cásate conmigo por favor.
—¡Sí!

Los presentes aplaudieron, mientras los recién comprometidos se abrazaban. Brindaron con Sake después de cenar para celebrar, la futura unión. Luego de la algarabía todos fueron a dormir, el día siguiente sería uno ajetreado. Viktor y Yuuri durmieron juntos en la habitación del ruso, debían descansar luego tendrían tiempo para ellos.

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Capítulo corto y ya queda poco para terminar esta historia ☺️

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